Hace un par de semanas las autoridades de salud salieron de sus escritorios y llegaron a Casa Presidencial para hablarle a la población sobre la saturación hospitalaria en la que la covid-19 tenía al hospital.
Los números no eran agradables. Se habló de rechazos en traslado de pacientes por falta de espacio. Se habló de servicios de emergencias al 104%. Sin embargo, muchas veces los números se oyen distantes y no nos hacen sentir la magnitud de la situación que se vive.
En los últimos días me propuse hablar con quienes sí están metidos dentro de los hospitales y atienden covid-19 para que ellos me contaran esa historia de lo vivido. Una enfermera intensivista, un patólogo, un anestesiólogo y un ginecólogo de un hospital periférico nos hablan de lo que ven a diario, de lo que ha empeorado en las últimas semanas.
Estos cuatro profesionales viven escenarios muy diferentes de la pandemia, todos tienen necesidades distintas y tienen su propio punto de vista. El agotamiento, el ver cada vez más pacientes, el que cada vez estén más complicados (especialmente los no vacunados, según coinciden los cuatro) y el ver que aún queda tiempo de seguir haciéndole frente a la pandemia.
Acompáñenme a escucharlos.