EscucharLa compensación económica tiene un peso importante pero no sería suficiente sin otras condiciones que, en los últimos años, han empezado a acaparar la atención de médicos especialistas, muchos de los cuales ya no consideran tan atractiva la estabilidad laboral de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
Seducidos por mejores condiciones de infraestructura, disponibilidad de insumos médicos, flexibilidad de jornadas laborales y oportunidades de capacitación, médicos especialistas han mostrado predilección por los ambientes laborales que ofrece el Hospital del Trauma, administrado por el Instituto Nacional de Seguros (INS). En el sector privado, consultorios, aseguradoras y cadenas de hospitales están más presentes hoy que hace unas décadas atrás en el horizonte laboral de estos profesionales.
Massimo Manzi, director ejecutivo de la Cámara Costarricense de la Salud, confirmó a La Nación que la salida de médicos especialistas ha sido un tema de conversación.
“Los profesionales en su gran mayoría no son contratados, sino que ejercen de manera liberal la Medicina. Terminan en más de un centro y abriendo su práctica en consultorios que pueden estar dentro o fuera de centros médicos. Lo que hemos podido ver es una distribución bastante uniforme a lo largo de los distintos centros”, manifestó Manzi.
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Entre las condiciones que ahora buscan los médicos especialistas en la práctica privada están mayor flexibilidad en horarios, ambientes agradables, motivación para nuevos proyectos y más tiempo para ver a sus pacientes, agregó el director ejecutivo de la Cámara.
También, dijo Manzi, la posibilidad de desarrollar actividades educativas o proyectos de investigación clínica. “Existe un interés de buscar alguna nueva forma de compensación que no sea solamente completar un horario, sino que esté enfocada en objetivos y metas”, destacó Manzi.
Se requieren modelos de contratación diferentes, más flexibles, añadió. “Como Cámara, consideramos que la aprobación del proyecto de ley de jornadas extraordinarias podría ser una herramienta que permita a los profesionales que están ahora en el sector privado volver a prestar servicios a la Caja. Por ejemplo, cumplir con un horario de 4 días en centros privados y los otros días dentro de hospitales de la institución”, dijo.
El director general de INS-Red de Servicios de Salud, Kenneth Rojas Calderón, confirmó que una de las cosas que más atraen a los profesionales es la posibilidad de ajustar los horarios y mayores oportunidades de completar o ampliar estudios.
En el 2022, INS-Red de Servicios de Salud abrió un programa de jornadas de medio tiempo, que los puso en la mirilla de médicos en especialidades como Anestesiología, Ortopedia o Fisiatría. Entre el 2021 y 2022, han contratado 18; principalmente, anestesiólogos (cuatro) y ortopedistas.
La modalidad en la que opera INS-Red de Servicios de Salud facilita su operación, explicó. Es una sociedad anónima que pertenece al INS. Clasifica, entonces, como una empresa pública estatal.
Actualmente, la red de servicios del INS tiene alrededor de 1.600 empleados, de los cuales 105 son médicos especialistas. Sus operaciones se financian con fondos provenientes del pago de pólizas de Riesgos del Trabajo (RT) y el Seguro Obligatorio de Automóviles (SOA).
CCSS administra formación médica
Tanto Kenneth Rojas, del INS, como Massimo Manzi, de la Cámara Costarricense de la Salud, recuerdan que la formación de todos los médicos que requiere el país está en manos de la Caja. Eso incluye la necesidad que tienen los servicios privados.
Lo anterior explica que el INS también tenga déficit de médicos especialistas en las áreas que demanda su red de servicios de salud. Rojas informó que, por ejemplo, solicitaron diez para hacer este año el servicio social; seis de ellos son ortopedistas.
La CCSS forma en sus hospitales a estos profesionales como parte de convenios de estudios de posgrado. Actualmente, mantiene convenios con cinco universidades, una de ellas pública (Universidad de Costa Rica).
“No cabe duda que el país requiere fortalecer sus esfuerzos para generar una política de recursos humanos en salud que permita proyectar las necesidades de profesionales que requiere el Sistema Nacional de Salud como un todo, incluyendo sector público y privado.
“La OCDE ha planteado algunas propuestas. Por ejemplo, la ampliación de las funciones para algunos de los profesionales (enfermería, farmacia y técnicos). También es importante ampliar la capacidad de formación de especialistas aprovechando los convenios, existentes y futuros, con instituciones académicas privadas, y ampliar la red de centros de salud (públicos y privados) donde formarlos”, recomendó Manzi.
Rojas confirmó que el tema de la formación de especialistas se ha discutido. De hecho, hay una comisión INS-CCSS en donde se plantean las necesidades del Instituto como parte de los planes de formación.
Según dijo Rojas, el INS no busca directamente al profesional en otras instituciones. Abre procesos de concurso que responden a las necesidades que tienen de atender a su población, afectada principalmente por accidentes de trabajo y de tránsito.
