Ni un solo paciente del Hospital Monseñor Sanabria, de Puntarenas, resultó afectado por la bacteria Clostridium difficile el año pasado. Tampoco se registraron casos en el 2011 y solo hubo tres reportes en el 2012.
En cambio, este año, la cifra de enfermos atacados por la bacteria hospitalaria llegó a 57, según datos al 29 de noviembre.
En criterio de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), se trata de un “aumento inusual”, que la entidad atribuye a varias razones.
Por una parte, dijo, podría ser que el fortalecimiento de la vigilancia epidemiológica tuviera como resultado una mayor detección. Por otra, está evaluando la relación con patologías asociadas a infecciones de vías respiratorias inferiores graves (como neumonías y bronconeumonías), contra las que se requiere mayor uso de antibióticos.
El alto consumo de estos productos debilita la flora bacteriana, lo que aumenta la vulnerabilidad del paciente.
“En Puntarenas, el hospital ha aplicado todas las medidas necesarias desde el primer momento y ha incrementado las medidas de manejo de pacientes y de educación de los visitantes, lo cual es manejo óptimo”, manifestó Xiomara Badilla, jefa de Vigilancia Epidemiológica de la Caja, en un comunicado de prensa.
De acuerdo con datos de la entidad dados a conocer este jueves, en el país se han reportado este año 423 casos de Clostridium . De esos, el 13,4% ha ocurrido en Puntarenas.
Bacteria oportunista. Ese total nacional de afectados está, en opinión de Badilla, “dentro del comportamiento habitual” de una bacteria oportunista, siempre presente en los centros médicos.
La mayor cantidad de pacientes se presentó en el Hospital Nacional de Niños, con 108 casos. Le siguen el Hospital México, donde hubo 82 afectados, el de Puntarenas, con 57 pacientes, y el Calderón Guardia, con 54.
“La Clostridium difficile es una bacteria anaeróbica citotóxica (que no requiere oxígeno para crecer y tiene un efecto tóxico sobre determinadas células), presenta el problema de su crecimiento y diseminación, y es causa frecuente de la colitis infecciosa, prevalente en ancianos hospitalizados que se complican por el uso de antibióticos”, explicó Xiomara Badilla.
Su presencia es frecuente en los hospitales, agregó, donde tiene predilección por los pacientes de edad avanzada, con enfermedades de fondo,con alguna operación reciente o con tratamiento de antibióticos.
Sus principales síntomas son diarreas abundantes y dolores abdominales.