Un grupo de municipalidades está reacio a acceder a la solicitud de abrir albergues para atender a una parte de los 5.000 migrantes cubanos que permanecen varados en Costa Rica.
Los alcaldes de Pérez Zeledón Vera Corrales, de Barva, Mercedes Hernández, y de Valverde Vega, Luis Barrantes, argumentan que la petición de la Comisión Nacional de Prevención de Riesgos y Atención de Emergencias (CNE) fue hecha de manera informal, sin un análisis de factibilidad, sin que mediara una solicitud por escrito, y sin la participación de los comités locales de emergencias.
De esos tres ayuntamientos, solo Pérez Zeledón tiene un albergue en funcionamiento, donde hay 158 cubanos que atiende la Pastoral Social.
Barva y Valverde Vega se niegan a abrir posadas.
Iván Brenes, presidente de la CNE, por su parte, declaró que “el 99,9% de los cantones” han ofrecido una respuesta positiva a la solicitud de habilitar instalaciones de todo tipo para alojar temporalmente a los cubanos.
Brenes comentó que las negativas ocurren en casos aislados, como en Valverde Vega.
Informalidad. La preocupación de los alcaldes, dijo MercedesHernández, quien además preside la Asociación Nacional de Alcaldías e Intendencias (ANAI), es que desconocen el fundamento jurídico que respalda la operación de los albergues y quién correría con la responsabilidad de cualquier hecho que ocurra en esos sitios.
“Nos han pedido mediante llamadas telefónicas que abramos albergues, sin mayor análisis ni claridad sobre si el cantón puede o no. Creemos que este tipo de atención amerita por lo menos una directriz oficial de la CNE y mucho mejor si es mediante un decreto ejecutivo”, consideró la alcaldesa.
Hernández agregó que desconoce si requerirá de un acuerdo del Concejo para permitir el funcionamiento de lugares de resguardo.
“En Barva, yo tengo un cantidad elevada de familias pobres y de verdad me cuesta mucho recibir ayuda del Estado para esas personas. ¿Cómo les explico, entonces, que vamos a meter a cubanos que sí tendrán esa ayuda?”, argumentó.
La alcaldesa expresó que ANAI convocará a una reunión extraordinaria de su Junta Directiva, el martes entrante, a las 11 a. m., para fijar una posición conjunta con respecto a la atención de la crisis que viven los miles de cubanos que llegaron a Costa Rica.
Ellos migraron desde Cuba a Ecuador, que no les solicitaba visa de ingreso hasta el 1.° de diciembre, con la expectativa de cruzar Centroamérica y México para llegar a Estados Unidos.
Allí legalizarán su situación migratoria con base en una ley estadounidense de 1966.
Vera Corrales contó que rechazó la solicitud de la CNE de abrir un recinto adicional al que opera en Pérez Zeledón porque no hay más espacios aptos para recibir a los migrantes.
“La CNE le pidió a la pastoral recibir a 130 cubanos pero, al final, enviaron a 158 y no sabíamos cómo decirles que no, por lo que los aceptamos”, comentó.
Igual que la alcaldesa de Barva, Corrales dijo estar preocupada por los vacíos legales en que están operando los albergues.
La jerarca municipal informó de que envió un oficio al presidente de la CNE solicitándole explicaciones sobre cuál es el marco jurídico que respalda el funcionamiento de los locales humanitarios y quiénes resultarían responsables por la vía civil y penal en caso de que en alguno de los albergues ocurra una emergencia.
“Ahora se nos está delegando a las municipalidades la responsabilidad de atender esta crisis humanitaria sin que medie ningún decreto”, reclamó.
Iván Brenes, de CNE, explicó que no se ha emitido un decreto de emergencia porque no es requerido para que entren en funcionamiento los comités locales de emergencia cantonales.
El jerarca dijo que se han invertido ¢190 millones en la atención de 29 albergues; los recursos salen del presupuesto de la Comisión Nacional de Emergencias
En esos sitios hasta este viernes había 3.981 cubanos: 2105 hombres, 974 mujeres y 163 menores de edad.