Los candidatos presidenciales Fabricio Alvarado, Rolando Araya, José María Figueres, Lineth Saborío y Welmer Ramos impulsarían la tecnología de quinta generación en telefonía móvil 5G, si alguno de ellos gana las elecciones del 6 de febrero del 2022.
Los cinco aspirantes asumieron el compromiso, desde sus propios enfoques, durante el conversatorio sobre el futuro de la tecnología en el país, organizado por tres cámaras empresariales (Camtic, Infocom y CCCR) y la Universidad Tecnológica de Texas.
Por ahora, la administración de Carlos Alvarado se enfrenta con el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) para recuperar el espectro radioeléctrico que le pertenece al Estado, requerido para reasignar frecuencias, de cara al eventual despliegue de la 5G, que es la quinta generación de telefonía celular que cuenta con mayor velocidad de descarga de datos (superior a 10 gigabits por segundo (Gbit/s).
El ICE rechaza hacer la devolución al alegar que pretende diseñar primero un plan de cambio a esta tecnología y desarrollar sus posibles usos, aun y cuando legalmente no es su competencia. El Gobierno, por su parte, teme que el Instituto le pida una indemnización por retirarle las frecuencias de telecomunicaciones.
Fabricio Alvarado, candidato de Nueva República (NR), se comprometió a sacar a subasta dos frecuencias del espectro 5G para crear un fondo que financie un programa de conectividad nacional con fibra óptica, pero al mismo tiempo, con la apertura, impulsar la inversión, el desarrollo de la industria y el empleo.
“Esa fibra óptica va a permitir zonas francas fuera del Gran Área Metropolitana, en las zonas costeras y, en educación, que nuestros estudiantes tengan clases virtuales o por lo menos modelos híbridos, al tiempo que promovemos la inversión en infraestructura tecnológica”, declaró el candidato.
Rolando Araya, de Costa Rica Justa (CRJ) abogó por buscar un entendimiento con el ICE para enganchar al país con esa nueva tecnología a la disrupción tecnológica que ya está en camino. “Me inclino por llegar hasta cierto punto con autopistas y dar el último salto con inalámbrico”, dijo. Añadió que se deben zanjar diferencias entre empleados públicos y el sector privado para subir al país en la cuarta revolución industrial.
José María Figueres, de Liberación Nacional (PLN), apuntó que el reto es llevar conexión de la mayor banda ancha posible a cada uno de los hogares y los comercios, que en total equivaldría a 1,7 millones de medidores eléctricos que existen hoy.
Propuso impulsar una alianza público privada entre el ICE y las empresas tecnológicas para desarrollar un programa que amplíe la conectividad, dado que actualmente, aseveró, solo existen 150.000 servicios de este tipo, pese a que Sutel asevera que son 900.000. “El resto se conecta con cable coaxial”, afirmó Figueres.
Lineth Saborío, candidata del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), habló del impulso a la tecnología 5G a través de una alianza público privada para fomentar la inversión y el desarrollo.
Welmer Ramos, de Acción Ciudadana (PAC), planteó la idea de buscar un acuerdo sobre cómo implementar la 5G. Además, mencionó el interés de que se fortalezca la regulación a través de Sutel y una alianza público privada para desarrollar grandes autopistas de comunicación tecnológica para la gente y las empresas.
Los candidatos también coincidieron en flexibilizar el crédito para las pymes tecnológicas y los emprendedores, así como hacer cambios en el modelo educativo para ampliar la oferta de carreras afines y transformar el Gobierno hacia uno más digital.