Aún están frescos los recuerdos de la pandemia provocada por la covid-19. El primer caso en Costa Rica se registró el 6 de marzo de 2020, ese hecho fue primero de una cadena de acontecimientos que le quitó la vida a miles de costarricenses, golpeó la salud de cientos de miles más, afectó gravemente la economía nacional y paralizó decenas de actividades.
Hasta diciembre de 2022, según un análisis de la Universidad Hispanoamericana, a partir de datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el nuevo coronavirus mató a 9.647 personas en el país, pero ese número no ha parado de crecer, pues según el Centro de Investigación Observatorio del Desarrollo de la Universidad de Costa Rica, en marzo de 2023 aún fallecían, en promedio, tres pacientes por día producto de los efectos del virus SARS-CoV-2, causante de la covid-19.
La situación no es exclusiva de Costa Rica, por eso la OMS impulsa un tratado internacional para prevención, preparación y respuesta ante las pandemias. Sin embargo, el instrumento, que aún está en construcción, provocó un choque entre Fabricio Alvarado, diputado y líder de Nueva República, y el mandatario Rodrigo Chaves Robles.
Según Alvarado, si Costa Rica apoya y firma el tratado entregará su soberanía a la OMS. “En el borrador que ha circulado se plantean modificaciones a los artículos 15 y 16 del Reglamento Sanitario Internacional, con los que pretenden que los criterios de la OMS, que hasta ahora son simples recomendaciones, pasen a ser de carácter vinculante”, dijo el legislador en el plenario.
“Si Costa Rica acepta formar parte de este pacto, estaríamos entregando el gobierno, la democracia, la soberanía y hasta la economía al presidente de la OMS”, agregó.
Las manifestaciones provocaron una reacción desde Casa Presidencial. El 22 de mayo, Chaves calificó de absurdas esas declaraciones. “Es verdaderamente ridículo lo que dicen. Absurdo y divorciado de la realidad, y lo que andan buscando es alguna luz, algún micrófono para que alguien les ponga atención”.
Luego, en su cuenta de Instagram, el legislador publicó un video en el que le respondió a Chaves, afirmó que su posición no responde a “fanatismo, ni ignorancia”.
Mary Munive, ministra de Salud y vicepresidenta de la República, también se pronunció al respecto.
“Ha habido mucha desinformación o malentendidos con respecto a lo que conlleva, tanto el acuerdo como las modificaciones en el Reglamento Sanitario Internacional. La soberanía nacional está asegurada, y las recomendaciones no son vinculantes”, declaró la jerarca.
Jonathan Acuña, diputado del Frente Amplio y uno de los más críticos del Poder Ejecutivo, afirmó que coincide con el presidente Chaves al expresar que son ridículas las posiciones de Nueva República.
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¿Qué dice?
En medio de esa discusión política, surgen dudas válidas: ¿Qué es el Tratado Internacional sobre la Prevención, Preparación y Respuesta ante las Pandemias? ¿Qué plantea esa iniciativa? ¿En qué estado está? ¿Es cierto que firmar ese instrumento sería perder la soberanía del país?
De acuerdo con la OMS, debido a las consecuencias de la pandemia ocasionada por la covid-19, los 194 países miembros de la organización iniciaron desde 2021, la negociación y redacción de un documento para “garantizar que las comunidades, los gobiernos y todos los sectores de la sociedad” estén mejor preparados ante una emergencia de ese tipo.
En su página web, la Organización señala que el corazón de la propuesta consiste en “garantizar” equidad en el acceso a herramientas que permitan prevenir y combatir una pandemia, como vacunas, equipos de protección personal, información y conocimientos especializados. También buscan promover el acceso a servicios médicos de calidad.
El acuerdo, del que ya existe un texto preliminar de tres capítulos y 37 artículos, está en construcción desde setiembre de 2021, cuando la Asamblea de la Salud —máximo órgano de la OMS— designó un equipo de negociación intergubernamental que representara a todas las regiones del mundo.
Desde entonces, el proceso ha involucrado conversaciones con autoridades de los Estados miembros de la OMS, consultas a los comités regionales de la OMS en 2022 y 2023, consultas a expertos internacionales y varias sesiones informativas.
Los resultados finales de ese proceso serán presentados a partir de este lunes 27 de mayo en la 77.ª Asamblea Mundial de la Salud, en Ginebra, Suiza.
Precisamente, una de las principales molestias expresadas por Alvarado es que Chaves no le ha contestado si el país votará a favor del acuerdo internacional.
¿Qué se lograría?
Aún están por definirse las acciones específicas que implementaría la OMS si se aprueba el Tratado Internacional sobre la Prevención, Preparación y Respuesta ante las Pandemias, pero la Organización afirma que consolidar el acuerdo permitiría “generar resiliencia frente a pandemias”, mejorar la “detección y respuesta” ante brotes y garantizar la equidad a vacunas, equipo de protección y otros.
No obstante, la existencia del Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco, firmado desde 2003, es un ejemplo del compromiso que representan los acuerdos de este tipo y cómo impulsan cambios para la promoción de la salud.
Por ejemplo, el artículo 11 de la propuesta del Tratado establece que para permitir “una producción suficiente, sostenible y geográficamente diversificada” de elementos relacionados con pandemias, cada firmante deberá promover y facilitar la “transferencia de tecnologías y conocimientos” para el beneficio, en especial, de los países en vías de desarrollo.
Además, el artículo 13 del instrumento plantea la creación de la Red Global de Cadena de Suministro y Logística, la cual tendría a cargo el monitoreo de las necesidades de los países en desarrollo frente a las pandemias para ofrecer alternativas.
Otro aspecto mencionado por ese artículo es que, en caso de presentarse una nueva pandemia, durante su desarrollo, los firmantes deberán “alentar” a los titulares de patentes relevantes a renunciar a ellas, en especial si se consiguieron a través de investigaciones financiadas con fondos públicos.
La OMS sostiene que el Tratado también permitiría ofrecer mayor financiamiento para prepararse y responder a una pandemia.
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OMS dice que no son vinculantes
Sobre las enmiendas al Reglamento Sanitario Internacional que, según Nueva República, serían vinculantes, la respuesta de la institución es que no.
“La OMS no estará facultada para imponer ninguna medida de salud, sean confinamientos o cualquier otro tipo de restricciones, a la población de ningún país”, dice el sitio web oficial.
El Reglamento Sanitario Internacional fue concebido en 2005 por los miembros de la OMS para “prevenir la propagación internacional de enfermedades”.