Un brote de 15 personas positivas por malaria en la frontera con Nicaragua obligó a que este martes, autoridades de salud tanto nacionales como del país vecino tomaran medidas para contener la transmisión. Al parecer, el flujo migratorio favorece la movilidad de la enfermedad, por lo que mediante estrategias integradas por ambas naciones se busca detener la propagación.
La emergencia se dio en la comunidad fronteriza de La Trocha, luego de un barrido epidemiológico realizado en diversos puntos de la zona. La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) y el Ministerio de Salud confirmaron que, de los 15 casos detectados, ocho corresponden a personas costarricenses y siete a nicaragüenses.
Melvin Anchía Villalobos, epidemiólogo de la red integrada de prestación de servicios de salud Huetar Norte, explicó que el trabajo bilateral desarrollado entre los dos países favorece las estrategias de prevención y control de la malaria.
“Resulta un trabajo agotador porque hay que ir casa por casa y las condiciones climáticas y de acceso son difíciles, pero logramos hacer un trabajo responsable que facilita la toma de decisiones y la activación de protocolos para evitar más contagios”, explicó el médico.
La malaria es una enfermedad que puede ser mortal; es causada por parásitos que se transmiten al ser humano a través de la picadura de mosquitas Anopheles infectadas. Los síntomas más comunes que puede presentar un paciente son: dolor corporal generalizado, fiebre entre 39 a 40 grados centígrados, escalofríos, cambios de coloración de la piel de tono amarillento, pérdida de hambre, sudoración, dolor de cabeza, cansancio o fatiga, náuseas, vómito, diarrea y dolor abdominal.
Para diagnosticar la malaria es necesario hacer un examen de sangre, para observar al parásito de modo directo a través del microscopio.
La CCSS mantendrá vigilancia activa de manera conjunta con las autoridades sanitarias de Nicaragua y Costa Rica para la detección oportuna de la malaria e inicio de tratamiento.
“Estos esfuerzos son vitales porque permiten accionar inmediato y cortar esa cadena de la enfermedad entre personas. Los 15 pacientes diagnosticados con la enfermedad ya recibieron tratamiento, así como los contactos de los casos”, aseguró el epidemiólogo de la CCSS.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) es parte del equipo de trabajo que busca estrategias adicionales para fortalecer el trabajo binacional que iniciaron con la intervención del brote en el cordón fronterizo con Nicaragua.