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En las calles Limón, la provincia en la que Fabricio Alvarado obtuvo el 42% de los votos en la primera ronda, el ambiente electoral ha sido frío este domingo.
Pocas personas acuden a los centros de votación, lo cual contrasta con las decenas de vehículos con banderas y signos externos de Restauración Nacional, partido de Alvarado.
Fabio Molina, dirigente de Restauración Nacional, comentó que, por ejemplo, en la escuela Rafael Yglesias Castro, en el centro de Limón, la presencia de votantes ha sido muy baja.
"Esperamos que en la tarde haya mucho más gente, la movilización ha sido mucho más baja que en la primera ronda", admitió Molina.
En la acera del frente, Javier Acuña, simpatizante del Partido Acción Ciudadana (PAC), reconoció que en el Caribe el candidato de Restauración Nacional tiene la mayoría de votantes.
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"Esperamos que haya un voto silencioso, que muchas personas estén viniendo a votar sin signos externos y que voten por Carlos Alvarado", afirmó Acuña.
Juan Torres, vecino de Cieneguita, ejerció el sufragio a las 10 a. m. en la escuela de esa comunidad.
A esa hora había pocas personas emitiendo su voto.
"Hay mucha gente que todavía está en la playa o en las actividades de Semana Santa", declaró Torres.
En esa escuela hay siete juntas receptoras,con 4.200 personas inscritas, aproximadamente.
El mismo panorama vivió la escuela de Río Banano; allí, a las 11 a. m. solo había dos personas en las mesas de votación.
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Mileydit Arias, de 80 años, era una de esas dos personas. La mujer, vecina de la comunidad de Beberly, afirmó que no votaba desde las elecciones de 1998.
Aseguró que decidió votar esta vez porque no comparte las ideas de Fabricio Alvarado y "porque Carlos Alvarado es muy guapo".
