Hugo Marín Piva, quien durante casi cinco años representó a la Caja Costarricense de Seguro Social en la Comisión Nacional de Vacunación y Epidemiología (CNVE), denunció una “visible alianza” del Gobierno con grupos antivacunas, así como presiones de la ministra de Salud, Joselyn Chacón, para que los miembros de ese órgano tomen decisiones sin “fundamentación técnica”.
Estas afirmaciones fueron incluidas en el informe de labores fechado el 11 de agosto, el cual entregó a jerarcas de la CCSS y a los miembros de la Comisión, luego de que por decisión de la misma CCSS quedara fuera de ese órgano adscrito al Ministerio de Salud.
En el documento, Marín Piva enlistó retos, desafíos y amenazas para la labor de la CNVE.
Mencionó, entre ellos, la “cercanía de conocidos grupos de antivacunas al Poder Ejecutivo, que trabajan en visible alianza con el presidente de la República (Rodrigo Chaves) y la ministra de Salud y posicionan mensajes de cuestionamientos infundados en la eficacia y seguridad de las vacunas, principalmente, contra la covid-19, pero va en contra de las vacunas en general”.
Como evidencia de ello, el profesional recordó que el miércoles 3 de agosto, durante una conferencia de prensa en Casa Presidencial, luego del Consejo de Gobierno, le dieron un “espacio privilegiado” a “un reconocido líder antivacunas”, el mismo que el 26 de enero de 2022, ingresó de forma violenta al Hospital San Vicente de Paúl, en Heredia, junto con otros individuos. Allí, forcejearon con personal de seguridad para tratar de sacar a niño de seis años con factores de riesgo y problemas respiratorios que sería vacunado contra la covid-19.
Por este hecho, el Ministerio Público mantiene abierta una investigación.
‘Presiones’ de la ministra
El médico cirujano y especialista en Evaluación Sanitaria también señaló a la ministra de Salud de presionar a los integrantes de la CNVE “para que tomen decisiones según la “línea del Poder Ejecutivo, pero sin aportar la información que permita la debida fundamentación técnica”. Asimismo, mostró preocupación por lo que considera “una creciente intensidad en el mensaje antivacunas en el país”.
Por ejemplo, según el documento, el 10 de mayo, en la primera sesión de la Comisión presidida por Chacón, el único punto en la agenda fue la “reconsideración” de la obligatoriedad de la vacunación contra la covid-19 para los empleados públicos.
“En esa sesión, la Dra. Chacón solicitó a la CNVE reconsiderar la obligatoriedad para el sector público, argumentando que ha venido teniendo un proceso de escucha ciudadana, donde le dicen que están molestos por esta medida”, relató.
No obstante, Marín Piva subrayó en su escrito que la jerarca de Salud “no presentó ningún documento técnico para respaldar sus afirmaciones”. El 26 de mayo, la CNVE ratificó la obligatoriedad de la vacunación para el sector público basados en “una revisión de la literatura científica” publicada; en dicha revisión no participó la jerarca.
La Nación corroboró las afirmaciones incluidas en el documento. “Ese es el informe que preparé respecto a mi gestión en la CNVE. Consta de 19 páginas y va dirigido a mi jefatura inmediata (Marjorie Obando, directora de Farmacoepidemiología) y al gerente médico de la CCSS (Randall Álvarez), con copia al presidente ejecutivo (Álvaro Ramos), al gerente general (Roberto Cervantes) y a los miembros de la CNVE”, dijo el galeno mediante un mensaje de texto.
Este lunes 29 de agosto se enviaron, por medio de correos electrónicos, consultas a la ministra de Salud y al gerente médico de la CCSS sobre este tema, pero no dieron respuesta al cierre de esta información.
