Cuatro fracciones legislativas lanzaron fuertes críticas, este miércoles, contra la nueva versión de la ley jaguar que el gobierno presentó el martes por la mañana, luego de que la Sala Constitucional declaró inconstitucionales los cuatro artículos consultados por el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE).
Diputados de los partidos Liberación Nacional (PLN), Unidad Social Cristiana (PUSC), Liberal Progresista (PLP) y Frente Amplio (FA) señalaron que la nueva versión del proyecto nació del apuro, la desesperación, el atropello y el afán de seguir distrayendo al pueblo de los verdaderos problemas nacionales.
Las críticas surgieron durante un debate reglado de hora y media, centrado en el por tanto de la Sala IV sobre la iniciativa que el mandatario Rodrigo Chaves planteó llevar a referéndum. Los artículos fueron declarados inconstitucionales porque quitarían herramientas de fiscalización a la Contraloría General de la República (CGR).
“Ese proyecto nuevo, que ayer corrieron a presentar, anuncio que también es inconstitucional”, aseguró este miércoles, en el plenario de la Asamblea Legislativa, el jefe del Partido Liberación Nacional (PLN), Óscar Izquierdo.
Izquierdo explicó que los señalamientos sobre el nuevo texto se los comunicó el abogado constitucionalista Alex Solís Fallas, uno de los abogados que asesoró al presidente Chaves en la construcción de la primera versión de la reforma a las potestades de la Contraloría, y quien también había afirmado que el proyecto presentado por el Poder Ejecutivo era inconstitucional.
“Es inaceptable que, ante la censura constitucional de un proyecto por falaz e inviable, Chaves opte por desviar la atención, presentando otro proyecto, sin contar con la integralidad de la sentencia, de manera improvisada. Quiero ser claro, la integralidad de la sentencia es vital para entender el por tanto”, apuntó el vocero del PLN.
Izquierdo fustigó que Rodrigo Chaves diga que la bola está en la Asamblea, porque “esto no es una mejenga”, sino que se trata de presentar buenos proyectos de ley. Para el liberacionista, el mandatario refleja que está agotando su recurso de “vociferar” y culpar a otros por su incapacidad de hacer su trabajo.
La jefa del PUSC, María Marta Carballo, considera que la Contraloría ha sido una piedra en el zapato y ha coadministrado. No obstante, afirmó que Chaves parece no querer un cambio real, pues presentó una nueva versión “solo por salir del paso”.
“Ahora eliminan cuatro articulitos que, unos días atrás, eran importantes y ahora resulta que ya no. Eso lo que demuestra que es la nueva propuesta se hizo sin afinar el lápiz, ni la redacción”, alegó la socialcristiana.
Ella también cuestiona que Rodrigo Chaves hable de referéndum para polarizar, y lamentó las razones por las que este gobierno insiste en una consulta popular. Sin embargo, aseguró que, si mañana se fuera a votar una convocatoria a referéndum, la mayoría de diputados del PUSC la votarían de manera afirmativa.
Vanessa Castro, también de la Unidad, dijo que se utilizó el primer proyecto para distraer a la población de los verdaderos problemas nacionales, y aseguró que lo mismo se hará con la segunda versión.
En tanto, el jefe del PLP, Luis Diego Vargas, consideró que el Poder Ejecutivo se ha enfocado en mentir, más cuando “corren para tener a la gente creyendo en la mentira de que corrigieron algo y presentan la versión 2.0″.
“El que mucho corre, pronto para. Presentar el mismo proyecto, pero recortado, es solo para el discurso. Me dan pena. Si por la víspera se saca el día, vamos por otro rollo igual, porque necesitan seguir en campaña”, añadió.
La independiente Gloria Navas auguró que el “jaguarcillo (en referencia a la nueva ley presentada) no va a llegar muy largo” y apuntó que la manipulación de Zapote no se va a aceptar, mientras que la frenteamplista Rocío Alfaro lamentó la pérdida de tiempo y recursos en que hizo incurrir Rodrigo Chaves a la Asamblea, durante las sesiones extraordinarias, centrándola en el asunto de la ley jaguar.
Alfaro criticó que la nueva versión se centre en dar concesiones con proyectos fantasma, dando falsas ilusiones al pueblo, y tratando de otorgar contratos a dedo, para “introducirse en la fiesta de los privilegios”.