El presidente de la República, Luis Guillermo Solís, firmó ayer en China un proyecto dirigido a crear una zona económica especial (ZEE) que genere progreso en regiones pobres de Costa Rica.
Con el anuncio de Solís y de su anfitrión chino, Xi Jinping, se le da paso a un proyecto bilateral gestado cuando el actual mandatario era solo un analista político que aplaudía el acercamiento diplomático decidido en el 2007 entre los presidentes Óscar Arias y Hu Jintao.
Los gobernantes presentaron ayer en Pekín un memorando de entendimiento firmado para realizar un estudio de factibilidad de la nueva ZEE, informó la Presidencia mediante un comunicado de prensa.
El estudio estaría a cargo del Banco de Desarrollo de China, que en cálculos preliminares determinó la posibilidad de instalar esa ZEE en Puntarenas, con opción de centros satélites en Limón, Turrialba, San Carlos y Liberia, según informó, semanas atrás, el ministro de Comercio Exterior, Alexánder Mora, uno de los integrantes de la misión oficial en China.
Estos detalles, empero, deben definirse en un estudio que deberá estar listo en octubre, con líneas claras sobre la mejor manera de crear un engranaje de producción y negocios que involucre capital chino, en la modalidad de zonas francas.
“Es una herramienta de trabajo para generar elementos de desarrollo que permitan la inversión, generación de empresas y de trabajo por medio de actividades económicas que lleguen a crear encadenamientos”, expresó, mediante un boletín de prensa, Olga Marta Sánchez, ministra de Planificación y otra de las integrantes de la misión que está en China esta semana.
Conocido. El proyecto de ZEE lo trataron autoridades anteriores en decenas de citas y el canciller Manuel González (presente en China), Mora y el mismo Solís durante un encuentro que tuvo con Xi en Brasil, en octubre pasado.
En este viaje Solís tiene la visita a uno de esos centros de desarrollo de investigación y negocios en Tianjin, llamado Economic-Technological Development Area (TEDA), informó el servicio de prensa de la Presidencia.
Consultado el exministro de Comercio Exterior y exembajador en China Marco Vinicio Ruiz, se declaró satisfecho por el impulso al plan, que podría desarrollarse completo en 15 o 20 años.
“Se trata del impulso a un eje de desarrollo que va más allá de la instalación de unas empresas en una zona franca. China aporta su experiencia y promueve inversiones aquí, a las que se pueden sumar emprendimientos de otros países en esos centros. Ya hay contactos avanzados”, declaró.