La expresidenta Laura Chinchilla alerta a sus copartidarios de Liberación Nacional (PLN) sobre los esfuerzos que emprenden grupos internos para impulsar una candidatura de consenso, sin necesidad de ir a una convención.
En su criterio, más bien pareciera existir un intento por descarrilar precandidaturas presidenciales.
De acuerdo con la exgobernante, los verdiblancos deben tener cuidado para diferenciar entre las iniciativas sinceras de búsqueda de consensos a lo interno del partido, y los intereses que puedan tener otros de anular a sus oponentes en las etapas iniciales de la carrera por la presidencia de la República.
Chinchilla afirma que a lo interno del partido hay quienes plantean la posibilidad de un candidato de consenso con buenas intenciones, ya sea por evitar que una elección interna fracture aún más al partido, o por ser consecuentes con la coyuntura de crisis sanitaria y económica.
La exgobernante, no obstante, dijo que también hay suspicacias justificadas sobre las verdaderas razones que pueden motivar a algunos a plantear una campaña sin competencia.
“A veces pareciera que la intención, más que integrar a todos los aspirantes en el proceso a través de la construcción de un acuerdo que los incluya, la intención pareciera ser más bien la de descarrilar a alguien más”, afirmó Chinchilla.
En segundo lugar, la exgobernante mencionó el riesgo de que el proceso interno del partido lo secuestre un grupo que se autoproclame como representante de todo el partido, sin tener legitimidad para hacerlo.
“Recordemos que también es muy dañino para la democracia interna de un partido el que las candidaturas las definan intereses corporativos, sean estos de naturaleza territorial, sean estos de naturaleza económica, o empresarial o sean de naturaleza gremial”, señaló Chinchilla.
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De acuerdo con la expresidenta, el riesgo en ambos casos es dañar la democracia interna de la agrupación.
“Un candidato de consenso no es lo mismo que un candidato impuesto, y mucho menos si es un candidato impuesto por un grupo dentro del partido. Esto le haría muchísimo daño al partido, un daño quizás similar al daño de ir a una convención en donde repliquemos lo que pasó hace 4 años”, sentenció Chinchilla.
Para la expresidenta, si persiste la idea de buscar un consenso partidario de cara a la elección del 2022, debe hacerse con garantías para todos los interesados en la candidatura.
“Esto puede tener sentido siempre y cuando sea el resultado de un amplio proceso de consulta y que a su vez facilite el acuerdo de quienes están aspirando a participar en la convención, nunca de espaldas a ellos”, aseveró Chinchilla.
Municipalistas insisten
Nixon Ureña, alcalde de San Ramón, es vocero del grupo de alcaldes que impulsa la idea de que el sector municipal impulse a un único candidato.
Consultado sobre dicha propuesta, Ureña afirmó que sigue en marcha.
“Por supuesto que sí, en el caso mío particularmente yo creo que por beneficio del partido, necesitamos crear ese tipo de consensos. El país también lo necesita, no podemos polarizar tantísimo. Pero bueno, eso es parte de lo que estamos tratando de lograr dentro del gremio de los alcaldes”, afirmó.
El ramonense dirige a un subgrupo que promueve la candidatura del diputado Roberto Thompson. Sin embargo, evitó decir si la mayoría del movimiento de alcaldes, conformado por 42 personas, se inclina por apoyar al legislador.
“Pueda ser que yo diga, ‘mirá, yo quiero apoyar al candidato x,’ pero puede ser que ese candidato no se inscriba o que haga una alianza con algún otro, entonces antes de decir una cosa como estas, creo que lo más prudente es esperar a la inscripción”, afirmó el ramonense.
De momento, en Liberación se perfilan 11 posibles precandidatos. Hasta ahora, solo Álvarez se pronuncia a favor de consensuar un solo nombre. Entre los demás hay algunos que dicen estar dispuestos a conversar y otros rechazan la idea de plano.
Según las reglas partidarias, si uno solo de los precandidatos rehúsa declinar su aspiración, la convención tiene que realizarse.
Ureña afirmó que en ese caso, los alcaldes buscarían movilizarse “en una mayoría de consenso”, a favor de una misma persona.
“Eso es lo que trataríamos de buscar para generar el menor daño posible, no se puede limitar a nadie a que participe, todas las personas tienen su derecho de elegir y ser electos y eso también se va a respetar.
“Lo que estamos buscando es que si hay un grupo bastante importante, con algún precandidato y se pueden lograr alianzas con algún precandidato, pues eso ayudaría o beneficiaría al partido de cara a las elecciones nacionales”, afirmó el alcalde ramonense.
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Reunión cancelada
Como parte de su estrategia, los alcaldes de Liberación habían planeado reunirse este sábado en La Garita de Alajuela, en el Hotel Martino. Sin embargo, la cita se suspendió.
Según Ureña, la idea del encuentro era que los municipalistas discutieran su “ideal de descentralización y de proyectos país”. Además, iban a analizar a los precanidatos presidenciales.
Gilberth Jiménez, alcalde de Desamparados, dijo a La Nación que la reunión se pospuso para esperar la inscripción formal de precandidaturas.
“Yo creo que hubo consenso de todos, no hubo presión de ninguno para decir ‘hágase hoy o tal día’. El momento oportuno no era este y dado que algunos pidieron espacios para poder analizar las propuestas, otros que querían conocer a los otros (precandidatos) y en razón de que esos espacios no los habíamos logrado agotar, entonces era muy importante ese espacio”, afirmó Jiménez.
Según el alcalde desamparadeño, en este tiempo el grupo espera alcanzar un consenso sobre el proyecto país del régimen municipal. Dicha agenda, dijo, se le presentará a los precandidatos, con la expectativa de que se comprometan y la firmen.
Ureña añadió que la reunión se reprogramará para una fecha aún indefinida. Afirmó que mientras tanto, los municipalistas se organizarán por provincias para trabajar las propuestas que les plantearán a los precandidatos.