En momentos en que, al menos, 86.000 personas llevan esperando 90 días o más para ser operadas, el 30% de los quirófanos de los hospitales está sin usar por falta de personal, principalmente, especialistas en anestesiología.
La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) tiene 196 salas en todo el país, entre quirófanos, salas de operaciones y de shock , y de expulsivos (para dar a luz), según registros de la Gerencia de Infraestructura y Logística.
De esos sitios, 59 no operan un solo paciente a pesar de la inversión millonaria que representó su construcción y equipamiento.
Según datos de la mencionada gerencia, en promedio, construir y equipar un quirófano cuesta ¢250 millones.
En un recorrido de La Nación por varios hospitales como parte del seguimiento a la crisis de quirófanos del Hospital México , se encontraron varias salas ociosas.
En el Hospital San Vicente de Paúl, en Heredia, uno de sus ocho quirófanos nuevos llevaba cuatro años sin usar. Esta es una de las dos salas que ese hospital le cedió al México para operar pacientes neuroquirúrgicos.
Ese quirófano de Heredia es uno de los ocho completamente nuevos que la CCSS tiene y que no usa desde hace varios años.
Hay otros cinco distribuidos en los Centros de Atención Integral en Salud (CAIS) de Cañas, Puriscal y Desamparados. En el Hospital de Guápiles de Pococí (Limón) otros dos están sin estrenar, informó María Eugenia Villalta Bonilla, gerente médica de la Caja.
De acuerdo con un cálculo solicitado por este diario a la gerente de Infraestructura, Gabriela Murillo Jenkins, la depreciación para infraestructura ronda entre un 1% y un 2% anual, y la depreciación para equipos está entre un 10% y un 12% anual.
“A los cinco años, un equipo puede tener un valor de entre 50% y 60% del valor original”, explicó.
Fuga de médicos. A junio pasado, 86.000 personas en todo el país tenían 90 días o más esperando por una cirugía, de acuerdo con el registro más actualizado de listas de espera de la CCSS.
La gerente médica reconoció que el problema de los quirófanos agudiza esos listados.
Villalta lo atribuye, principalmente, a la migración de especialistas en anestesiología a servicios privados y al nuevo Hospital del Trauma, del Instituto Nacional de Seguros (INS).
La funcionaria explicó que la tarea de estos médicos también se ha diversificado, y ahora sus servicios dentro de los hospitales públicos no solo son requeridos para operaciones, sino para procedimientos y diagnósticos que usan anestesia.
En la actualidad, 170 anestesiólogos laboran en la CCSS, pero se necesitan, al menos, 60 más para cubrir la demanda quirúrgica básica, dijo Villalta.
Cada año, entre 20 y 25 nuevos profesionales en esa rama salen de las universidades.
En los últimos años, la institución ha hecho un esfuerzo para dotar de cirujano y anestesiólogo, especialmente a los hospitales regionales y periféricos que carecían de este personal.
Villalta destacó la presencia de esos profesionales en los hospitales de Los Chiles, Ciudad Neily, Nicoya, Quepos, Limón, Turrialba, San Vito y Golfito.
A media máquina. La subutilización de quirófanos es otro de los problemas que afecta a los hospitales de la CCSS: menos del 5% de las salas que están activas en horario tradicional, realizan operaciones programadas después de las 4 p. m.
Esto también se debe a la falta de personal suficiente para operar, informó la Gerencia Médica.
Sin embargo, la CCSS está aplicando medidas para mejorar la gestión de los quirófanos, en especial, un monitoreo para verificar el uso adecuado de las salas.
Uno de los objetivos es alcanzar el ideal de que estos operen pacientes al menos cinco de las ocho horas del horario tradicional.
También se está tratando de abrir el segundo turno de operaciones programadas, pero esto depende de los recursos que existan para el pago de horas extra .