El presidente de la República, Rodrigo Chaves, insistirá con la demanda que Costa Rica planteó contra Panamá, ante la Organización Mundial del Comercio (OMC), en 2021, por supuestos bloqueos injustificados a las exportaciones nacionales de lácteos, cárnicos y otros productos a ese país vecino.
Al término de su gira a la zona norte, este sábado, el presidente de la República aseguró que instruyó al ministro de Comercio Exterior, Manuel Tovar, a “ir a la OMC con la queja formal de Costa Rica para levantar las restricciones”.
En realidad, la vía del Gobierno es continuar el proceso actual, debido a que la administración de Carlos Alvarado interpuso ese reclamo ante el organismo, desde hace más de un año, en enero de 2021.
Inclusive, el proceso pronto entrará en etapa de discusión, luego de que Costa Rica y Panamá no lograron resolver el diferendo por la vía del diálogo. En setiembre anterior, la OMC acordó formar un panel arbitral para resolver la disputa.
Según una publicación del propio sitio web del organismo internacional, Costa Rica reclama que Panamá impuso medidas que restringen o prohíben la importación de productos como fresas, lácteos, productos cárnicos, piñas y bananos de Costa Rica. “La solicitud se distribuyó a los miembros de la OMC el 14 de enero (2021)”, dice el portal.
Estos hechos también fueron informados por el Ministerio de Comercio Exterior (Comex) a la prensa y en la página oficial de la institución.
El presidente Rodrigo Chaves manifestó: “Panamá está haciendo con nuestros productos lácteos lo que Costa Rica hizo con el aguacate (hass) mexicano, exactamente lo mismo”.
Afirmó que resulta vital la decisión a acatar la resolución de la OMC que concluyó que Costa Rica impuso una restricción encubierta al aguacate Hass de México, mediante una medida fitosanitaria discriminatoria.
De acuerdo con el mandatario “parte de la decisión sobre el aguacate es para darle legitimidad a Costa Rica para ir a la OMC y pedir una resolución a las restricciones del comercio que está poniendo Panamá”.
Añadió que “ahora que limpiamos nuestra propia situación y nos apegamos a la ley, con el caso del aguacate, tenemos la legitimidad con la OMC a decir ‘saben qué, no se vale’. Eso es lo que vamos a hacer”, declaró Chaves.
El exministro de Comercio Exterior, Andrés Valenciano, quien encabezó el reclamo contra Panamá ante el organismo internacional durante la administración de Carlos Alvarado, explicó que el proceso ha agotado todas las vías.
“Ante la falta de respuesta y de lograr un diálogo fructífero con Panamá (...) en enero de 2021, decidimos, en coordinación con los sectores afectados, activar el mecanismo de solución de diferencias ante la OMC. Este es un proceso que ha continuado y en el que ya se encuentra conformado el grupo especial que conocerá la diferencia”, señaló Valenciano.
Miembros como Estados Unidos, Canadá, México, Reino Unido, Unión Europea, China, Guatemala, Nicaragua y Honduras indicaron su interés de participar en el proceso, en calidad de terceros.
“Además del mecanismo de solución de diferencias de la OMC, el país continuó buscando de manera bilateral para llegar a una solución en el corto plazo, a todo nivel: técnico, ministros e incluso presidentes, sin un resultado positivo, por lo que el proceso en la OMC ha continuado”, recalcó Valenciano.
Para resolver un diferendo entre miembros de la OMC, los países pueden encontrar una solución mutuamente convenida, en etapa de consultas bilaterales, o bien, se recurre a la vía jurisdiccional, estableciendo un panel para resolver la diferencia. Costa Rica y Panamá se encuentra ya en esta etapa.
Manuel Tovar, actual ministro de Comercio Exterior, manifestó que el presidente Chaves le pidió “realizar todas las gestiones necesarias para defender los intereses de nuestro sector productivo y nuestros exportadores ante una serie de lamentables medidas de tinte proteccionista adoptadas por las autoridades panameñas”.
En esa línea, afirmó el jerarca, Comex continuará con el proceso que presentó el gobierno anterior ante la Organización Mundial del Comercio. “La instrucción es clara: defender a los productores y exportadores nacionales, hacer valer el derecho internacional que nos ampara. Vamos a continuar con las discusiones bilaterales con Panamá, pero no levantaremos los contenciosos solicitados en la OMC hasta que las medidas sean levantadas satisfactoriamente”.
Tovar añadió que “Panamá es un país vecino, es un país vecino, y lamentamos muchísimo este giro de su política comercial”.
El diferendo comercial con Panamá
Aunque los lácteos son de los productos más afectados por la restricciones adoptadas por Panamá, debido al volumen de las exportaciones, el planteamiento de Costa Rica incluye una lista más extensa de alimentos de origen animal y vegetal.
Entre ellos se encuentran las fresas, la carne de cerdo, bovino y ave, además de una serie de embutidos (jamones, mortadelas y salchichas), así como alimento para peces, piña, y plátanos y banano.
El conflicto comercial con Panamá por el comercio de la leche se abrió desde el 1.° de julio del 2020, cuando el vecino país cerró el ingreso a productos de origen animal de 26 plantas industriales costarricenses.
Los panameños adujeron que esas plantas no tramitaron la renovación de los permisos sanitarios de las autoridades de ese país.
El conflicto se presentó mientras el 1.° de enero del 2020 se eliminaron los aranceles para la exportación de leche tica a Panamá, al terminar el periodo de eliminación gradual de ese impuesto acordado en el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre los dos países.
La principal empresa afectada con el cierre es Dos Pinos. Dicha cooperativa envía a Panamá 50.000 (62,5%) de los 80.000 litros o kilos diarios de leche y derivados que se dejaron de exportar a Panamá. Se calcula que las colocaciones de lácteos en Panamá suman un promedio de $4 millones mensuales.