La inseminación artificial ya tiene una guía regulatoria. La tarde de este miércoles, la junta directiva del Colegio de Médicos y Cirujanos aprobó las recomendaciones hechas ayer por la Comisión de Fertilidad Humana.
Se trata de dos recomendaciones principales que tienen que ver con la cantidad de hormonas sexuales de la mujer en la sangre y con la cantidad de folículos (lugar donde se desarrollan las células reproductivas de la mujer).
"La idea es que no se realice más una inseminación si una mujer tiene más de cuatro folículos o si la cantidad de estradiol (hormona) en su sangre es mayor a 1.000 picolitros por centímetro cúbico. Una cantidad de hormonas aumenta las posibilidades de un embarazo múltiple con todos los riesgos que este conlleva", explicó Alexis Castillo, presidente del Colegio de Médicos.
La inseminación artificial es una técnica de reproducción asistida que se practica en Costa Rica desde la década de 1950 y que consiste en estimular en las mujeres la producción de óvulos, al añadir, por vía oral o inyectada, dosis de una hormona que ellas producen naturalmente llamada “folículoestimulante”.
La meta de la inseminación es aumentar la producción de folículos para que haya más posibilidades de conseguir un embarazo.
En condiciones normales, el folículo crece durante la primera fase del ciclo menstrual hasta unos 22 milímetros. Durante este tiempo, se rellena de líquido con nutrientes para “alistar” la célula reproductora femenina. Así, cuando llega el momento de la ovulación, se abre un orificio en su pared y sale el ovocito que puede ser fecundado.
En el caso de una inseminación artificial, la ingesta de hormonas hace que las mujeres produzcan más folículos, con lo cual el riesgo de embarazo múltilple es mayor.
"Colocando solo cuatro folículos, mantendremos las posibilidades de que el embarazo sea de un solo bebé de un 90%, siempre habrá un 10% de riesgo de gemelos, trillizos y cuatrillizos, pero es menor", aseguró Castillo.
El jerarca aseguró que los niveles hormonales de la mujer se revisarán cinco días después de haberse realizado la primera ingesta hormonal, para darle oportunidad al cuerpo de absorberlas y regurlarlas.
Estas disposiciones se aprobaron en firme esta tarde, y durante la próxima semana se difundirán a los 16 médicos especialistas en reproducción humana para que las apliquen.
Castillo recordó que este tipo de técnicas de reproducción asistida deben realizarse solo en casos extremos cuando ya se haya intentado por otros medios (como estudios previos de ovulación y esperma, y el tener relaciones sexuales tras tomar bajas dosis de hormonas). Además, todos estos procedimientos deben ser realizados y supervisados por profesionales en la materia.