La apertura de tiendas y restaurantes los fines de semana, a partir de este sábado, quedó en suspenso. Tampoco habrá cultos ni misas, ni hora y media más de disfrute de playa.

Todas las medidas consideradas en la tercera fase de reapertura económica quedó paralizada ante el pico de casos de covid-19 que se registró este viernes, cuando el país llegó al día número 105 (tres meses y 13 días) luego de detectarse el primer caso el 6 de marzo.

En tan solo 24 horas, entre el jueves y viernes, se reportaron 119 enfermos más. Es la cifra más alta en toda la emergencia sanitaria. La anterior había sido 86, el 10 de junio.

Con este incremento récord, el número de infectados en estos casi tres meses y medio llegó a 2.058 en 79 de los 82 cantones.

De esos, en 40 cantones hay casos activos, es decir, personas que aún portan el virus y están en capacidad de contagiar a otras.

Además de congelar la tercera de cuatro fases en el plan de reapertura, el ministro de Salud, Daniel Salas, ordenó suspender la final del campeonato de fútbol entre el Deportivo Saprissa y la Liga Deportiva Alajuelense.

Además, por este fin de semana, revirtió medidas al ampliar la restricción vehicular y prohibir el funcionamiento de todo tipo de establecimientos comerciales, excepto los de alimentos, medicamentos y servicios de salud.

El acceso a las playas, que a partir de este sábado sería de 5 a. m. a 9:30 p. m. quedó limitado de lunes a viernes de 5 a. m. a 8 a. m.

“Esto pone, en realidad, muy en riesgo que nos enrumbemos a una curva exponencial de casos”, dijo el ministro.

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“Con base en este dato de 119 casos en un solo día vamos a postergar la activación de la fase tres que anunciamos el jueves. Lo hacemos de manera preventiva”, agregó Salas.

De esta forma, avanzar con el plan de reactivación del comercio y servicios quedará sujeto al comportamiento de la curva de casos en los siguientes días.

“Estamos haciendo el mejor esfuerzo para contener todos estos casos que se están registrando a este viernes. Nuestra expectativa es que con las medidas que estamos tomando no vayamos a entrar en esa ruta exponencial, de la cual cuesta bastante volver a la normalidad. Una ruta exponencial nos llevaría al colapso de los servicios de salud y ya no reportaríamos 29 hospitalizados, sino mucho más y el colapso de los servicios de cuidados intensivos.

“Este número (119) no es como para decir ‘no pasa nada y seguimos con el cronograma de apertura’. Son todos los partidos de la final los que suspenden, no de forma definitiva. Estamos esperando que la situación se pueda controlar, que tengamos disminución de los casos”, dijo Salas.

El encuentro deportivo, dijo, se realizará, “hasta nuevo aviso”.

La noticia cayó como balde de agua fría para los comerciantes que se preparaban para la reapetura, sobre todo, en espera de aumento ventas por el Día del Padre, este domingo.

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La Cámara de Comercio calificó la decisión como un “castigo” que le da un fuerte golpe al sector.

La Conferencia Episcopal, que agrupa a los obispos del país, lamentó la decisión pero la respaldó para “proteger el don de la vida”.

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Hasta este viernes al mediodía, en el país había1.064 casos activos; 982 recuperados y 29 personas hospitalizadas, cinco de ellas en cuidado intensivo.

Alajuelita y Desamparados

Aunque la preocupación es para todo el país, la situación de los cantones de Alajuelita y Desamparados, en San José, pareciera más delicada.

Desde este viernes se convirtieron en los únicos cantones de la Gran Área Metropolitana (GAM) bajo alerta naranja, aplicada a lugares con alta circulación del virus SARS-CoV-2, que produce la covid-19.

Según explicó Daniel Salas, la aparición de enfermos dispersos en distintas zonas de Desamparados y los clústeres de Alajuelita obligaron a dar el giro.

De esta forma, aquí operarán restricciones de circulación y para los comercios desde este momento y hasta que las autoridades levanten la alerta.

