El presidente de la República, Rodrigo Chaves, criticó a los mandos medios de las instituciones públicas este sábado: “A cada rato se atraviesan, simplemente dicen ‘no me parece tal cosa’ y uno empieza a ver que tal vez se están extralimitando en sus funciones.
“Entonces, hay que tomar acciones, persuadir y convencer. Si son de confianza, hay que removerlos”, aseguró el mandatario durante una conferencia después de una sesión del Consejo de Gobierno extraordinaria.
Agregó que el objetivo fundamental del Gobierno no es favorecer la burocracia, sino “servir al pueblo de Costa Rica”.
Si bien aseguró que él quiere ser prudente y se manifestó “absolutamente respetuoso de la democracia y del marco jurídico” costarricense, alegó que los tomadores de decisiones han quedado amarrados de las manos.
“Sí noto que en Costa Rica se nos ha ido la mano por temor a que alguien tome decisiones”, explicó.
Agregó que, “probablemente por razones históricas”, se han ido diluyendo las autoridades que han existido, incluyendo las del presidente o presidenta de la República, pero hay que tomar decisiones y luego rendir cuentas.
Como ejemplo de una situación en que un grupo de mandos medios se opone a algo o impide su avance, mencionó lo sucedido en torno al acceso a una carretera que ha estado varado por 24 meses.
“Voy a contar una anécdota. Una de las empresas más importantes del mundo, literalmente, quiere construir en Costa Rica 80.000 metros cuadrados de planta para contratar a 5.000 costarricenses en la zona oriental, en puestos de altísimo valor agregado y salarios. ¡24 meses pegados para ver si les dejaban hacer una salida de la ruta 1 hacia esa planta enorme!”, relató Chaves.
Esta situación está en manos de Luis Amador, ministro de Obras Públicas y Transportes (MOPT), quien informó al presidente de la República sobre la situación que se ha presentado con la Comisión de Carreteras de Acceso Restringido.
Chaves dijo que Amador tuvo que hacer malabares, luego se dirigió a Amador para preguntarle si cambió la comisión, y este le respondió que sigue haciendo malabares para que “cuatro o cinco burócratas pongan el huevo”.
“Viera que va a seguir haciendo malabares. ¿Cierto o no, señor ministro? Bueno, así han manejado las cosas en este país”, enfatizó.
Amador explicó que una empresa compró los terrenos y está facilitando el diseño, va a pagar la construcción de ese acceso a la carretera y el Gobierno solo tiene que autorizarlo, mediante la comisión sobre la que -dijo- él no tiene ningún control.
“Yo como ministro no puedo hacer nada. Tuve que deshacer el decreto ejecutivo, traerme la comisión al MOPT, eso fue publicado en La Gaceta, había que darles tres o cuatro días hábiles. Instauré la comisión, empecé a ver el expediente, me lo mandaron incompleto.
“Mandé a pedirlo y como ministro, no podía instruirlo, tenía que solicitarlo y no me lo querían dar. Tuve que convocar a sesión del Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) hoy. Finalmente, después de muchas gestiones, ayer a las 5 de la tarde logré que me dieran el expediente y el lunes tengo sesión de la Comisión de Accesos Restringidos, que se va a reunir para ya conocer el expediente completo”, apuntó.
Amador destacó que se trata de una inversión de muchos empleos y puntualizó que por tratarse “de una inversión de este calibre, después de dos años, se nos puede ir”.
No obstante, el ministro evitó decir específicamente cuál es el punto donde se daría ese acceso a carretera, ni el nombre de la compañía internacional de la que se trata, por lo que solicitó tiempo para que se tome primero la decisión.