La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) tiene, a partir de este momento, un plazo máximo de seis meses para ejecutar acciones encaminadas a resolver la fuga de médicos especialistas de sus hospitales, de acuerdo con un plan propuesto por el Ministerio de Salud.
A la CCSS se le encargó, entre otras cosas, realizar un estudio de capacidad máxima instalada en todos sus hospitales, incluyendo los que están fuera de la Gran Área Metropolitana (GAM). El objetivo es dar el mayor aprovechamiento a los espacios para la formación de médicos especialistas, que son alrededor de 300 cupos al año.
La Caja también debe revisar los Contratos de Retribución Social, firmados con los estudiantes de especialidades médicas (conocidos como médicos residentes), y que los obligan a trabajar tres años para la institución luego de terminados los estudios.
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El objetivo del Ministerio de Salud con esa revisión es valorar la posibilidad de modificar la garantía contractual para asegurar, según afirmó, el cumplimiento del tiempo de retribución de los especialistas de acuerdo con la realidad actual, así como la inversión pública realizada para su formación.
Una medida como la anterior, aseguró el Ministerio, tiene el propósito de retener el recurso humano especializado en los centros de salud públicos.
Las acciones forman parte de una propuesta que dio a conocer este jueves, la Auditoría General de Servicios de Salud, adscrita a ese ministerio. Es un paso dentro del proceso que se inició el 22 de febrero, cuando se conformó una comisión de alto nivel que analiza la fuga de médicos especialistas de la CCSS, y en el que también participan autoridades de esa institución y el Colegio de Médicos y Cirujanos.
El plan propuesto involucra a otras instituciones, pero especialmente a la CCSS, que es en donde se forman todos los médicos especialistas del país.
“La presente auditoría le da un marco objetivo al tema y potencializa la actividad rectora del Ministerio con el fin de asegurar a la población costarricense especialistas que brinden un servicio de salud oportuno acorde a las necesidades requeridas”, manifestó Alexei Carrillo Villegas, ministro interino de Salud.
Freno a crisis hospitalaria
Las recomendaciones emitidas por Salud contemplan incluir a las especialidades médicas en la Política Nacional de Recursos Humanos en Salud. Esto con el fin de normar, unificar, y estandarizar los procesos nacionales de formación de especialistas.
El plan también pretende convertir al Ministerio de Salud, como ente rector, en el coordinador de sesiones de trabajo con las instituciones públicas prestadoras de servicios de salud interesadas en la contratación de médicos especialistas.
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Lo anterior tiene como propósito crear la posibilidad de abrir plazas para la rotación de residentes mediante acuerdos que garanticen la igualdad en los procesos de admisión y formación del recurso humano.
La CCSS, además, deberá unificar la normativa relacionada con la formación de especialistas.
También será responsable de coordinar con las universidades que forman especialistas para que se revisen los procesos académicos y garanticen espacios de supervisión y apoyo técnico a los médicos residentes en aras de la calidad, eficiencia y eficacia del aprendizaje de los futuros especialistas, sostiene Salud.
Según datos de sindicatos médicos, en los últimos dos años han renunciado a la CCSS 208 especialistas. Salen, principalmente, a servicios privados y también al Hospital del Trauma, administrado por el Instituto Nacional de Seguros (INS).
Estas salidas se atribuyen, entre otras razones, a la pérdida de competitividad laboral en la Caja en materia de salarios y flexibilidad de jornadas laborales para médicos que también están interesados en trabajar en sus consultorios privados.
Profesionales consultados por La Nación, también mencionan entre las causas de estas salidas problemas internos de gestión en los hospitales públicos, que limitan las posibilidades de capacitación y generan climas organizacionales negativos.
La salida, sin embargo, ha generado verdaderas crisis en los hospitales de la CCSS.
En el Nacional de Niños, por ejemplo, programas como el cardiovascular pediátrico, se han visto afectados por la renuncia de especialistas en anestesiología pediátrica. Aunque ese programa sigue haciendo cirugías, estas sí se han visto impactadas por la salida de anestesiólogos.
Otros centros de salud, enfrentan presión por solicitudes de reducción de jornadas laborales cuyo impacto en los servicios, hasta ahora, la CCSS no ha logrado cuantificar, según reconoció el gerente médico, Rándall Álvarez Juárez.
Información ajustada el viernes 10 de marzo, a las 9:20 a.m., aclarando que el programa cardiovascular pediátrico del Hospital Nacional de Niños está activo