Siete partidos políticos ganaron el derecho a repartirse casi ¢24.900 millones de fondos públicos después de las elecciones nacionales del domingo 4 de febrero, debido al caudal de votos que recibieron.
Se trata de Restauración Nacional (¢5.932 millones), PLN (¢5.240 millones), PAC (¢5.238 millones), PUSC (¢4.220 millones), PIN (¢2.365 millones), Republicano Social Cristiano (¢1.263 millones) y Frente Amplio (¢640 millones).
Según la legislación, solo reciben deuda política los partidos que superen al menos el 4% de la votación total o los que ganen al menos un diputado.
A nivel nacional, esas condiciones solo las obtuvieron estos siete partidos, de acuerdo con los resultados electorados divulgados en el último corte del TSE, con el 94% de las mesas escrutadas.
A nivel provincial, solo otras dos agrupaciones que recibieron derecho a la contribución estatal aunque no llegaron al Congreso: Auténtico Limonense (con ¢85 millones) y Unión Guanacasteca (con ¢48 millones).
Ambas agrupaciones, que no postularon candidato presidencial, obtuvieron más del 4% de los votos en sus respectivas provincias.
Para estos comicios, el Estado dispuso de ¢25.030 millones de deuda política.
El caudal de votos
Para calcular el total de votos, se toman en cuenta tanto los votos obtenidos para presidente como para diputados y, luego, se distribuye el monto total de la deuda entre el total de votos de los partidos con derecho a recibir dinero.
Esa fórmula arroja un precio por voto, que en este caso es de ¢6.924.
Luego, se multiplica el monto por voto por la cantidad de votos obtenida por cada partido.
Restauración, por ejemplo, obtuvo más de 860.000 votos, de los cuales 506.000 fueron para presidente y 356.000 para diputados.
El PLN y el PAC sumaron 760.000 votos cada uno, pero con claras diferencias entre sufragios para diputados y presidente. Acción Ciudadana obtuvo muchos más votos para presidente que para diputado y Liberación recibió un poco más de votos para la Asamblea.
Fabricio y Carlos con holgura a segunda ronda
Estos datos envían a Fabricio Alvarado y a Carlos Alvarado con holgura financiera hacia la segunda ronda, pues ya saben los montos a los que tienen derecho.
Todavía no se saben los montos definitivos que gastaron hasta el 4 de febrero, pero, hasta el 31 de diciembre, Restauración solo había reportado gastos por ¢425 millones y el PAC, por ¢900 millones.
En general, los montos están por debajo de lo gastado hasta diciembre, pues el PLN había registrado ¢2.571 millones hasta diciembre y el PUSC, ¢1.420 millones.
¿Tienen los partidos que cobrar todo el dinero?
No, no tienen que cobrar todo el dinero al que tienen derecho, pero es posible.
Los partidos lo que deben hacer es facturar sus gastos de campaña y el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) solo les reconocerá los que considere comprobados.
Si gastaron menos del dinero que pueden cobrar, pueden ocurrir dos cosas: primero, que la diferencia quede guardada en favor del partido siempre que el monto no supere el porcentaje que cada agrupación decide guardar, en su estatuto, para gastos de organización y capacitación.
Si un partido decidió reservar un 15% para esos gastos, solo le podría reservar un 15% adicional.
Segundo, en caso de que el monto supere el doble de la reserva, el dinero remanente se devuelve a las arcas del Estado.
¿Quiénes quedan fuera?
No tendrán derecho a recibir deuda política agrupaciones como el Movimiento Libertario, Nueva Generación, PASE, Alianza Demócrata Cristiana y Renovación Costarricense, puesto que no obtuvieron ni el 4% ni algún diputado.