Los adultos mayores residentes en hogares de ancianos así como los trabajadores de esos centros y el personal de salud tendrán prioridad para recibir la vacuna contra la covid-19, en la campaña programada para el 2021.
La información trascendió la mañana de este miércoles, en una actividad para la prensa, organizada por el Ministerio de Salud y la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
Hasta ahora, se desconocía el orden detallado de priorización para aplicar las dosis contra esa enfermedad, producida por el nuevo coronavirus.
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Roberto Arroba Tijerino, coordinador de la Comisión Nacional de Vacunación y Epidemiología (CNVE), del Ministerio de Salud, precisó información de la que se dio un adelanto hace unas semanas en relación con los grupos de riesgo.
Así las personas prioritarias son:
- Los adultos mayores en hogares de larga estancia por su riesgo aumentado de enfermar, tener complicaciones y morir, y el resto de adultos mayores.
- Las personas con factores de riesgo (enfermedades crónicas como hipertensión, diabetes, obesidad, entre otras, que elevan el riesgo de tener complicaciones y morir).
- El personal de primera respuesta: personal sanitario que está más expuesto al virus, con riesgo de enfermar y contagiar a personas vulnerables.
Según el análisis técnico de la Comisión Nacional de Vacunación, las personas que recibirán la vacuna se clasifican en:
- Trabajadores de centros de larga estancia para adultos mayores, conocidos como hogares de ancianos.
- Trabajadores de primera respuesta en la atención de la pandemia, entre ellos, los de centros de salud.
- Personas de 58 años o más, independientemente de si tienen factores de riesgo o no.
- Personas con factores de riesgo: hipertensos, cardiópatas, diabéticos, enfermos respiratorios crónicos, enfermedad renal crónica, obesidad grado III y mórbida, cáncer.
- Funcionarios del MEP.
- Centros penitenciarios.
- Servicio 911.
- Estudiantes de ciencias de la salud.
- Personas sin alguno de los factores de riesgo previamente descritos, pero con actividades laborales en las tienen que estar en contacto con otras personas, como empleadas domésticas.
Las personas de estos grupos que ya tuvieron covid-19 y se recuperaron también son candidatas a vacunación y se recomienda su aplicación. Sin embargo, deben haber pasado 90 días desde su recuperación para poder recibir la primera inyección.
Quienes no están asegurados sí pueden ser inoculados, dado que al tratarse de una situación de salud pública es prioritario que quienes necesitan la vacuna la obtengan, independientemente de su condición de aseguramiento.
“El interés que prima es la salud pública, evitar que las personas enfermen y se compliquen, No se les cobraría”, puntualizó Arroba.
En total, se vacunarán 3 millones de personas mayores de 18 años, con lo que se cubriría el 80% de la persona adulta y a la totalidad de las personas de riesgo.
La vacuna no es obligatoria, pero las autoridades sanitarias sí recomiendan su inoculación, como estrategia para inmunizar a la mayor cantidad de población posible y evitar saturaciones en los servicios de salud.
Logística de la aplicación
Leandra Abarca Gómez, coordinadora del Programa de Inmunizaciones de la Caja, informó de que la primera vacuna en ingresar será la de Pfizer y BioNTech, y esto implica más desafíos para su distribución.
Por sus características, esta vacuna debe ser almacenada a -70 grados Celsius, y puede permanecer a temperaturas normales de las otras vacunas (entre 2°C y 8° C) durante cinco días. Esto les da un marco de acción.
Cada área de salud o vacunatorio tendrá un centro de distribución con un congelador de ultrabaja temperatura.
Una vez que las dosis lleguen, serán distribuidas hacia donde están los ultracongeladores con ayuda de camiones especiales contratados a la empresa DHL.
Las semanas de vacunación se dividirán en dos: un día para entrega y distribución en los centros médicos, y cuatro para su aplicación.
Los lunes de cada semana cada área de salud llegará por las dosis según sus necesidades y la población que debe ser vacunada. Cada vacunatorio las almacenará en sus equipos normales, donde estarán entre 2° C y 8° C durante el resto de la semana.
Abarca explicó que, como las dosis se aplican cada 21 días, se harán cohortes o grupos de personas cada tres semanas, de manera que se aplicará la primera dosis durante tres semanas a diferentes personas, y durante las siguientes tres semanas se colocarán la segunda dosis.
“Necesitamos mucho la colaboración de las personas para que acudan cuando se les llame para así mantener la estrategia de la mejor forma”, expresó la médica.
En estos momentos, los especialistas que integran los equipos técnicos responsables de la parte operativa y logística de esta campaña, están dando a la prensa los detalles de lo que será la planificación de esa gran jornada.
Cuándo ya se tengan ambas vacunas (la de Pfizer y BioNTech y la de AstraZeneca), ¿cómo se sabrá a quién se le podrá cuál vacuna?
Abarca comentó que ambos tipos de vacunas tienen el mismo objetivo y funcionan igual para las poblaciones, por lo que la distribución depende más bien de la disponibilidad de dosis y la planificación que haga cada área de salud y cada vacunatorio.
“La idea es no tener los dos tipos de vacuna de forma concomitante en el mismo centro de salud para evitar errores en que no se ponga una primera dosis de vacuna y la segunda de otra, pero cada establecimiento va a ir a un ritmo diferente porque todos tienen características poblacionales diferentes”, expuso Abarca.
Tecnología ayudará a llevar registros
La CCSS cuenta con un sistema informático que le permitirá llevar el registro de las personas que debe vacunar, por qué razón (es decir, cuáles son sus factores de riesgo o la exposición al virus), el avance del proceso de inoculación, cuál vacuna se utilizó en cada persona y la fecha de las aplicaciones.
El Sistema Integrado de Vacunas tendrá un programa asociado al Expediente Electrónico Único en Salud (EDUS), en el que se llevarán los registros de las necesidades y los avances de cada área de salud en el proceso de inoculación.
“Esto nos permitirá, por ejemplo, que si una persona recibió su primera dosis en Guanacaste y, por alguna razón estaba en Limón en el momento de su segunda dosis, los de esta área de salud puedan buscar la información de la persona, ver cuál vacuna se le colocó (en el momento en el que ya se tenga más de un tipo de vacuna) y poder colocarle esa misma vacuna”, manifestó Elvis Delgado Delgado, de la coordinación de inmunizaciones de la CCSS.
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Nota del editor: Esta información fue modificada para excluir a los maestros de los primeros grupos a vacunar, luego de que el Ministerio de Salud y la CCSS aclararan los datos dados inicialmente.