La reforma al Reglamento del Seguro de Salud, aprobada el jueves, permitirá que unos 15.200 gais puedan recibir de sus parejas el beneficio familiar de la atención médica en hospitales y clínicas de la Caja Costarricense de Seguro Social.
Para lograrlo, deben demostrar que tienen, al menos, un año de convivencia y que existe dependencia económica. Este es el mismo requisito que se les solicita a las parejas heterosexuales.
Según datos recabados en diferentes fuentes por la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) –incluido el Censo 2011– , 32.518 personas del grupo LGTBI (lesbianas, gais, transexuales, bisexuales e intersexo) no están aseguradas.
De ellos, el 50% sostiene algún tipo de relación de convivencia y son quienes podrían recibir los beneficios de la reforma.
De acuerdo con los cálculos actuariales que se tomaron en cuenta para aprobar la modificación, la inclusión de esos asegurados indirectos representaría una erogación anual de ¢5.667 millones.
El gerente financiero de la Caja, Gustavo Picado, explicó que los directores analizaron varios escenarios antes de concluir que la enmienda era financieramente viable: su impacto desde la perspectiva del gasto y del ingreso.
Desde el gasto, comentó Picado, la Dirección Actuarial estima en un 0,34% el impacto por la ampliación de la cobertura en relación con el gasto total del Seguro de Salud.
Desde el ingreso, la Gerencia Financiera calcula la reducción entre un 0,15% y un 0,002% de los ingresos totales de ese seguro.
“La seguridad social es una institución progresiva y ajustable a las condiciones de la sociedad y el país. La institución tiene que ir evolucionando. Si no fuera así, la cobertura de nosotros no andaría por el 94%.
”Costa Rica siempre ha ido un paso adelante en cubrir y adaptar el seguro a los nuevos tiempos y a la nueva realidad social y demográfica del país”, dijo Picado, refiriéndose a los cambios en los artículos 10 y 12 del Reglamento.
El acuerdo. La decisión de Junta Directiva se tomó la noche del jueves y contó con un voto de mayoría: ocho contra uno.
El directivo que no acuerpó el acuerdo pertenece al sector empresarial, pero oficialmente no trascendió su nombre.
El acuerdo, enviado por la oficina de prensa de la CCSS por solicitud de La Nación , contiene tres puntos.
En el primero, la modificación a los artículos 10 y 12 del citado reglamento, que, entre otras cosas, considera como compañero a la “persona, hombre o mujer, que convive en unión libre, en forma estable y bajo un mismo techo con otra de distinto sexo o con otra del mismo sexo”.
El segundo punto acordado da un plazo de tres meses para que las gerencias Financiera y Médica “evalúen de forma integral las normas asociadas con esta cobertura, incluido un análisis exhaustivo de los procedimientos e instrumentos de ingreso, permanencia y suspensión en esta modalidad, así como los mecanismos de control y evaluación periódicas de su evolución en el tiempo”.
El último apartado aclara que la entrada en vigencia de la reforma será hasta que la Administración cumpla con los puntos anteriores y la Junta Directiva haya aprobado los ajustes y controles en el uso de la figura de beneficio familiar.
“Me llena de orgullo que la Caja haya sido la punta de lanza en el reconocimiento de estos derechos. Esta Junta Directiva está profundamente comprometida con el tema social”, dijo José Loría, uno de los nueve integrantes de la Junta Directiva de la CCSS.
Yashin Castrillo, abogado y activista de la población LGTBI, expresó que él presentó, el 9 de mayo, una solicitud a la Presidencia Ejecutiva y a la Junta Directiva de la Caja para que, además de reformar el Reglamento de Salud, se cambie el artículo nueve del Reglamento de Pensiones.
Lo anterior, comentó Castrillo, permitiría que, a la muerte de una persona gay, este (a) pueda heredar la pensión a su pareja tal y como sucede entre los heterosexuales.
“No se puede reconocer la cobertura de salud y mantener la misma exclusión en cuanto al beneficio de pensión para estas mismas parejas. Desde mi punto de vista, habría una contradicción”, dijo Castrillo.
Hasta ayer, confirmó el abogado, la CCSS no había dado respuesta a su solicitud.