La diputada Patricia Villegas, del Partido Integración Nacional (PIN), le retiró este lunes su firma a la propuesta legislativa que legalizaría las huelgas en servicios esenciales, como los de hospitales, policías o el suministro de energía y agua.
Villegas decidió quitarle su apoyo a la moción de texto sustitutivo que lideró la legisladora liberacionista, Franggi Nicolás, para el proyecto de regulación de huelgas que la Asamblea discute.
La diputada del PIN argumentó que, cuando leyó a profundidad el nuevo texto, se dio cuenta de que no era lo mismo que le habían explicado a la hora de pedirle su firma.
“La diputada Franggi Nicolás me solicitó respaldo con argumentos que parecían correctos y lo firmé. Sin embargo, al estudiar el texto, constaté que el documento no refleja los razonamientos que me dieron”, respondió Villegas.
LEA MÁS: 12 diputados intentan legalizar las huelgas en hospitales y policías
La legisladora del PIN contestó las consultas de La Nación a través de mensajes de texto de Whatsapp, pues adujo que no podía salir de la sesión del plenario, este lunes por la mañana.
Añadió que, al retirar la firma de esa moción de textos sustitutivo, es “congruente con el proyecto de ley” que impulsó ella misma para que los comedores escolares sean considerados un servicio público esencial.
La diputada del PIN alegó que, precisamente, el servicio de los comedores no debe ser interrumpido de ninguna manera por las huelgas.
"El interés que defiendo es resguardar los servicios fundamentales que, de interrumpirse, causan un grave daño al interés de la niñez en su salud y en su escolaridad", indicó Villegas.
LEA MÁS: Fuerte bloque de diputados rechaza texto que legalizaría huelgas en hospitales y policías
La decisión de Patricia Villegas llega tres días después de que la otra diputada del PIN, Zoila Volio Pacheco, anunciara que está considerando dejar esa fracción parlamentaria por el apoyo de Villegas y de Walter Muñoz al plan alterno de Franggi Nicolás.
LEA MÁS: Zoila Rosa Volio rompería con el PIN
La moción de la liberacionista, que firmaba junto con 11 parlamentarios más (ahora 10), legalízaría las huelgas en servicios esenciales, como la policía, los hospitales, , el rescate de víctimas, el suministro de agua potable y de combustibles, los comedores escolares y la entrega de cuerpos en las morgues judiciales.
El texto liderado por Franggi Nicolás establece que serán legales las huelgas en servicios esenciales si, antes del inicio de la huelga, “se garantiza por medio de un plan de servicios mínimos que no se pondrá en riesgo ni la vida, ni la salud, ni la seguridad de las personas”.
La nueva redacción que propone el bloque afín a Nicolas además impediría aplicarles rebajos salariales, en forma retroactiva, a los funcionarios que participen en movimientos que sean declarados ilegales, como ocurre hoy.
Únicamente, permitiría aplicar las sanciones si la persona no regresa a trabajar después de la declaratoria.
En palabras simples, un empleado se podría ir varios meses a huelga recibiendo el sueldo aunque, al final, un juez determine que su cese de labores fue ilegal.
También quita la obligación de que los sindicatos establezcan una dirección electrónica para recibir notificaciones.
La propuesta de Nicolás se presentó luego de que ella se reunió con Albino Vargas y otros representantes de la Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP).
Sobre Zoila Volio: ‘Tiene escasa madurez emocional’
Cuando se le preguntó a Patricia Villegas si habló con Zoila Volio antes de retirar su firma de la moción de Franggi Nicolás, la legisladora más bien atacó a su compañera de bancada.
"Considero en ella una persona con escasa madurez emocional, al ser explosiva y dar declaraciones a la prensa y en ningún momento llegar al diálogo interno con la fracción ni tampoco con el comité ejecutivo", refirió la congresista.
Villegas también reclamó que Volio no haya conversado con ella antes de salir a los medios, pero también aseguró que sus declaraciones no tuvieron nada que ver con el retiro de la firma.
"La decisión que he tomado es sumamente propia, no influida por nada ni por nadie", argumentó.
Añadió que ella es "consecuente" con lo que dice y hace.
A la vez, indicó que cuando Volio dice en redes sociales "que le dan vergüenza sus compañeros de fracción, es un índice de la pobreza del respeto al derecho ajeno de opinión que ella misma proyecta con sus ocurrencias".
La congresista también dijo que ella nunca ha “incurrido en ofensas” hacia Zoila Volio, “a pesar de sus proyectos presentados”, a los que calificó de “difíciles de asimilar”.