La ministra de Trabajo, Marta Esquivel, propuso una redistribución de las horas de trabajo que se permitirían en el modelo de jornadas 4-3, con el fin de destrabar el proyecto de ley que se encuentra bloqueado en la Comisión de Asuntos Hacendarios de la Asamblea con centenares de mociones, principalmente del Frente Amplio.
En esta modalidad de jornadas excepcionales, los asalariados trabajarían cuatro días y descansarían tres en horario diurno, mientras que trabajarían tres y descansarían cuatro en el nocturno.
El planteamiento de Esquivel es que, en horario diurno, las jornadas semanales bajen de 48 a 46 horas semanales y, en las nocturnas, de 36 a 34.
Este cambio implicaría que los empleados en esta modalidad estarían 11,5 horas diarias en el centro de trabajo, si su horario es de día, y 11,3 horas, si es de noche.
Sin embargo, a la vez, el planteamiento implica reducir los tiempos de descanso a lo largo de la jornada.
En una versión anterior del proyecto, por ejemplo, se planteaban 90 minutos de descanso para las jornadas diurnas de 12 horas, lo cual comprendía 60 minutos de almuerzo y 30 minutos para refrigerios.
Ahora, el Gobierno propone bajar los tiempos de descanso a 60 minutos durante las jornadas.
En este ejemplo, tanto en la propuesta anterior como en la nueva, el tiempo efectivo es el mismo: 10,5 horas diarias y 42 semanales; esa suma no cambia, lo que cambia es la distribución.
“Básicamente, en la jornada diurna las horas laborales efectivas serían 10 horas y media, porque la salida sería media hora antes, y una hora de descanso distribuida según lo acuerden las partes”, dijo la ministra de Trabajo.
Esquivel reconoció que el cambio se logró “ajustando los tiempos de descanso” de los trabajadores. Aseguró que “definitivamente creemos que este cambio va a ser muy importante, porque la mayoría de las observaciones que se han hecho, tienen que ver con los tiempos de traslado, con el tema de cuido y otros aspectos”.
“Creemos que es un paso importante en la suma de consensos y realmente tenemos clarísimo que este tema da una importante seguridad jurídica a ciertas empresas”, argumentó Esquivel al defender el proyecto de ley.
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En conferencia de prensa, el presidente de la República, Rodrigo Chaves, defendió la propuesta del Ejecutivo al argumentar que aumentará la competitividad del país para atraer la inversión extranjera.
“Son empresas claves porque son empresas que en su mayoría son de alta tecnología, que pagan muy bien y que dan servicios desde Costa Rica en el extranjero. Entonces, el cambio de jornada que hay que hacer cuando la empresa está sirviendo un mercado como Europa, le sale carísimo a la empresa, porque se requiere reemplazar gente, conectar otras personas, entre otras cosas”, dijo el mandatario.
También, les dijo a los diputados “muy respetuosamente” que, “luego de 20 años de estar en esta conversación, ya es hora que un segmento de gente, especialmente jóvenes y muy preparados, puedan acceder a estas jornadas para que vengan las empresas que necesitamos en Costa Rica”.
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El plan se encuentra trabado en la Comisión de Asuntos Hacendarios de la Asamblea Legislativa, con más de 430 mociones.