Los diputados dejaron plantado al ministro de Salud, Daniel Salas, a quien convocaron la mañana de este miércoles a rendir cuentas sobre la campaña de vacunación contra la covid-19.
No obstante, la comparecencia no se pudo realizar por falta de quórum, ya que solo asistieron 35 de los 38 legisladores que se requieren, como mínimo, para que el plenario legislativo pueda sesionar.
La visita de Salas había sido aprobada por 44 congresistas el pasado 13 de mayo. La audiencia estaba prevista para iniciar a las 9:15 a. m.
El jerarca volverá a ser convocado el próximo lunes 31 de mayo, a las 9:15 a. m., confirmó la jefa de fracción del Partido Liberación Nacional (PLN), María José Corrales.
La Nación solicitó una reacción al ministro, por medio de su oficina de prensa, pero de momento no ha habido respuesta.
Con permiso y sin permiso
La oficina de prensa de la Presidencia Legislativa indicó que entre los 22 diputados que no acudieron este miércoles al plenario legislativo, ocho tenían permiso de ausentarse y catorce no lo tenían.
Quienes tenían autorización para faltar eran: Luis Fernando Chacón (PLN); Aracelly Salas, Rodolfo Peña y Erwen Masís, del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC); y el independiente Harllan Hoepelman.
También figuraban Welmer Ramos, del Partido Acción Ciudadana (PAC); Carlos Avendaño, del Partido Restauración Nacional (PRN); y Patricia Villegas, del Partido Integración Nacional (PIN).
Mientras, entre los que no tenían permiso estaban los liberacionistas Carlos Ricardo Benavides, Wagner Jiménez, Daniel Ulate y Gustavo Viales; así como el socialcristiano Pedro Muñoz.
Tampoco tenían autorización Nielsen Pérez, Paola Vega y Carolina Hidalgo (PAC); Melvin Núñez (PRN); Otto Roberto Vargas (Partido Republicano Social Cristiano); José María Villalta (Frente Amplio); y los independientes Dragos Dolanescu y Erick Rodríguez Steller.
Silvia Hernández, presidenta legislativa, calificó de “más que lamentable”, “penoso” y “vergonzoso” que no se realizara una sesión que estaba señalada con “muchísima anticipación”.
“Es más, fue uno de los temas (sobre los) que, posterior a mi reintegración por el aislamiento por el contagio de covid-19, hice una mesa de trabajo para abordar pensando en dar con anticipación una fecha”, señaló.
De los 22 diputados ausentes, el liberacionista Roberto Thompson y el oficialista Welmer Ramos, informaron a La Nación de que no asistieron porque tenían cita para ponerse la vacuna contra la covid-19.
“Yo no estuve en sesión por cita de vacunación de covid. Tengo permiso previo. Estoy en fila en la UCR (Universidad de Costa Rica, que tiene un centro de vacunación)”, informó Ramos.
En tanto,Thompson envió foto de su carné con la cita asignada.
Trascendió, además, que el diputado socialcristiano Rodolfo Peña continúa internado en el Hospital Enrique Baltodano, de Liberia, Guanacaste, recuperándose de la covid-19.
‘Esto fue boicoteado’
Por su parte, el diputado Walter Muñoz, del PIN, calificó lo sucedido esta mañana como ‘boicot’. Aseguró que hay intereses políticos para mantener en secreto el manejo que se ha hecho de la vacunación contra la covid.
Muñoz fue quien presentó la moción para que Daniel Salas se presentara en la Asamblea Legislativa a rendir cuentas. Lo hizo desde el 23 de marzo.
Según dijo, la moción es de trascendental importancia para el país, en momentos en que se registran 32 muertes por día en la última semana y estamos en el cuarto lugar en América Latina en incidencia de casos.
“La vacunación se ha llevado en secretismo y total hermetismo... El PAC ha aprovechado esto para darle un corte político electoral (a la vacunación) más que sanitario.
“No ha habido manera de que ellos logren incorporar ideas, opiniones y sugerencias de personas y grupos. Lo cual hace ver que están manejando esto, con ausencia hoy de diputados de Gobierno, que no se justifica.
“Se sabía que no aportarían los diputados, que si los hubieran aportado hubiéramos tenido el cuórum. Yo creo que esto fue boicoteado. Afortunadamente, la moción sigue vigente”, aseveró Muñoz.
Por su parte, María José Corrales, jefa de fracción del PLN, aseguró sentir “vergüenza” por lo ocurrido este miércoles en el plenario del Congreso.
“Quiero ofrecer disculpas a los costarricenses por lo sucedido, y al señor ministro, quien muy responsablemente estuvo aquí desde las 8:30 de la mañana esperando a que se iniciara la sesión”, manifestó.
La legisladora explicó que su fracción propuso convocar a Salas este viernes, a una sesión extraordinaria, pero que por mayoría se tomó la decisión de citarlo el lunes próximo.
En tanto, Eduardo Cruickshank Smith, jefe de fracción del PRN, calificó esta ausencia de “vergonzosa, inaceptable e irresponsable”.
“Salvo que tuvieran alguna excusa por una situación de emergencia o estuvieran previamente con permiso, que no estuvieran aquí en una interpelación tan importante para el país, como la del señor ministro, es inaceptable”, manifestó Cruickshank.
Lentitud y rezago
Los legisladores habían acordado dedicar toda la jornada de este 26 de mayo a escuchar al ministro, quien dispondría de 40 minutos para su exposición, y luego respondería las preguntas.
El propósito era escuchar sus explicaciones por el lento avance de la aplicación de las dosis contra el virus SARS-CoV-2, responsable de causar la covid-19, tal como lo había propuesto Wálter Muñoz, el 23 de marzo.
LEA MÁS: Diputados dedicarán un día entero para interpelar a Daniel Salas sobre vacunación
Para el próximo 31 de mayo, según Silvia Hernández, se mantendrá la misma distribución del tiempo asignado para las consultas de los diputados de las diferentes fracciones.
El PLN contará con 60 minutos para repartir entre sus 17 integrantes, mientras que el PAC y el PUSC tendrían 38 minutos cada bancada.
A Restauración se le darían 30 minutos; al PIN, 12; al Republicano Social Cristiano,10; al igual que al Frente Amplio.
Por su parte, los 10 independientes (seis del bloque Nueva República y cuatro libres), tendrían 20 minutos para repartirse entre ellos.
La campaña de vacunación se inició el 24 de diciembre y, desde entonces, han surgido críticas por la desigualdad del proceso entre las diferentes áreas de salud.
Actualmente, la aplicación del fármaco se concentra en población de entre 18 y 58 años de edad, con factores de riesgo.
Sin embargo, todavía hay áreas de Salud que tienen personas pendientes del primer y segundo grupo (en total, son cinco grupos de vacunación).
De acuerdo con datos de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), hasta este 24 de mayo se habían colocado más de 1,4 millones de dosis.
Casi 600.000 personas tienen el esquema completo, pero la meta es alcanzar a 4 millones.
El 23 de diciembre del 2020, llegó el primer lote de vacunas contra la covid-19. Desde entonces, Costa Rica ha recibido 2.148.525 dosis.
Este martes, los hospitales públicos reportaron 1.428 personas con covid-19 internadas. De ellas, 516 estaban en una unidad de cuidado intensivo (UCI) y 179 registraban una condición crítica.
Desde que se declaró la emergencia nacional por la pandemia, el país acumula 306.899 casos confirmados de la enfermedad, y 3.877 fallecidos.
Noticia en desarrollo