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Casi un mes después de que la covid-19 golpeara al Hospital Nacional de Geriatría con dos brotes seguidos que afectaron a pacientes internados y a funcionarios, este centro especializado solo reporta casos aislados.
La información la confirmó la directora médica, Milena Bolaños, quien aseguró que el Geriátrico superó ese primer golpe.
“Nosotros ya superamos el tema del brote que tuvimos. En total, se tuvieron que aislar 105 funcionarios de los cuales ya la mitad está de vuelta. Se tuvieron en total 44 funcionarios positivos.
“De los pacientes positivos que se llegaron a contabilizar 21. Tres fallecieron en nuestro centro. Los demás fueron trasladados al Ceaco (Centro Especializado para la Atención de covid-19, en La Uruca)”, comentó la funcionaria.
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La primera embestida de covid-19 se registró a finales de julio cuando seis pacientes hospitalizados dieron positivo con la enfermedad, y otros 29 tuvieron que ser aislados de forma preventiva para su atención en un ala exclusiva.
El hospital nunca suspendió su funcionamiento. Únicamente, el laboratorio dejó de hacer exámenes por dos días pues uno de los brotes detectados se originó ahí.
“Sí seguimos con aparición de funcionarios positivos con otro tipo de nexos epidemiológicos. Sí seguimos teniendo pacientes positivos, pero vienen de la comunidad, se detectan en el triage (área de clasificación de casos), y se internan mientras se coordina su traslado al Ceaco, San Juan de Dios, o al Calderón.
“Brotes importantes en este momento no tenemos. Solo funcionarios que aisladamente han ido saliendo en departamentos como Enfermería, Nutrición o Laboratorio pero que no han causado el nivel de impacto del brote de hace un mes”, explicó Bolaños ante consulta de La Nación.
El Hospital Nacional de Geriatría es el único centro especializado en la atención de las enfermedades de las personas adultas mayores que hay en el país.
Es también el centro que ha permitido la formación de médicos especialistas en Geriatría y Gerontología, que ahora laboran en los hospitales de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) en la atención de estas personas.
El caso del Geriátrico es particularmente sensible debido a que toda la población que recibe para su atención, ya sea en consulta externa o en internamiento, es parte del grupo de riesgo con mayores posibilidades de sufrir complicaciones y morir debido a la covid-19.
Desde el inicio de la emergencia nacional, este hospital ha ejecutado medidas estrictas para mantener a personal y pacientes protegidos al máximo.
Fue de los primeros centros en aplicar la revisión de temperatura a cualquiera que ingresara a sus instalaciones, en realizar control de enfermos y citas por llamadas telefónicas, y en enviar medicamentos a domicilio. También, limitó y luego suspendió las visitas de pacientes internados.
En octubre de 2016, celebró 40 años de estar al servicio del país.
