Redacción
La Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS) y la Superintendencia de Pensiones (Supén), llegaron al acuerdo de suspender por tres meses el contrato con la firma Eduardo Melinsky.
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Las compañías estatales cuestionan la forma en que la CCSS calcula el aporte de sus utilidades al fondo de pensiones administrado por la entidad autónoma. Los recursos que se han transferido al régimen del IVM se utilizan, por mandato legal, para fortalecer el sistema. La Caja estima que más de 200.00 personas se verían beneficiadas. | JOSÉ CORDERO (Jose Cordero)
Esta decisión fue acordada por la comisión administrativa establecida en el contrato, integrada por Edgar Robles, superintendente de Pensiones y Jaime Barrantes, gerente de Pensiones de la CCSS.
La Caja contrató a dicha compañía para que realizara un estudio actuarial del régimen de pensiones de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) y eso incluye sus tres componentes principales: edad de retiro, número de cuotas y beneficios.
La suspensión será hasta el 24 de abril de 2015 y se adoptó en virtud de que en la cláusula vigésima primera del contrato se prevé que, para asegurar la calidad de los productos que debe entregar el contratista y asegurarse que estos satisfagan el objetivo propuesto.
El régimen de Invalidez Vejez y Muerte (IVM) de la CCSS cuenta con 1.450.000 cotizantes y tiene 217.345 pensionados.
El régimen de pensiones de la CCSS cuenta con una reserva que asciende aproximadamente a los ¢1.9 billones.