En 1 aumentó la cifra de contagios confirmados entre jueves y viernes, al tiempo que se descartaron 269 en esas mismas 24 horas.
Con ese mínimo crecimiento, los enfermos desde el 6 de marzo a la fecha llegaron a 687, de los cuales se reportan 216 recuperados, la mayor parte vecinos de Alajuela, donde hay 42 personas que ya no portan la enfermedad.
El día con mayor número de contagios registrados fue el 9 de abril cuando hubo 37 casos nuevos. En cambio, el otro día con una baja significativa fue el 20 de abril con solo dos.
De acuerdo con los datos suministrados por el ministro de Salud, Daniel Salas, de todos los afectados a lo largo de este tiempo, se trata de 328 mujeres y 359 hombres, de los cuales, 620 son costarricenses y 67 extranjeros.
Se registran 618 adultos, 35 adultos mayores y 34 menores de edad.
Para este viernes hay 12 personas internadas, 7 de ellas en cuidados intensivos, con edades entre 44 y 76 años.
Según Salud, el virus ha estado presente en 59 cantones del país, dato que no ha cambiado en la última semana.
Se han realizado 12.242 muestras y se han descartado 8.133 casos.
Salas anunció este viernes que se permitirá la apertura de ferreterías de lunes a domingo de 5 a. m. a 7 p. m. con la condición de que solo haya un 50% de ocupación.
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También se permitirá el funcionamiento de servicios de salud en unidades móviles.
"Se ha habilitado la autorización para servicios de salud en unidades móviles siempre que se cumpla lo establecido en el decreto, esa autorización tienen que pedirla, manifestó.
Esta decisión se comunica tres días antes de que se den a conocer los cambios en las medidas de restricción por combate a la pandemia de covid-19, enfermedad que produce el nuevo coronavirus.
Carlos Alvarado, presidente de la República, aseguró que se darán a conocer el lunes 27 de abril.
Medidas y primera ola
Salas reiteró que las medidas que se anunciarán el lunes se decidieron bajo la lógica de que dependerá del acatamiento de los protocolos estrictos, pues está completamente descartado que se vuelva a una vida sin cuidados contra infecciones respiratorias.
“No es la forma de hacer las cosas en este momento, uno iría de menor a mayor concentración, pero no voy a indicar esa lógica porque eso es el lunes”, manifestó.
Según dijo, la primera ola del virus en el país se ha dado con una transmisión muy controlada que se debe a las medidas y a una población que ha comprendido y se ha comportado a la altura, del distanciamiento físico y de higiene. Pasamos una primera etapa donde la cantidad de casos ha venido a menor cantidad", explicó Salas.
Sin embargo, como en otras ocasiones, recordó que la mayoría de la población aún no se ha expuesto al virus, por lo que podría darse un aumento súbito que puede complicar el sistema de salud.
“Indicar que pasó la primera ola, sería un asunto irresponsable y no realista”, dijo.
Para él, no es posible hablar de “aflojar” medidas, pues siempre van a ser medidas estrictas en higiene, aforo en los establecimiento y distanciamiento.
"En realidad, uno daría un espacio posiblemente de varias semanas entre el comportamiento de la curva en respuesta a las medidas que se van a ir permitiendo y dependiendo de esa respuesta, el parámetro siempre ha sido el crecimiento de casos y cómo se va distribuyendo en el tiempo.
Hay que ver cómo va la curva y tomando medidas que pueden ir hacia atrás más bien en ser más restrictivas o, eventualmente, ir poco a poco permitiendo otras, pero eso vamos a anunciarlo con toda claridad el lunes", aclaró.
De cara al fin de semana, Salas solicitó los que tengan que salir que se cuiden “tres veces más de lo que deberían”.
“Un descuido, una exposición sin cuidarse, puede significar un contagio y eventualmente una complicación”, advirtió.
Para este fin de semana, se restringe aún más la circulación de vehículos.
Aguas residuales
Ante la consulta sobre un estudio internacional que señala la posibilidad de detectar el virus mediante las heces, el ministro de Salud confirmó que han tenido conocimiento de esa investigación en países que han hecho muestreo en agua residuales.
Incluso, adelantó Salas, se comunicaron con el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA), para hacer las coordinaciones respectivas.
Esos análisis, dijo, les permitirían evaluar el comportamiento del virus en personas asintomáticas o que han tenido cuadros muy leves y que no han consultado.
Salas agregó que es una herramienta importante, pues se ha determinado que en personas que han eliminado la transmisión por vía respiratoria, el virus puede permanecer hasta por 14 días en heces.
La idea sería aprovechar este tipo de pruebas para hacer tamizajes poblacionales a nivel más amplio, explicó.
“Con respecto a la transmisión comunitaria, recordemos que la transmisión comunitaria significa que hay transmisión sostenida de persona a persona dentro del país a gran escala (...) recordemos que esa transmisión nos pone en riesgo inmediato de que podamos tener aumento en los números de casos graves que vayan a saturar el servicio de salud (...) así que esperar que la inmunidad de rebaño se de en una transmisión comunitaria en donde uno puede perder el control en la trazabilidad y la contención pone el riesgo el sistema de salud”, agregó.
Más pruebas, más equipos
El presidente de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), Román Macaya, anunció que amplían la capacidad de realizar pruebas y se descentraliza la realización de las mismas.
Según dijo, se han distribuido equipos y los kits para hacerlas en el Hospital San Carlos, en el Max Peralta de Cartago, San Vicente de Paúl, en Heredia, y en el Calderón Guardia.