Marín Piva fue recomendado, el 29 de julio anterior, por Marjorie Obando, directora de Farmacoepidemiología, para continuar como uno de los representantes de la CCSS en la Comisión (oficio GM-DFE-0319-2022). No obstante, el 8 de agosto, el gerente médico, Randall Álvarez Juárez, la llamó para pedirle una lista de postulantes, solicitud que fue acatada ese mismo día, sin que el nombre de Marín apareciera en la propuesta.
¿Por qué retiró la recomendación? Obando respondió que después del contacto telefónico con el gerente médico “interpretó que le estaban pidiendo otros postulantes”.
El profesional, de 44 años, llegó a la CNVE en noviembre de 2017, labora en la CCSS desde hace más de 15 años, es médico cirujano egresado de la Universidad de Costa Rica, tiene un máster en Salud Pública con énfasis en Epidemiología de la Universidad Santa Lucía y un máster en Evaluación Sanitaria de la Universidad Carlos III, en España. En la actualidad, es jefe del Área de Farmacoeconomía de la CCSS.
Su labor en la Comisión de Vacunación, como en el caso de todos los miembros, era ad honorem.
Cuestionamientos
Desde que Rodrigo Chaves Robles asumió la presidencia de la República, en mayo de 2022, surgieron choques con los integrantes de la Comisión Nacional de Vacunación y Epidemiología por la obligatoriedad de la vacuna y la compra de inoculaciones, los cuales desembocaron en el cambio de los representantes de la CCSS en ese órgano colegiado por supuestos nombramientos vencidos.
El mandatario dijo, el 3 de agosto, en conferencia de prensa, que dos miembros de la Comisión tenían los nombramientos vencidos, uno de ellos, supuestamente, Marín Piva. El mandatario aseguró al país que debido a esos vencimientos, los acuerdos tomados por la CNVE, como, por ejemplo, la obligatoriedad de la vacuna contra la covid-19, eran nulos.
No obstante, criterios emitidos por la Procuraduría General de la República (abogado del Estado) contradicen al gobernante.
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Según la Procuraduría, los acuerdos tomados por funcionarios “sin investidura o con una investidura inválida o ineficaz” no son nulos. En sus pronunciamientos, apoyados en jurisprudencia de la Sala Constitucional, explican el concepto de “funcionario de hecho”, contemplado en el artículo 115 de la Ley General de Administración Pública.
Este numeral lo define como “el servidor público regular, pero sin investidura o con una investidura inválida o ineficaz, aun fuera de situaciones de urgencia o de cambios ilegítimos de gobierno”.
Aquel miércoles que cuestionó las decisiones de la CNVE, el presidente también insinuó aparentes irregularidades en la compra de dosis contra esa enfermedad, pero no aportó un solo documento para sostener sus aseveraciones.
Luego, dijo que el Poder Ejecutivo iba a buscar “las personas idóneas” para ocupar ambos cargos en la Comisión de Vacunación para que “ahora sí, ojalá, puedan cumplir con los lineamientos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), y no las ocurrencias o las decisiones contrarias a esos parámetros”.
Al final de ese evento, se le dio el micrófono a Marvin Rojas Ramírez, un hombre de 33 años que se identifica como periodista, quien felicitó al Gobierno por sus decisiones.
Precisamente, Marín Piva mostró, en su informe de labores, molestia por darle ese “espacio privilegiado” a Rojas, quien públicamente ha llamado “perros sanitarios” a los funcionarios de salud.
Desde marzo de 2020, mes en que se dio el primer contagio de covid-19 en Costa Rica, Rojas acompaña a los negacionistas de la pandemia en manifestaciones públicas, las transmite por redes sociales y difunde noticias falsas sobre el coronavirus.
La Comisión Nacional de Vacunación y Epidemiología la integran ocho profesionales y la preside la ministra de Salud. Este organismo fue creado en la Ley Nacional de Vacunación, la número 8111, del 18 de julio del 2001. Está adscrita al Ministerio de Salud, pero es un órgano desconcentrado con personalidad jurídica instrumental, lo cual quiere decir que tiene independencia para la toma de sus decisiones técnicas.