Después de una espera promedio de cuatro años, 114 pacientes del Centro Nacional de Rehabilitación (Cenare) finalmente recibieron sus sillas de ruedas personalizadas. La inversión realizada por la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) para adquirir este equipo ascendió a $490.000.
Roberto Aguilar Tassara, director del Cenare, explicó que cada una de estas sillas se diseña específicamente conforme a la condición de discapacidad permanente de cada paciente, siguiendo las indicaciones médicas de los especialistas del centro. La entrega de estas sillas se llevó a cabo el jueves 16 de noviembre.
Estos dispositivos fueron fabricados teniendo en cuenta las medidas individuales de cada paciente, para que realmente le ayuden a mejorar su movilidad y prevenir lesiones derivadas de posturas o posiciones inadecuadas. Aguilar Tassara afirmó que el propósito fundamental es facilitar el desarrollo social, educativo y laboral de estas personas.
Entre las sillas que fueron entregadas hay sencillas, motorizadas y altamente tecnológicas. Responden a la patología de cada paciente, explicó Christine Ares Rivet, fisiatra y jefe de consulta externa del Cenare.
Recientemente, el Cenare finalizó la toma de mediciones y llenado de fichas técnicas de más usuarios en situación de discapacidad permanente que están a la espera desde hace varios años de una silla de ruedas especializada y con medidas específicas. Para el próximo año, se espera entregar 432 sillas.
Listas de espera
Las listas de espera en la Caja son históricas y de ellas no escapan estas ayudas técnicas que más pacientes solicitan para mejorar su condición de salud y calidad de vida.
Solo en el Cenare la lista de espera para sillas de ruedas especiales ha rondado las 900 personas en los últimos años. Son asegurados de la CCSS con condiciones particulares que deben esperar entre tres y cuatro años, informó el director de este hospital, Roberto Aguilar Tassara.
“Las sillas de ruedas son entregadas dependiendo del tipo de discapacidad y las necesidades de cada paciente, por lo que son personalizadas y a la medida. Esto se hace por medio de una licitación.
“La entrega anual ha sido de aproximadamente 125 sillas, pero esto ha generado una lista de 900 pacientes”, informó el médico a La Nación, en junio anterior.
Con anuencia de la Gerencia Médica, el Cenare triplicó su presupuesto anual para esas compras. Pasó de ¢270 millones a más de ¢810 millones con el objetivo de eliminar esa lista en tres años y reducir la espera promedio a un año.
El 24 de mayo, el presidente Rodrigo Chaves Robles anunció un proyecto de ley para eliminar las exoneraciones a implementos de uso médico, como sillas de ruedas. El proyecto incluye gravar con un 2% del IVA estos aparatos.
En ese momento, Chaves justificó el proyecto al afirmar que la mayoría del equipo médico para personas con discapacidad, como bastones, camas, dispositivos odontológicos y sillas de ruedas, los daba la CCSS.
Sin embargo, un reportaje de La Nación demostró que las esperas para obtener una de estas ayudas técnicas son prolongadas, especialmente la espera por una silla de ruedas.
Los pacientes se ven obligados a recurrir a organizaciones de beneficencia para obtener más rápidamente estos equipos.
Según informó la Dirección de Información y Comunicación de la Casa Presidencial, el proyecto es una propuesta del Ministerio de Hacienda. Todavía está en la Asamblea Legislativa y no ha sido convocado para su discusión.
Esta nota se actualizó el lunes 20 de noviembre, a las 10:42 a.m., con información enviada por prensa de Casa Presidencial.