La situación a la que se enfrentan despierta el temor, por primera vez, de que haya transmisión comunitaria. Eso ocurre cuando se pierde el nexo epidemiológico y ya no se sabe quién es el foco de contagio.

“No se requiere mucho para que se instaure (la transmisión comunitaria), estamos investigando, todavía no tenemos la evidencia absoluta.

“Ya nos preocupa, por ejemplo, Desamparados con casos que salen dispersos. Ese estatus puede cambiar para un cantón, de pasar a una transmisión comunitaria”, dijo.

En Desamparados se registraron 12 casos nuevos y tiene 29 con contagio activo.

En Alajuelita se identificaron dos clústeres o conglomerados de personas infectadas. Uno de ellos es el relacionado con una fiesta a la que asistieron 50 personas el fin de semana anterior, de las cuales hay más de 17 enfermas, y una de ellas hospitalizada.

Además, hay otros dos casos en investigación.

Para este viernes, también hubo 12 casos nuevos y tiene 49 activos.

‘No hagamos fiestas’

De nuevo, Salas hizo un llamado a evitar celebraciones del Día del Padre este domingo, sobre todo en consideración a que hay muchos de ellos con factores de riesgo y adultos mayores.

“No hagamos fiestas, no hagamos actividades. Si hay un regalito se lo enviamos, una videollamada, una llamada telefónica, es un Día del Padre en un año histórico.

“No me gusta tener que dar estas recomendaciones, tener que decir que no tenga un contacto cercano con una persona tan importante. Pero, el regalo que le podemos dar, es evitar que se infecte, que termine con una complicación, ese es el panorama que tenemos, 119 casos es la cifra más alta que hemos tenido en toda la pandemia”, añadió.

Por esta razón, insistió en mantener las medidas de higiene y distanciamiento. No tocarse la cara sin lavarse las manos, no saludar de mano, ni beso, ni abrazo.

“Si seguimos con esta disciplina podemos hacer que esto se revierta”, añadió.

Restricciones y alertas

Para este fin de semana, la restricción de tránsito vehicular es total a partir de las 10 a. m., salvo excepciones.

La multa, en caso de ser sorprendido por un policía, es de ¢110.000.

El Ministerio de Salud aclaró que desde las 10 a. m. de este sábado y hasta las 5 a. m. del lunes no deberá circular ningún vehículo.

Las excepciones serán para personas que deben comprar alimentos o medicamentos.

Para ir a supermercados, pulperías, abastecedores y farmacias, solo podrán circular el sábado los vehículos cuya placa termine en número impar (1,3,5,7,9) y el domingo, solo aquellos con placa terminada en par (0,2,4,6,8).

Los servicios de traslado de comida estarán permitidos, así como las personas que deban trasladarse por razones laborales con la respectiva carta que lo haga constar.

La medida entrará a regir a las 10 a. m. del sábado para que personas que están lejos de su residencia puedan regresar antes de esa hora.

“La restricción vehicular, en las últimas semanas, ha sido por placa y con mayor libertad. Se podía ir a otros sitios y no importaba si iba a otra actividad. Ahora, regresamos a la condición de Semana Santa donde teníamos la restricción y únicamente para requerimientos básicos, salud: farmacia, abastecerse de medicamentos, alimentos, solo los movimientos esenciales en la misma área geográfica.

“Los que sí están con reservación en hotel, les damos tiempo de que este sábado puedan regresar antes de las 10 a. m. y a partir de ahí comienza a regir placas pares e impares ”, dijo Alexánder Solís, presidente de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE).

También ratificó que la ampliación de la alerta naranja se da para todos los distritos de Alajuelita y Desamparados.

Indicó que las medidas de alerta naranja en los cantones de Alajuelita y Desamparados comenzaron a regir este viernes.

Todo comercio solo podrá operar de 5 a. m. a 5 p.m.

Tampoco pueden realizarse las ferias del agricultor.

Otras comunidades en alerta naranja son todos los distritos de Pococí y de Upala. Además, el distrito Peñas Blancas de San Ramón; Los Chiles en el cantón del mismo nombre; La Fortuna de San Carlos y Paquera de Puntarenas.