Exleine Sánchez Torres, exviceministro de Justicia, declaró este martes que el plan del gobierno de Rodrigo Chaves de instalar cárceles de carpas para albergar a privados de libertad, es una ocurrencia que afecta el erario público. El exfuncionario se refirió a la propuesta ante la Comisión de Hacendarios de la Asamblea Legislativa.
Afirmó que, si el gobierno prescindió de la cárcel Terrazas II, porque las paredes tenían estereofón en su interior, con más razón resulta inaceptable el nuevo planteamiento.
“Si Terrazas II tuvo un diseño errado, por supuesto que esta idea de las carpas es una ocurrencia abominable.
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“Al menos, en mi caso, pensé que era un tema ya descartado (el plan de carpas), porque en mis palabras, y lo digo aquí públicamente, es una ocurrencia. Es una ocurrencia que no puede formularse en un Estado social de derecho; es una ocurrencia que no puede pretenderse en un país que tutela derechos fundamentales; es una ocurrencia que afecta el erario público”, expresó Sánchez, quien fue despedido el pasado 11 de julio, luego de expresar su oposición al proyecto.
Sánchez fue convocado por el foro legislativo para que brindara información sobre el plan, en vista de que el gobierno incluyó recursos por ¢2.684 millones en el quinto presupuesto extraordinario del 2024 para financiar la instalación de las carpas para cárceles. El gobierno solicitó los fondos al Congreso, pese a que el Ministerio de Justicia y Paz reconoció que no cuenta con estudios técnicos que sustenten la propuesta.
El exjerarca destapó la pretensión del Poder Ejecutivo en un oficio, dado a conocer por La Nación, en el que expresó su vehemente oposición a la iniciativa. La nota fue enviada el 11 de julio al ministro de Justicia, Gerald Campos Valverde, cinco horas después de que Casa Presidencial anunció su destitución.
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En el documento, Sánchez manifestó que el proyecto es “una decisión alejada de una posición sensata”. Mencionó que estas estructuras serían más vulnerables a daños por parte de los privados de libertad e, incluso, al ataque de comandos armados, en comparación con las cárceles de concreto y acero. Añadió que está probado que su mantenimiento es costoso.
Viceministro: No hay forma de ver las carpas como una opción
El exviceministro reiteró sus críticas a la iniciativa del gobierno y rechazó que exista algún escenario posible en el que las carpas puedan ser consideradas como una alternativa para resolver la necesidad de infraestructura carcelaria en Costa Rica.
“No hay forma de verle la parte técnica a las carpas; no existe manera, no existe ciencia, no existe derecho humano que nos haga ver las carpas como una opción”, aseguró.
Sánchez también descartó la posibilidad de usar este material como una solución transitoria, para albergar a reos que están cerca de ser liberados o para mantener a privados de libertad de baja peligrosidad, mientras se hacen trabajos de renovación en las instalaciones físicas ya existentes.
“Yo creo que no, porque en Costa Rica, si fuera que tomamos la palabra ‘transitorio’ de forma adecuada, sería posible, doña Pilar. Pero en Costa Rica no existe lo transitorio. Los puentes bailey no son transitorios en este país”, respondió ante una consulta de Pilar Cisneros, jefa de la fracción oficialista.
Igualmente, advirtió de que el país se puede exponer a distintos riesgos si decide poner en marcha el pan del Poder Ejecutivo. Señaló que el Estado podría enfrentar reclamos en materia de salud, sobre posibles violaciones a derechos constitucionales y eventuales incumplimientos del compromiso contra la tortura.
Explicó que existe un principio de normalidad que rige a nivel internacional, el cual plantea que “la población privada de libertad debe tener las condiciones acercadas a la realidad que vivimos todos nosotros”.
“Yo creo que nosotros no vivimos en carpas”, añadió.
¿Qué son las construcciones livianas?
Sánchez dijo a los diputados que la solución a la falta de espacio en los centros penitenciarios es el uso de construcciones livianas, que no es lo mismo que las carpas. “Son tipo casitas, autogestionarias, que coexisten y existen en el sistema penitenciario”, dijo.
De acuerdo con su declaración, este modelo se conoce como APAC (Amando al prójimo amarás) y ya funciona en el Centro de Atención Institucional Luis Paulino Mora Mora, en San Rafael, Alajuela.
El presupuesto extraordinario presentado por el gobierno, y tramitado bajo el expediente 24.443, pretende trasladar recursos de gasto corriente para aumentar la subpartida de Edificios del Ministerio de Justicia en Paz, con el objetivo de “financiar módulos de baja contención en los centros penales para mitigar el impacto del hacinamiento”.
El texto indica que los recursos se utilizarán para “atender la construcción en material liviano (Proyecto de Cárceles Livianas) de módulos de baja contención en centros penales”.
Tanto Chaves como Campos se han referido a las cárceles en carpas como “estructuras de construcción liviana”.