La Escuela de Biología de la Universidad Nacional (UNA) negó que la preparación del estudio tendiente a revivir la pesca de arrastre en Costa Rica haya sido transparente y participativo con científicos y la academia, como lo aseguró el Gobierno al anunciar que pronto comenzará la investigación en la costa pacífica.
El director de la escuela, el doctor Ángel Francisco Herrera, dejó constando en un oficio que remitió al Instituto Costarricense de Pesca y Acuicultura (Incopesca) que hubo un único encuentro y que este solo fue informativo.
Señaló que las autoridades no respondieron múltiples cuestionamientos de académicos y científicos acerca de la metodología que se usará. A pesar de eso, el Gobierno informó, en un comunicado, que solo la Fundación MarViva planteó inquietudes sobre el proceso.
“La presentación fue unidireccional, se indicó someramente lo que se iba a hacer y no se respondieron muchas de las preguntas realizadas, sobre todo con relación a la gran cantidad de dudas de la metodología usada”, señala el escrito.
Herrera agregó que, incluso, se manifestó que la eventual participación de la academia (en caso de que se aceptara participar) sería solo en temas de identificaciones taxonómicas de organismos capturados; no hubo mención en cuanto a cambios metodológicos, análisis de datos o de resultados, u otros.
Esta versión coincide con las denuncias realizadas por el Centro de Investigación en Ciencias del Mar y Limnología (Cimar) de la Universidad de Costa Rica (UCR) y la Fundación MarViva, quienes desmintieron al Gobierno.
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El pasado 2 de febrero, el Ministerio de Ambiente y Energía (Minae) y el Incopesca divulgaron un comunicado de prensa junto a declaraciones de los jerarcas, resaltando la transparencia del proceso.
Señalaron que ha sido una tarea participativa en conjunto con organizaciones no gubernamentales y la academia costarricense.
“Todo se ha actuado con claridad y transparencia desde el pasado 30 de setiembre, cuando se anunció que íbamos a iniciar los estudios de pesquería de camarón”, expresó Heiner Méndez, ministro de Pesca y presidente de Incopesca.
En tanto, Franz Tattenbach, titular de Ambiente, afirmó que Costa Rica es un país “que cuida los océanos, el ambiente y que cree en el progreso sostenible”. Sostuvo que el Minae se cerciorará “de que sea la ciencia y la técnica quien nos guíe”.
Cuestionamientos sin responder
En el oficio remitido al Incopesca, con copia a Franz Tattenbach y Heiner Méndez, la Escuela de Biología de la Universidad Nacional apuntó uno a uno sus cuestionamientos sobre el estudio de pesca de arrastre.
Entre ellos, cuestionó el fundamento científico para determinar que ocho embarcaciones pesqueras participarán en el estudio, así como la cantidad de lances.
“Se realizarían 33 lances efectivos. Significa que el barco puede realizar 10, 33, 50 o los que fueran. Entonces, ¿quién determina si un lance es efectivo o no? ¿Cuáles son las investigaciones publicadas y referenciadas con bibliografía trazable en la que se basa esta metodología?”, apunta el oficio.
Luego agrega: “El análisis se hará con una ‘muestra de la muestra del último lance’, que debería ser el lance ‘efectivo’ número 33. Entonces, ¿cuál es la razón de estimar 33 lances ‘efectivos’ si al final indican que el análisis se va a hacer con una submuestra del último lance ‘efectivo’? ¿Cuáles son las investigaciones en el mundo que apoyan esta metodología bibliográfica trazable?”.
El director general de MarViva, Jorge Arturo Jiménez, había denunciado que estas embarcaciones estarían habilitadas para vender la pesca obtenida producto de la investigación. Por lo tanto, consideró que el Gobierno pretende reactivar la pesca de arrastre solapadamente y en el oscurantismo.
El doctor Herrera, de la UNA, también cuestionó sobre la decisión de Minae e Incopesca de contratar observadores sin bagaje técnico.
De acuerdo con la Escuela de Biología, el Gobierno busca contratar ocho trabajadores para observar la recolección, el manejo, el procesamiento de los recursos biológicos y registrar los datos relativos a la operación de las ocho embarcaciones.
No obstante, a pesar de que esas tareas deberían ser realizadas por profesionales en la materia, el Ejecutivo pretende contratar a personas con educación secundaria, conocimientos de computación y un curso básico sobre embarcaciones, por un salario de ¢416.000 mensuales.
“La características de observador a bordo solicitadas por Incopesca no cumplen con los parámetros internacionales dados por FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) para un observador”, dijo la universidad.
Agregó que no existe el apropiado nivel académico y conocimiento científico y biológico en los observadores, en temas como mortalidades en especie en vías de extinción, pesca responsable, ética profesional y fe pública.
Para la UNA, esto incrementa “la posibilidad de datos poco transparentes y de actos de corrupción como ha sucedido en muchos lugares”.
El nuevo estudio
De acuerdo con el anuncio del Gobierno, el estudio de pesca de arrastre comenzará a implementarse en el primer trimestre de este 2023 y se extenderá por dos años. Participarán ocho embarcaciones semiindustriales en lugares aleatorios de la costa del Pacífico.
Aunque las autoridades anunciaron que para la investigación se implementaría la “nueva técnica” llamada “AA Costa Rica”, en realidad ese fue el mismo mecanismo que se implementó en el cuestionado estudio de 2018, cuyos resultados fueron rechazados por académicos, científicos y ambientalistas, al argumentar falta de rigurosidad científica durante el proceso.
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La conclusión de los estudios, defendidos por Incopesca, señalaban que por cada tonelada arrastrada en el lecho marino se capturaba un 75% de camarón y un 25% de otras especies, como peces y tortugas, lo que se conoce como pesca incidental o fauna de acompañamiento (FACA).
Aquellos resultados justificaron la aprobación de un proyecto de ley para la reactivación de esa pesca, en el 2020. Sin embargo, el decreto legislativo fue vetado por el entonces presidente de la República, Carlos Alvarado, en el mismo año.
En setiembre pasado, el mandatario Rodrigo Chaves anunció que se realizarían nuevos estudios, para la posible reactivación de esa actividad pesquera.