El presidente de la República, Abel Pacheco, urgió a la Cancillería, en junio del año pasado, para que nombrara como cónsul en Sevilla, España, al empresario Bernardo Martín Moreno.
Así consta en una carta fechada el 10 de junio del 2004, que Pacheco le dirigió al ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Tovar Faja y de la cual La Nación tiene copia.
Dicho documento es parte del expediente de Martín Moreno que tiene la Dirección de Servicio Exterior de dicho Ministerio.
Ayer este diario obtuvo copia del expediente en el que también consta que, aparte de la premura de la solicitud de Pacheco, también hubo una serie de trámites entre los gobiernos de ambas naciones que se hicieron "con carácter de urgencia".
El caso del cónsul honorario en Sevilla tomó interés el lunes cuando se reveló que el español estaba dispuesto a invertir en una firma que pretende una concesión en el Polo Turístico de Papagayo, Guanacaste.
Además, que una fundación que él preside, financió la publicación del libro Poemas, cuentos y dibujos , una antología de escritos del presidente Pacheco.
Tras las revelaciones, ayer Martín Moreno envió una carta al Mandatario en la cual le comunica que pone a su disposición el puesto como cónsul.
Con premura. En la orden que el Presidente envió al Canciller, no solo le indica que ya tomó la decisión de nombrar a Martín, sino que le manifiesta la urgencia de efectuar el trámite.
"Amablemente le instruyo implementar el referido nombramiento antes del 30 de junio, ya que ofreceré una pequeña recepción al señor Martín en Casa Presidencial en esa fecha", indica Pacheco en la nota enviada a la Cancillería.
Consultado ayer, Tovar explicó que la designación no quedó en firme sino hasta el 10 de diciembre -seis meses después- , debido a que era necesario cumplir con el trámite de requisitos que establece el Estatuto del Servicio Exterior.
La mayoría de requisitos constan en el expediente. Únicamente no aparece en la carpeta la constancia judicial de no haber cometido delitos ni de estar en investigación y los documentos que demuestren su solvencia económica.
Trámite raudo. En España también el trámite fue de "urgencia", tal y como lo evidencian los documentos de Cancillería.
Por ejemplo, desde el 22 de setiembre del 2004, la embajada de Costa Rica en Madrid pidió al Ministerio de Asuntos Exteriores "ampliar el consulado honorario de Costa Rica en Sevilla a dos personas".
También el 15 de noviembre del mismo año, la misma embajada remite al ministerio de Exteriores español el currículo de Bernardo Martín Moreno, con el fin de solicitar el "beneplácito" para su nombramiento.
En la nota se pide un trámite "con carácter de urgencia" y lo justifica por "el estado de salud de nuestro Cónsul General en Sevilla, don Martín Valero y Montes" y por la visita que el presidente Pacheco haría el 17 de diciembre del 2004 a esa ciudad.
El 10 de diciembre, el Presidente elabora las "Letras patentes" que acreditaban al empresario como cónsul ante el gobierno español.
Eso ocurrió cinco días antes de que el nombramiento del empresario Bernardo Martín Moreno se hiciera oficial.