Un informe de la Auditoría del Ministerio de Salud identificó “cuellos de botella” que dificultan el acceso de los médicos generales a los estudios de posgrado para convertirse en especialistas, en áreas como Anestesia, Ortopedia, Cirugía o Ginecología.
Según el auditor general del Ministerio de Salud, Eduardo Zamora Méndez, se revisaron los procesos en las diferentes universidades que tienen convenio con la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) para optar por alguna de las plazas para la residencia o estudios de especialidad en los hospitales públicos.
El informe fue presentado este miércoles 1.° de marzo como parte de la segunda reunión que sostuvo la comisión de alto nivel que revisa la salida a centros privados de médicos especialistas de la Caja, situación que ha generado una crisis en los servicios de los hospitales públicos. Se analizaron algunos puntos relacionados con la formación en especialidades médicas.
Esa comisión de alto nivel fue conformada el 22 de febrero. La integran autoridades de la CCSS, el Colegio de Médicos y el Ministerio de Salud.
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La próxima reunión será en Salud, dentro de 15 días. Es posible que convoquen a otras partes interesadas en el tema, como sindicatos y universidades.
La Auditoría General de Servicios de Salud, explicó Zamora, revisó el proceso de ingreso de médicos generales al programa de especialidades y, según dijo, detectaron diferencias entre universidades.
Lo que se persigue, agregó, es hacer un proceso unificado y procurar una ocupación máxima de las plazas que la CCSS destina para la formación de especialistas.
Ese estudio también revisó las necesidades no solo para entidades públicas, si no también para todo el territorio nacional, en entes públicos como privados.
Al mismo tiempo, la auditoría analizó las fases que siguen cuando los médicos ya son especialistas, como el servicio social y el contrato de retribución.
“En ese informe se vieron los detalles para el proceso de incorporación al Colegio de Médicos. Entre las recomendaciones está formar una comisión interinstitucional para atender esos hallazgos. Hoy fue la primera sesión; en 15 días, continuaremos con las sesiones para revisar los procesos de formación”, dijo Zamora.
El Ministerio de Salud instruyó conformar una comisión con más actores sociales para determinar la necesidad país. A partir de la próxima semana, adelantó Zamora, se invitará a representantes de instituciones públicas y privadas.
Asimismo, el auditor de Salud informó de que hay un nuevo estudio del Centro de Desarrollo Estratégico e Información en Salud y Seguridad Social (Cendeisss), en el que se establecen las necesidades de la CCSS hasta el 2030.
En dos semanas, agregó, se conocerá la necesidad del país de especialistas y en el caso de la CCSS, la capacidad instalada para la formación.
Unificación de datos
En los últimos dos años, al menos 208 médicos especialistas han renunciado a la CCSS. Los datos resultan de un estudio del Sindicato Nacional de Médicos Especialistas (Siname), acuerpado por la Unión Médica Nacional.
El gerente médico de la CCSS, Rándall Álvarez Juárez, manifestó que ese es un dato de los muchos que todavía está afinando la institución. Aclaró que los movimientos de personal son dinámicos.
“Ha habido que realizar un análisis, caso por caso, para identificar la causa de la salida de esos profesionales. Unos se han trasladado a otras instituciones del sector público, otros se jubilan, y algunos se han ido por enfermedad.
“Para dar el dato certero, estamos construyendo toda la información porque la fotografía que tengamos hoy puede que varíe la próxima semana”, expresó Álvarez.
Lo que la CCSS está documentando son las “horas hombre” que la institución ha perdido para consolidar la cantidad de tiempos completos que se han perdido por la salida de especialistas, agregó Álvarez.El gerente médico promete ese dato para dentro de dos semanas.
Entre las especialidades médicas con mayor movilidad registradas por la CCSS están Dermatología y Cirugía Reconstructiva.
“Hemos identificado un incremento diferente al habitual. De igual forma, hay muchos profesionales que están pidiendo disminución de la jornada lo cual incide en la capacidad instalada que tenemos para dar los servicios”, explicó el gerente.
Para Álvarez, la situación no tiene como origen la falta de plazas pues no necesariamente hay un faltante. De hecho, dijo, hay plazas o cupos que no se llenan por falta de demanda.
Cada año, alrededor de 200 médicos generales ingresan a estudiar una especialidad, aunque este 2023 se esperan 300. Se gradúan entre 150 y 180 nuevos especialistas.
La CCSS desconoce el costo de la formación de un especialista, otro dato que está como tarea encontrar como parte del trabajo de esta comisión. En el 2017, la Gerencia Médica lo calculó en ¢58 milllones como promedio anual, por residente.
En el 2017, invirtió casi ¢50.000 millones en los 821 que estaban en formación ese año.
La capacidad instalada de la CCSS para la formación se compone de instalaciones, equipamiento y docentes disponibles por parte de las universidades. En dos semanas, se pondrá sobre la mesa el análisis sobre esa capacidad instalada con esos tres elementos, en todo el país, afirmó Álvarez.
Mario Alberto Quesada, presidente del Siname, confirmó a La Nación la preocupación que existe ante un problema que, según dijo, no es nuevo. Espera que este y otros sindicatos sean convocados pronto por la comisión de alto nivel para analizar la nueva crisis que genera en los servicios públicos este éxodo hacia los servicios privados.
La renuncia de especialistas a la CCSS se debe a la falta de flexibilidad para reducir jornadas laborales, pérdida de competitividad salarial de la entidad con respecto a servicios privados, limitación para capacitaciones y a problemas de clima organizacional en hospitales, entre otras razones esbozadas por los mismos médicos.
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La salida ha provocado una “verdadera emergencia” en hospitales como el Nacional de Niños, donde se han efectado programas quirúrgicos como el cardiovascular pediátrico. Ese programa sigue activo y operando niños, pero el número de cirugías se ha visto perjudicado por la renuncia de médicos anestesiólogos en los últimos 24 meses.
Los hospitales de la CCSS también enfrentan un serio faltante de psiquiatras y radiólogos por renuncias, a las que se suman las jubilaciones programadas de profesionales.
Información ajustada el viernes 10 de marzo, a las 9:36 a.m., aclarando que el Programa Cardiovascular Pediátrico del Hospital Nacional de Niños está activo