Juan Manuel Quesada Espinoza, futuro presidente ejecutivo de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope), afirmó estar dispuesto a eliminar costos absurdos, en la operación de la empresa estatal, que afectan los precios de las gasolinas y el diésel.
Una vez que el presidente electo Rodrigo Chavés oficializó su designación en el cargo, al mediodía de este martes, Quesada dijo que su labor principal será hacer eficiente el funcionamiento de la empresa pública y evitar gastos innecesarios para, a partir de ahí, evaluar cómo traducir los ajustes en una reducción del precio de los combustibles.
“Necesitamos que la prestación de servicios como el que brinda Recope se dé de forma eficiente, así que los esfuerzos los vamos a redoblar en ese sentido: en buscar deficiencias, en eliminar costos innecesarios o absurdos que de alguna forma afectan las tarifas que pagan los usuarios”, declaró el futuro jerarca.
A Quesada se le consultó si ve algunos espacios donde puede reducir costos para bajar tarifas o si tiene una opinión sobre la iniciativa de ley que propone reducir en ¢100 el impuesto a los combustibles.
Sobre lo primero, el futuro jerarca reiteró: “Mi pasado fue como intendente de energía (de la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos); ahí me tocó regular a Recope. Básicamente, donde vemos espacio es un tema que vamos a trabajar a partir del día cero: vamos a redoblar esfuerzos para atender la instrucción clara que ha dado el señor presidente (electo) en el sentido de buscar eficiencias. En donde se pueda, ahí lo vamos a hacer”.
Sobre la iniciativa de ley, Quesada indicó que el análisis lo realiza “el Ministerio de la Presidencia y ellos son los que están trabajando en eso”.
Quesada asumirá el cargo el próximo 8 de mayo, en sustitución de Alejandro Muñoz, actual jerarca. Tiene 43 años y es abogado de profesión. Anteriormente, entre el 2013 y 2016, fungió como Intendente de Energía de la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep).
Cuando Chaves anunció su designación, dijo que Quesada conoce muy bien a Recope, por lo que le encomendó la misión de reestructurar la institución para hacerla más eficiente. “Pero verdaderamente la misión es alivianar el costo de los hidrocarburos en la mayor medida posible, para que ese costo deje de ser el lastre tan grande que representa en este momento”, le encomendó Chaves.
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Durante la campaña electoral, Chaves aseguró que privatizar Recope no tiene sentido. Más bien, añadió el entonces candidato, lo ideal sería reducir el margen de operación de la empresa estatal por cada litro de diésel y gasolina, para hacer más barato su costo al consumidor. En el caso del diésel equivale al 7% y el de gasolina al 6%.
“Si usted revisa los indicadores de eficiencia, el negocio de comprar derivados del petróleo, traerlos a Moín (puerto de Limón), enviarlos al Alto de Ochomogo (en Cartago), luego a La Garita (Alajuela) y de ahí a (puerto) Caldera, con una capacidad instalada, con una infraestructura que ya está amortizada, no cuesta lo que gasta Recope.
“Entonces, ¿privatizarlo? No tiene sentido. Yo lo que quiero ver son los números de Recope y ver si podemos reducir el margen del 7% que tiene, para lograr eficiencias y transmitir de manera inmediata al consumidor la reducción de ese margen”, dijo Chaves, durante un conversatorio con dirigentes de los sindicatos de educadores, a mediados del mes de marzo.