Los problemas de audición y la sordera se vuelven más comunes en Costa Rica, pero hay una forma de detectarlos a tiempo. Esto permitirá atender el problema y mejorar la calidad de vida. Especialistas de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) recomiendan estar atentos a tres señales:
- Incapacidad para reconocer las palabras en las conversaciones que se escuchan.
- Subirle el volumen a los dispositivos que escucha, porque de lo contrario no perciben bien los sonidos.
- Dificultad para establecer una conversación.
Gilbert Guevara Villegas, especialista en Otorrinolaringología del Hospital San Juan de Dios, recalcó que una detección temprana y el tratamiento adecuado pueden marcar la diferencia en la evolución de la sordera. Según dijo, la mayoría de los pacientes ya tienen varios meses de no entender correctamente las palabras, con una pérdida muy leve hasta progresar a una sordera más severa.
El diagnóstico de los problemas auditivos se realiza mediante un examen llamado audiograma o audiometría, donde al paciente se le expone a varios tonos de sonidos, desde el más grave, hasta el más fino, en diferentes niveles de intensidad o volumen. Según los resultados, se califica en sordera leve, moderada, severa, profunda o anacusia.
Durante 2023, la CCSS atendió 57.412 personas debido a sordera y de enero al 22 de julio de este año ya se reportan 38.423.
Los adultos mayores son quienes más buscan tratamiento por esta causa, el 58,79% de estas consultas son en personas de 65 años o más.
Además, en 2022 se reportaron 733 hospitalizaciones por causa de sordera, mientras que en el 2023 la cifra fue de 886. En su mayoría correspondió a personas mayores de 45 años. Los casos de internamiento están relacionados principalmente con una sordera de origen súbito o de una pérdida auditiva muy rápida.
LEA MÁS: ¿Cómo destapar los oídos? Lo que nunca debe hacer y lo que sí
Prevenir problemas de audición en los niños
En Costa Rica, todo niño es sometido a un tamizaje auditivo neonatal. Este se aplica en todos los establecimientos de salud que tienen servicio de maternidad. Gracias a él, se determinan los casos de sordera congénita.
Paula Ramos Castro, jefa del servicio de Otorrinolaringología del Hospital Nacional de Niños (HNN), detalló que cuando el tamizaje sale alterado, se refiere a centros más especializados. Allí se completan estudios diagnósticos más específicos que determinan en qué punto está fallando el sonido.
En estos casos, es fundamental el diagnóstico y el seguimiento, ya que el sistema de salud les proporciona aparatos auditivos y programas quirúrgicos en caso de que su enfermedad requiera una cirugía.
Sin embargo, hay otros casos de pérdidas auditivas que se dan cuando los menores están en la escuela o el colegio.
“En niños de más edad, si la familia o los profesores dan la alarma de sospechar una pérdida de audición, se recomienda referir a un servicio de medicina desde donde se orientará para los estudios de audiología correspondientes”, especificó la especialista.
Sin embargo, también hay formas de prevenir la sordera en estas edades. Ramos pidió tomar en cuenta estos consejos:
- Cumplir con el esquema de vacunación completo desde su nacimiento.
- Dar tratamiento oportuno si hubiera otitis (infección o inflamación en el oído).
- Limitar el uso de audífonos a un máximo de dos horas al día.
- Regular el volumen de los dispositivos para evitar daños en la audición.
LEA MÁS: ¿Cómo prevenir la pérdida auditiva en los niños?
Tratamiento de la sordera
No todos los pacientes tienen la misma solución a su problema auditivo. Guevara indicó que existen varias opciones de tratamiento para la sordera. Primero están los audífonos, pero no todos los pacientes son candidatos a ellos.
Quienes no lo son tienen la opción quirúrgica, la colocación de aparatos de vibración que transmite sonido por medio del nervio, o bien el implante coclear. Este último se coloca únicamente en los hospitales México y Nacional de Niños.