¿Está vacunado contra la covid, incluso con la dosis de refuerzo, pero su diabetes, obesidad o hipertensión están mal controladas? ¡Mucho cuidado! Estas enfermedades descompensadas o mal cuidadas son las responsables de enviar al hospital a una proporción importante de enfermos de covid-19.
Según Roy Wong McClure, médico epidemiólogo de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), al menos un 60% de los casos que se hospitalizaron en la última ola pandémica tiene una condición de riesgo: diabetes, obesidad, hipertensión o es adulto mayor. Además, un 30% de los internados tiene comorbilidades, es decir, una o más enfermedades además del padecimiento primario.
LEA MÁS: Personas sin vacuna tienen 4,1 veces más riesgo de hospitalizarse, concluye CCSS
“¿Qué quiere decir esto? Que las comorbilidades están generando un enorme peso a pesar de la vacunación. Mensaje: aunque usted esté vacunado si tiene condiciones de riesgo, sígase cuidando. Pero si no está vacunado, aunque no tenga condiciones de riesgo, ¡cuidado! Porque usted está en un enorme peligro de tener una enfermedad que requiera hospitalización”, explicó el médico.
De acuerdo con datos de la CCSS, la probabilidad de ingreso hospitalario se incrementa 4,1 veces en aquellos no vacunados. Los nos vacunados en ese periodo tenían una tasa de hospitalización de 47,9 internados por cada 100.000 individuos, mientras que en quienes tenían por lo menos una dosis la tasa era de 11,7.
“Tenemos cuatro veces más posibilidad de ser hospitalizados cuando una persona no se vacuna; es un riesgo extremadamente alto y que nos lleva a un escenario crítico. Cuando decimos hospitalizados es en cualquier severidad: desde una cama de salón hasta UCI (Unidad de Cuidados Intensivos) o terapia de respaldo respiratorio”, indicó el epidemiólogo.
Para llegar a estas conclusiones, Wong analizó los datos de internados mayores de 18 años según su estado de vacunación. En el periodo de análisis había 531 hospitalizados: 106 sin vacunas y 425 con alguna vacuna.
El estudio también le permitió descubrir la gran susceptibilidad que tienen quienes padecen enfermedades de fondo descompensadas, independientemente de su edad y de su condición de vacunación.
“El hecho de estar vacunado no quiere decir que me aislo totalmente de una enfermedad severa. Me protege de una manera importante, pero si tengo alguna comorbilidad, ¡cuidado porque la vacuna no es infalible! Entra un pulso entre la comorbilidad de fondo y la vacuna. Uno espera que gane la vacuna.
“Pero las hospitalizaciones, tal parece que están siendo condicionadas por aspectos de comorbilidad. Por eso, necesitamos que se sigan cuidando. ¿De qué? De su comorbilidad, de evitar el contagio y de mantener su esquema de vacunación completo”, advirtió el médico.
Efectos menores
Wong espera que los resultados de una mayor cobertura de vacunación anticovid, sumados a la circulación de una variante como ómicron, menos agresiva aunque más contagiosa, deje efectos poscovid mucho menores en severidad que los cosechados en olas anteriores.
“Al tener una enfermedad con menor grado de severidad por el proceso de vacunación y por la presencia de una variante menos virulenta o agresiva, esperaríamos que estos efectos poscovid temporales fueran muchísimo menos.
“La ola ómicron convirtió esto en una enfermedad de mucha menos severidad. Esperaríamos que no generara tantos efectos de poscovid o covid prolongada en la población afectada”, agregó.
Wong consideró que las estrategias de vacunación a partir de ahora deben estar orientadas a la realidad que vive el país.
“Si viviéramos en un país con disponibilidad hubiéramos alcanzado un escenario como el de ahora muchísimo antes. Pero las vacunas tienen que ser orientadas para definir para qué es la vacuna, qué significa estar vacunado y qué no significa estar vacunado.
LEA MÁS: Muertes prematuras causadas por covid-19 quitaron a ticos 86.723 años de vida
“¿Para quién son las vacunas? Para el grupo de más vulnerabilidad. ¿Qué significa estar vacunado? Significa una estrategia para tener una mejor evolución ante la presencia de una infección. La vacuna nos aleja de esa enfermedad grave, de la UCI, de la ventilación mecánica.
“¿Qué no es la vacuna? No es una mascarilla, no es un mecanismo para evitar la transmisibilidad. Si recordamos estos aspectos concluimos que debemos ser estratégicos”, aseveró Wong.
El epidemiólogo espera que en las siguientes semanas el país empiece a registrar unos 950 casos semanales. Un escenario similar al de enero del 2021 pero con una virtud: tener más población vacunada y con una proporción mucho menor de enfermos graves que requieran de una UCI o estén muriendo.