“Le indico que no se le va a recibir más en las reuniones de la fracción legislativa del Partido Acción Ciudadana (PAC) hasta tanto la Asamblea Nacional cambie su criterio o algún Tribunal nos obligue a lo contrario”.
El destinatario de este severo mensaje fue el diputado Víctor Morales Zapata, el hombre ajeno al PAC, escogido por Luis Guillermo Solís en el 2013, para que integrara la lista parlamentaria rojiamarilla.
El emisario es Marco Redondo, el jefe de la bancada oficialista y encargado de manejar la división que vive el grupo en torno a Morales Zapata, además de enlazar con la cúpula del Partido, que desde enero del 2014 había pedido apartarlo de la agrupación.
El canal es una carta enviada por Redondo este miércoles, con “recibido” del jueves del despacho de Morales Zapata. Dice, palabras más o menos, que no hay un buen clima para recibirlo en las reuniones de fracción y que la cúpula del PAC tampoco lo ha reincorporado al Partido.
El documento cita, incluso, un reclamo del legislador Franklin Corella hecho al jefe de la fracción porque se estaba incumpliendo el acuerdo tomado por la bancada de no incorporar a Morales Zapata. Señalaba que la presencia de él generaba “una crisis política y una situación bastante compleja”.
Víctor Morales Zapata, uno de los hombres más cercanos al mandatario Luis Guillermo Solís en la campaña electoral y después al asumir el Gobierno, paga aún consecuencias del cuestionamiento que se le hizo apenas supieron en el PAC que él iba postulado para diputado.
En 1994 había enfrentado una acusación penal por un crédito cooperativo otorgado de forma supuestamente irregular y él concilió para evitar una condena, lo que sus detractores internos interpretan de una manera: aceptó una culpa.
Entre sus detractores, el principal es Ottón Solís, el fundador del PAC, excandidato presidencial y compañero de bancada actual. Los enfrentamientos y las discusiones han sido la constante en los últimos dos años, pero parece que Solís ha ganado apoyo entre sus compañeros.
Por eso, la reunión de la fracción del PAC se ha quedado sin cuórum, pues no asisten los que se oponen a la presencia de Morales Zapata.
Lo recordó Redondo en la carta: “Mientras usted siga asistiendo a las reuniones de fracción, no se podrá contar con el quórum requerido para sesionar”. Si lo hubiera dicho en palabras más directas: “Usted nos divide”.
Para Morales Zapata, la carta se debe leer más bien como un intento de unir a la bancada y no siente que lo estén excluyendo.
“Voy a valorarla y el lunes (23 de noviembre decido (...). No me considero un factor de disociación, en absoluto, pero hay intereses políticos muy claros y algunos prefieren que no llegue en virtud de mis posiciones internas”, comentó Morales.