El candidato presidencial Juan Diego Castro, del Partido Integración Nacional, (PIN) protagonizó, la mañana de este sábado, un intercambio verbal con un observador internacional invitado a las elecciones nacionales.
Castro interrumpió tres veces a Raúl Patricio Valdés Aldunate, presidente del Tribunal Calificador de Elecciones de Chile y magistrado de la Corte Suprema de Justicia de ese país, mientras este le formulaba una pregunta.
El aspirante acudió, al igual que otros de sus adversarios, a presentarse ante un grupo de visores extranjeros en un salón del hotel Aurola Holiday Inn, en San José, como parte de un encuentro organizado por el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE).
Valdés consultó a Castro si luego de presentarse ante ellos casi como un redentor en un país en esencia corrupto, como lo estaba presentando, cuál otro candidato que no fuera él creía que podía solucionar los problemas del país.
En tres ocasiones, el candidato corrigió al invitado para indicarle que estaba equivocado al formular la pregunta.
“No me interrumpa, que soy yo quien hace acá la pregunta”, respondió en la primera ocasión Valdés.
“Sí, pero es que usted me ha dicho redentor y no soy tal”, respondió el candidato.
“Bueno esa es mi forma de pensar luego de escuchar su discurso. Le guste o no, esta es la imagen que usted me ha dejado”, manifestó Valdés cuando Castro lo volvió a interrumpir para decirle que no había dicho que el país era corrupto.
“Yo no soy mesías de nadie, ni redentor, ni mártir de nadie. En segundo lugar no he dicho que soy el único candidato apto. Dije que Liberación Nacional, Acción Ciudadana y Unidad Social Cristiana, son partidos corruptos", insistió el representante del PIN.
Luego, al ser consultado por la prensa en relación con ese intercambio con el observador chileno, Castro respondió que, según él, le estaban formulando la pregunta de forma equivocada.
Sin embargo, Valdés comentó que la impresión que él se formó de Costa Rica, a partir de las palabras del aspirante, es que era un país corrupto y que solo Castro aparecía como la única persona que podría solucionar todo.
“Nosotros como observadores internacionales venimos aquí a saber cuáles son las propuestas de los candidatos. Pero él, en su discurso, primero que todo repartió un libro y atacó a los gobiernos anteriores diciendo que estaban llenos de sinvergüenzas y que los periodistas también lo habían atacado”, manifestó.
“Creo que los observadores no venimos a escuchar eso. En mi opinión, un candidato no puede denostar a su país frente a delegados que vienen a hacer una observación electoral”, agregó.
Ataques a banquero, diario y otros partidos
Previo al intercambio con el observador chileno, Castro presentó a los delegados internacionales un libro y luego abrió fuego contra el banquero Leonel Baruch, el diario La Nación y otros partidos ante un auditorio con 59 observadores internacionales y delegados del TSE.
“El TSE dijo que debíamos velar porque no hubiera campaña sucia, a pesar de la alianza PLN con el narco hondureño, donde un canal publicó un video de mi madre muerta. Aprovecho para denunciar el papel de un banquero que se ha adueñado de la democracia en Costa Rica y eso es gravísimo”, manifestó.
Luego dijo lo siguiente:
“Leonel Baruch ha comprado a los cuatro partidos mas importantes de Costa Rica más de 7.000 millones de colones en bonos de deuda política. La democracia ha sido comprada por Baruch, el banquero más poderoso de la banca privada. Controla la inversión de cuatro partidos en bonos de inversión de la deuda política y ha lanzado una campaña vil contra mi antes de las elecciones. Esa es una mancha que va a tener este proceso. Primera vez que esto ocurre”.
A continuación, manifestó que el segundo hecho más grave de este proceso electoral es “lo que ha hecho el diario La Nación contra mi”.
“¿Ustedes han visto que algún periódico de sus naciones haya publicado medio periódico, 12 páginas, contra un candidato en venganza por haber presentado este libro que hoy les compartí”, añadió Castro quien se declaró víctima de "infamoterapia".
La publicación a la que hace referencia se hizo luego de que, la noche del pasado 15 de enero, el candidato del PIN atacara a este medio calificándolo como “maldito periódico” y también llamara a sus reporteros “los psicóptas del diario La Nación”.
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“Ustedes no tienen una mesa de redacción política, lo que tienen es un manicomio (...) Están llegando a extremos de locura inimaginables”, dijo en esa ocasión durante la presentación de su libro en el Indoor Club.
Dos días después, en su edición impresa, La Nación publicó las declaraciones de Castro, así como reacciones de censura de la prensa local e internacional, y un compendio de publicaciones hechas por el diario sobre declaraciones polémicas, falsedades y otros cuestionamientos al aspirante y a otros miembros de su partido.
También se publicaron una serie de preguntas en torno a estos casos que el aspirante no respondió ni permitió plantearle.
Encuentro académico
El desencuentro de Castro y el invitado internacional sobrevino en el marco de una encuentro académico que el TSE organizó entre los candidatos y los observadores extranjeros.
Desde las 9 a.m., los candidatos debían acudir por unos 15 minutos a dirigir unas palabras al grupo de visitantes para presentarse, sus planes de ser electos y comentar sobre el proceso electoral. Lo observadores, a su vez, podían formular algunas consultas a los candidatos al final de cada presentación.
De 13 candidatos convocados, acudieron solo seis a la cita. Quienes no asistieron fueron Mario Redondo Poveda, de la Alianza Demócrata Cristiana, Óscar López del Partido Accesibilidad Sin Exclusión, Sergio Mena de Nueva Generación, Carlos Alvarado de Acción Ciudadana, Otto Guevara del Movimiento Libertario y Stephanie Campos Arrieta de Renovación Costarricense.
El primero en dirigirse a los observadores fue Edgardo Araya del partido Frente Amplio quien dedicó su tiempo a presentar su agrupación, algunas propuestas para los que consideró los principales problemas locales y, de paso, alabó también la tradición democrática costarricense.
Rodolfo Piza y Antonio Álvarez Desanti, de los partidos Unidad Social Cristiana y Liberación Nacional, respectivamente también comentaron algunas de sus propuestas y alabaron la tradición democrática local ante los extranjeros destacando cada uno por su lado el orden y transparencia del proceso electoral en manos del TSE.
Rodolfo Hernández, del partido Republicano Social Cristiano, y John Vega, del Partido de los Trabajadores, igualmente hicieron una exposición general de sus agrupaciones, propuestas principales y alabaron ante los invitados la limpieza electoral en las jornadas de elección costarricense y el interés general de la población en sufragar.