Aquí se han entregado pruebas y kits que dan resultados en 45 minutos, que se suman a las pruebas que se hacían en el México, Hospital Nacional de Niños y San Juan de Dios.
“En este último se habilitó un equipo masivo en el San Juan de Dios que tiene la capacidad de procesar 1.344 pruebas por día, eso amplifica la capacidad de pruebas, en las próximas semanas se va a ir aumentado esta capacidad”, adelantó Macaya.
El jerarca también aseguró que tienen equipos de uso médico suficientes para tres meses, como guantes, batas, mascarillas, lentes y respiradores N95.
“Hoy podemos decir que la Caja tiene aprovisionamiento, dentro de lo que ya está comprado, suficiente material para los próximos tres meses”, confirmó el jerarca. Según agregó, el total de equipos son 2,3 millones.
Confirmó que se ha hecho una gran inversión en insumos y medicamentos, así como en la producción de ropa hospitalaria (332.000 piezas) por parte de la misma CCSS.
Y, adelantó, se contempla una inversión de $12,3 millones en piezas de protección personal.
El jerarca recordó que para la entrega de medicamentos a domicilio se puede activar mediante la receta electrónica en la página web de la institución.
"Esta receta electrónica es un apoyo a la línea 905MISALUD, pero en horas no hábiles, cuando el centro de llamadas no opera o si los operadores no están disponibles, se puede hacer mediante Internet. No obstante, solicitó tramitarlo por una sola vía.
Liquidez de la CCSS
Sobre la situación financiera de la CCSS y la solicitud que hizo al Gobierno del pago de ¢1,95 billones, Macaya salió a aclarar que la Caja “no está quebrada”, a pesar de ser la “principal institución que lidia con la pandemia”.
“La Caja ha invertido más en equipo duradero, de ventilación mecánica, respiradores, equipo de protección, de cuidados, transformamos un hospital completo. Por otro lado hay un bajonazo que se viene con el desempleo producto de la crisis económica, el 80% vienen de cuotas obrero patronales, entonces cuando baja el empleo hay una reducción sustancial en los ingresos”, explicó.
Aseguró, sin embargo, que la entidad tiene reserva, pero no se trata de dinero extra que está “ahí parqueado”, sino que tienen un destino, principalmente para un portafolio de inversión.
“Hay una gran cantidad de hospitales de infraestructura, estos fondos están ahí, invertidos, se pueden liquidar pero usarlos, no es gratis porque es dinero que está comprometido”, explicó.
Según dijo, a la fecha, no saben cuánto le va a costar a la Caja la crisis, pues no saben cuál será la magnitud.
“Estamos en números que van aumentando lentamente, pero puede haber un nuevo brote, una segunda ola, esto puede suceder a lo largo de este año o el año entrante, tenemos que estar reaccionando a la realidad que encontramos en el país, a ciencia cierta no sabemos cuánto le va a costar a la Caja en mayor gasto”, manifestó.
Sobre la reunión realizada la noche del miércoles con el equipo económico de Gobierno, Macaya ratificó lo dicho por el presidente Alvarado, en el sentido de que se acordó crear una mesa de trabajo para buscar vías de solución financieras a corto y largo plazo.
“Es obvio que hay una crisis que afecta a todo el país, no solo a la Caja, todos sabemos la importancia que tiene la Caja para enfrentar una crisis sanitaria. En esa mesa de trabajo es que vamos a buscar esas soluciones”, agregó.
Incluso, dijo, en la sesión de este jueves la Junta Directiva de la Caja escogió a las personas o al equipo que participará. Esa mesa comenzará a trabajar muy pronto.
Actualmente, la Caja tiene 1,3 millones en títulos, los cuales se invierten a la hora de ejecutarse. Macaya agregó que no consideran la venta de los títulos, de los cuales, el 60% vencen en menos de un año.
“Lo que queremos trabajar en la mesa es un mecanismo para que el Estado pueda ir pagando la deuda que tiene con la Caja, es una deuda que se ha acumulado a lo largo de décadas y tiene diferentes rubros, pero es un monto muy importante”, manifestó.
Según él, habrá que buscar una solución “importante y creativa” para recuperar esos dineros que permanecen en los libros contables, pero no se tienen.
“La Junta Directiva tiene el deber de gestionar ese cobro”, dijo Macaya.
Sobre todo, agregó, por el doble embate que recibe la institución por los gastos ante la crisis por la pandemia y la baja en ingresos.
Ayudas a mayores de 60 años
Hasta este momento, el Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) ha recibido 530.000 solicitudes de bono Proteger, y se han atendido 33.000, informó Juan Luis Bermúdez, ministro de Desarrollo Humano e Inclusión Social.
Bemúdez celebró que este viernes se aprobó en el Congreso, de manera definitiva, el presupuesto extraordinario de ¢150.000 millones para atender a otras 400.000 personas. Faltan la firma por parte del presidente y su publicación en La Gaceta para que sean canalizados los recursos.
Según dijo, existe un decreto, firmado la semana pasada, que establece los criterios sobre quiénes pueden acceder y quiénes quedan excluidos.
El jerarca hizo énfasis en más de 900.000 personas mayores de 60 años, a las que se ha considerado dar seguimiento.
“El trabajo que se hace entre las instituciones es lo que llamamos abordaje sociosanitario, implica que los servicios de salud se integran con servicios del resto de instituciones. En el caso de que estén solos y no tengan medios para garantizar sus necesidades básicas, se remiten al comité municipal de emergencias o al IMAS”, dijo el funcionario.
También se ofrecerán para estas personas servicios de salud, con equipos que se desplacen.