Especialistas del Hospital Nacional de Geriatría y Gerontología están a punto de iniciar un estudio clínico para identificar las razones de la longevidad de los guanacastecos centenarios.
El objetivo es efectuar pruebas de sangre, exámenes físicos, ultrasonidos y tomografías –entre otros procedimientos– a un grupo de al menos 40 centenarios de esa provincia, confirmó el director general de dicho centro de salud, Fernando Morales Martínez.
Esos datos también se contrastarán con los de una cantidad similar de ancianos de la Gran Área Metropolitana, explicó el médico.
En Guanacaste, las comunidades de Carrillo, Santa Cruz, Nicoya, Hojancha y Nandayure se ubican en una de las llamadas “ zonas azules” del planeta.
En estos sitios, muchas personas sobrepasan los cien años y lo hacen en una buena condición de salud y con alta calidad de vida.
Las otras zonas azules del planeta son Okinawa (Japón), Cerdeña (Italia), Icaria (Grecia) y Loma Linda (Estados Unidos).
Según dijo Morales, los datos que surjan permitirán comparar la condición física de los centenarios nicoyanos con la de los habitantes de otras zonas azules del mundo.
El estudio tomará entre año y medio y dos años para arrojar sus primeras conclusiones.
En este momento, están en la fase de aprobación del Comité de Bioética, y en busca de financiamiento, pues se calcula que el costo de la investigación ronda los $100.000.
En principio, la Fundación Costarricense para la Investigación y Docencia en Geriatría y Gerontología (Fundogen) aportará los recursos para la realización del estudio.
Bases. La primera gira a Guanacaste estaría haciéndose en unos tres meses, anunció Fernando Morales.
“Hay que traerlos a San José para efectuarles los estudios. Allá, en Guanacaste, se les hará el examen físico, y todo el estudio de la historia clínica geriátrica; pero las otras pruebas serán en San José: son pruebas de corazón, respiratorias y de marcha, y tomografías”, puntualizó Morales.
De acuerdo con el médico, se indagará la capacidad respiratoria, el estado del cerebro y por qué no presentan síntomas de demencia a esas edades.
“Ninguno tiene alzhéimer. Ahí la gente no toma vino rosé , tinto ni blanco... Es gente pobre y también longeva”, añadió el geriatra.
“Creo que el país les debe mucho a estos centenarios. Lo menos que podemos hacer es ofrecerles un buen chequeo”, dijo.
Uno de los últimos estudios sobre estos casos lo realizó el demógrafo Luis Rosero Bixby. Él encontró que los guanacastecos de aquellas zonas tienen porciones más largas de ADN en células sanguíneas, que el resto de los costarricenses de su edad.
Hace poco, el Laboratorio Nacional de Aguas halló alta presencia de minerales en el agua de zonas de Guanacaste, lo cual podría asociarse a la longevidad.