La expresidenta de Nicaragua, Violeta Barrios de Chamorro (1990-1996), de 94 años, fue trasladada vía aérea este martes a Costa Rica para estar bajo el cuidado de su familia que es perseguida política del régimen de Daniel Ortega.
“A partir de ahora, doña Violeta se establecerá en San José bajo el cuidado y el amor de su familia, con el acompañamiento de personal de salud y médicos especializados”, dijo la familia Chamorro Barrios en un comunicado.
Tres de los cuatro hijos de la expresidenta son perseguidos por el gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo. El periodista Carlos Fernando Chamorro, uno de los más influyentes en su país, se exilió en Costa Rica por segunda vez en junio de 2021 cuando comenzaron a apresar a periodistas y políticos.
En febrero pasado, en una acción considerada ilegal y arbitraria por expertos constitucionalistas, le quitaron la nacionalidad nicaragüense junto a 222 presos políticos y 93 opositores más, entre ellos obispos e intelectuales de la talla de Sergio Ramírez y Gioconda Belli.
En 2021, también fue apresada otra hija de la exmandataria, Cristiana Chamorro, precandidata presidencial y favorita en las encuestas para derrotar a Ortega; también, apresaron a Pedro Joaquín Chamorro, exdiputado opositor.
Los dos fueron expulsados a Estados Unidos en febrero de este año en un vuelo chárter junto a 220 presos políticos más. A todos le quitaron la nacionalidad.
“Desde septiembre 2018, después que sufrió un accidente cerebrovascular, nuestra madre permaneció en su residencia en Las Palmas, en Managua, bajo el cuidado y el amor de su familia, acompañada por personal de salud especializado”, explicó la familia en el comunicado.
Violeta Barrios de Chamorro se convirtió en 1990 en la primera mujer en ser presidenta en Latinoamérica después de derrotar en las elecciones de 1990 a Daniel Ortega.
A ella se le atribuye el inicio de un periodo de gobiernos democráticos en el país vecino del norte, luego de ser gobernado desde los años 30 hasta 1979 por una dictadura familiar, la de Somoza, y por los sandinistas de Ortega que llegaron al poder en ese año.
La expresidenta asumió un país devastado por la guerra civil de los 80 y uno de sus mayores logros fue la pacificación de una nación que había vivido decenas de conflictos armados y divisiones de la familia.
Su misma familia lo vivió en carne propia cuando dos de sus cuatro hijos apoyaban a la revolución sandinista y otro era miembro de la Contra, el ejercito de campesinos que se armó, financiado por Estados Unidos, para tratar de derrocar a Ortega.
El marido de Chamorro Barrios, Pedro Joaquín Chamorro Cardenal, exdirector del diario La Prensa, fue asesinado por la dictadura de Somoza en 1978.
En el 2022, Ortega confiscó a ese diario, apresó a sus directivos y persiguió a sus periodistas que huyeron hacia Costa Rica.
“Agradecemos profundamente a los médicos, personal de salud, y trabajadoras de servicio, que cuidaron por su bienestar en Nicaragua en todos estos años, y a todas las personas que siempre la acompañan con sus oraciones y se mantienen pendientes de su estado de salud, que continúa siendo delicado, pero estable”, dijo la familia Chamorro en el comunicado.