El plan de tren eléctrico escogido por el Gobierno actual, en sustitución del proyecto elaborado por la administración anterior, es mucho más caro y, por eso, se limitaría al trayecto San José-Paraíso de Cartago.
En consecuencia, quedan por fuera las líneas a Heredia, Alajuela, Pavas, Belén y Ciruelas.
El Gobierno optó por desarrollar un nuevo plan a partir del anteproyecto del Tren Rápido de Pasajeros (TRP), elaborado hace seis años por la administración de Luis Guillermo Solís.
En el 2018, un estudio de ingeniería de valor determinó que esa propuesta tendría un costo de $2.267 millones, en caso de que incluyera todas las rutas de la gran área metropolitana (GAM). No obstante, a ello habría que sumar el precio de las expropiaciones de terrenos, que no estaba en ese cálculo.
El alto costo radica, según el documento, en que casi la totalidad del tren sería elevado, es decir, circularía sobre un viaducto. Para ello, habría que construir una plataforma especial, en lugar de hacerlo a nivel de terreno.
La cifra es un 46% más alta que el costo estimado en el 2020 para el tren eléctrico metropolitano, por $1.550 millones, el cual llegó hasta la etapa de precalificación de empresas y ahora fue desechado.
Mario Arce Guillén, presidente del Instituto Costarricense de Ferrocarriles (Incofer), declaró que la base conceptual del nuevo proyecto sí es el anteproyecto del 2016, que “planteó un sistema a desnivel, no a nivel, en relación con el modelo de ciudad y la necesidad de contemplar un sistema que sea dinámico y permita a la ciudad crecer en las próximas décadas y que no genere un conflicto de congestión vehicular imposible de resolver”.
“Por supuesto que una solución de tren eléctrico elevado es bastante más cara que una solución de tren a nivel”, dijo el jerarca sobre el costo. “Hay que hacer un tramo elevado casi en su totalidad”.
Sin embargo, argumentó que la idea es asegurarle al proyecto una vigencia de 50 años y que la estimación inicial es de $500 millones para la línea elevada de San José-Paraíso.
“Aquí lo que estamos tratando de hacer es que lo barato no salga caro, porque no podemos elegir la infraestructura pública en función de que salga más barata”, dijo.
Alegó que cubrir todas las rutas de una vez podría implicar tener que construir pasos a desnivel adicionales en pocos años.
Las anteriores autoridades del Incofer descartaron el Tren Rápido de Pasajeros por su elevado costo y, en cambio, plantearon un tren eléctrico mayoritariamente a nivel de suelo, con algunos pasos elevados en las intersecciones más concurridas.
“La infraestructura elevada supone un importante incremento de los costes de construcción e, incluso, de mantenimiento, en comparación con la infraestructura a nivel”, señaló un informe elaborado por la empresa española IDOM para el Incofer.
Tanto el proyecto desechado como el nuevo utilizan el mismo derecho de vía del ferrocarril actual en la gran área metropolitana (GAM).
¿Por qué la ruta a Paraíso?
En febrero del 2021, asesores el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) le recomendaron al Incofer concentrarse en desarrollar primero la ruta San José-Heredia-Alajuela porque esta es la de mayor demanda de pasajeros.
No obstante, el nuevo presidente del Instituto sostuvo que la línea San José-Paraíso es la que “mayor potencial de crecimiento tiene y mayores ventajas y beneficios le puede aportar a la GAM desde el punto de vista de articulación económica”.
Los estudios económicos del nuevo proyecto todavía no están hechos. Según el Infocer, el plazo estimado para hacerlos es de seis a ocho meses y existen opciones de financiamiento, para ello, incluso en el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
¿Qué pasaría con las rutas a Heredia y Alajuela?
El presidente del Incofer dijo que eso dependerá de los próximos gobiernos y cada línea debe verse como un proyecto distinto, con cargas económicas distintas, para diluir costos en el tiempo, “pero no puedo asegurar que la próxima administración vaya a continuar”.
Afirmó que el compromiso es dejar un sistema construido parcialmente para que, lógicamente, la próxima administración tome la decisión de continuar.
Arce dijo que sería irracional que el siguiente Gobierno no lo haga, pero eso “dependerá mucho de lo que los costarricenses terminen eligiendo en el 2026″.
Única ruta de tren que se haría
Quedan por fuera las rutas a Heredia y Alajuela
FUENTE: Incofer. || INFOGRAFÍA / LA NACIÓN.
Sobre el costo total si el plan se extendiera a todas las rutas, afirmó: “El proyecto nuestro, de esta administración, es la construcción de la línea uno. La situación económica y las variables económicas, de aquí a cuatro u ocho años, no las conocemos, porque no tengo una bola de cristal”.
Agregó que, para tratar de bajar costos, se puede recurrir a servicios complementarios como el transporte de carga y a instrumentos de valorización de suelo, que se han aplicado en otros países.
El nuevo plan San José-Paraíso no se hará necesariamente conforme se planteó en el estudio de prefactibilidad del 2016 porque hay que hacer nuevos estudios para ajustar frecuencia, estaciones y modos de integración a otros sistemas de transporte.
Se requerirá subsidio estatal
Al igual que con el proyecto desechado, el nuevo plan también requeriría de un subsidio estatal para atenuar las tarifas a los pasajeros.
“Claro que lo hemos contemplado, no existe un sistema de pasajeros en el mundo que no sea subsidiado, por supuesto que lo contemplamos porque de lo contrario seríamos personas que no entienden de transporte público de pasajeros en tren”, afirmó Arce.
¿Cuál era el trayecto del tren rápido?
En la presentación proyectada en la conferencia de prensa, Mario Arce mostró como base el trayecto del Tren Rápido de Pasajeros hecho en el 2016.
El trazado contempla una primera ruta entre la Estación del Atlántico, en San José, y Paraíso, en Cartago (unos 30 km), que es la que este Gobierno quiere hacer.
La segunda línea sería la que une la Estación del Atlántico con Alajuela centro. Finalmente, el tercer trayecto consiste en un trazado entre la Estación del Atlántico y Ciruelas, en Alajuela.
No se incluyen el trayecto que conectaba Ciruelas con Alajuela, que también se construiría sobre el trazado actual del antiguo ferrocarril, ni el tramo Ciruelas-El Coyol.
Con ello, las personas no podrían tomar el tren en Ciruelas para dirigirse directamente a cantones como Alajuela, Río Segundo, Heredia o Tibás. Por el contrario, tendrían que tomar la ruta que los lleva por Belén hacia San José para tomar el intercambio, o bien, recurrir a autobuses o a su propio vehículo para moverse.