Minimizar el riesgo de exposición de los cruzrojistas a enfermedades muy contagiosas, como el covid-19, motivó al Instituto Tecnológico de Costa Rica (Tec) a diseñar una cápsula de aislamiento para pacientes.
Con asesoría de la Cruz Roja, expertos de la Escuela de Ciencia e Ingeniería de Materiales del Tec desarrollaron un prototipo de barrera protectora que será probado pronto.
LEA MÁS: Costa Rica intenta desarrollar su propia prueba para la detección de covid-19
Álvaro Montero, subgerente operativo del cuerpo de socorro, indicó que la iniciativa pretende dotar a las ambulancias de un medio para reducir el nivel de exposición entre enfermo, acompañante y socorrista.
Montero explicó que, si bien este tipo de barreras existen en el mercado, la cápsula desarrollada por el Tec prevé las particularidades de las unidades de la institución, cuyos espacios internos son muy reducidos.
La principal característica de la cápsula, indicó, es que puede ser llevada dentro de las ambulancias sin necesidad de que esté ensamblada en todo momento.
“Estos equipos son de más bajo costo y son más apropiados para nuestras necesidades. Una de sus particularidades es que se puede desarmar, guardar y tenerla en la ambulancia", aseveró.
La idea es que haya al menos un dispositivo de esos en cada cantón del país.
Teodolito Guillén, Ronald Brenes, Oscar Chaverri, José Luis León, Mario Leiva y Erick Sánchez son los encargados de desarrollar el proyecto en el Tec.
Guillén comentó que el diseño del dispositivo implicó un “gran reto”, debido a que además de proteger a quienes viajan en la ambulancia, debía ser muy fácil de manipular.
“Debe permitir un fácil montaje y desmontaje, debe ser transparente para tener al paciente a la vista y se debe ajustar a las diferentes posiciones que requiera el paciente para su atención", detalló.
Otro retó, agregó, es que el protector debía de ser de bajo costo para poderlos producir en masa.
El profesional subrayó que el equipo de trabajo está muy comprometido en el desarrollo de este sistema apoyando con la donación del tiempo, materiales y procesos de fabricación de componentes.
Para quedarse
Aunque el proyecto nació en medio de la emergencia sanitaria desembocada por el nuevo coronavirus, la cápsula no se utilizará solo en pacientes de covid-19.
El dispositivo utilizará en todos casos en los que la condición del enfermo ponga en riesgo la salud de cruzrojistas y otras personas que viajen en las ambulancias.
El dispositivo de aislamiento es el proyecto más reciente que se desarrolla en el país en tiempos de pandemia y con sello cien por ciento costarricense.
A finales de la semana pasada, la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) informó de que ante la demanda internacional de las pruebas de diagnóstico de covid-19, el Centro Nacional de Alta Tecnología (CeNAT-CONARE) intenta desarrollar métodos alternativos para la detección del virus en Costa Rica.
La Facultad de Ingeniería de la Universidad de Costa Rica (UCR) también desarrolló protectores faciales para personal médico de la Caja, y prototipos de respiradores artificiales más económicos y de rápida fabricación, en conjunto con profesionales del Tec.
Por su parte, científicos del Instituto Clodomiro Picado, de la UCR, trabajan en la búsqueda de un tratamiento para el covid-19 con el plasma de los pacientes recuperados por la enfermedad.