Por primera vez en 16 años de realizarse las campañas de vacunación contra la gripe en el país, la cobertura alcanzó una cifra récord de casi 900.000 personas protegidas en solo tres semanas de las nueve programadas para la jornada.
Este año, según la CCSS, el interés por la vacuna se acrecentó debido a la pandemia de covid-19 y eso ha provocado, incluso, que algunos Ebáis en Heredia, Alajuela, San Carlos y Limón reporten una reducción o agotamiento de las existencias.
De acuerdo con datos de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), hasta este viernes 22 de mayo, 879.729 personas se colocaron la dosis contra la influenza.
La institución dispuso de un total de 1,1 millones dosis de 0,5 ml destinadas a personas adultas con factores de riesgo. La cantidad de personas que ya recibió la vacuna representa casi un 80% de la población meta.
La protección contra el virus que causa la gripe se inició el 4 de mayo en todo el país, para quienes tienen alguna enfermedad de fondo que podría representar un riesgo de complicación si contrae influenza. Entre esa población están diabéticos, embarazadas, enfermos cardíacos y personas adultas mayores.
Todavía falta por medir la respuesta al llamado hecho por las autoridades de Salud para vacunar a la población con edades comprendidas entre los seis meses y menos de tres años, para quienes se destinaron 200.000 dosis de 0,25 ml. La vacunación de estos niños apenas se inició este 18 de mayo.
Xiomara Badilla Vargas, jefa de la subárea Vigilancia Epidemiológica de la CCSS, considera que la pandemia por covid-19 animó a protegerse de otras infecciones respiratorias a quienes antes no se vacunaban.
Badilla calificó de “atípica” la demanda alta de vacunas contra la influenza este año en comparación con anteriores, cuando era frecuente que quedara un remanente de vacunas al final de la jornada y eso obligaba a hacer un esfuerzo adicional para colocarlas.
La alta demanda generada en esta campaña motivó a la Comisión Nacional de Vacunación y Epidemiología a aumentar en 200.000 el número de dosis para la jornada del 2021.
De esta manera, la cantidad subiría de 1,3 millones a 1,5 millones de dosis. La adquisición de las vacunas contra la influenza, correspondiente a este año, representó una inversión de $6,1 millones para la CCSS. Estas compras se planifican con un año de anterioridad.
Cortar cadena de transmisión
Leandra Abarca Gómez, coordinadora de inmunizaciones de la Caja, considera que la respuesta de este año permitirá a la población alcanzar una inmunidad de rebaño o colectiva más rápido.
Esta circunstancia es positiva, agregó Abarca, porque significa que los vacunados protegen a los demás al cortar la transmisión del virus en la comunidad.
Abarca reconoció sentirse satisfecha “con la participación inesperadamente masiva de los grupos de riesgo”. En otros años, grupos como el de los cardiópatas apenas alcanzaban un 30% de cobertura casi dos meses después de iniciada la campaña.
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La CCSS planificó una campaña de vacunación más controlada este año debido a la emergencia nacional por la pandemia de covid-19. El objetivo era alejar a la población de riesgo de sitios con mayor riesgo de infección, y asegurar un aumento en la cobertura de vacunación.
Por eso, muchos Ebáis instalaron sus puestos de vacunación fuera de las instalaciones centrales. Ahí, se cumplen las medidas de distanciamiento ordenadas por el Ministerio de Salud para evitar la propagación de la covid-19.
En un inicio, se programó organizarla por orden alfabético, destinando días y horas según grupos de riesgo, pero la respuesta fue tan masiva al llamado que los puestos de vacunación tuvieron que abrir indistintamente de la edad o el orden alfabético por apellidos.
La vacunación de niños de seis meses a menos de tres años aún se organiza con mensajes de texto por celular, mensajes de voz a los teléfonos fijos y a los correos electrónicos de los padres de familia, donde se les informa el día, la hora y el lugar para que los lleven a vacunar.
Para las personas que no están forman parte de la población objetivo de estas campañas anuales, la recomendación es vacunarse por sus propios medios en farmacias o centros de salud privados. El costo de una dosis contra la gripe ronda los ¢10.000.
Según las autoridades de Salud, es importante estar protegido contra el virus de la influenza, que también causa complicaciones respiratorias severas y hasta la muerte.
En tiempos de pandemia, se busca reducir la demanda de servicios de salud por otras causas, pues la prioridad en estos momentos está enfocada en la atención de los casos confirmados de covid-19.
Hasta este viernes 22 de mayo, el Ministerio de Salud registraba 911 enfermos de covid-19 desde que se detectó el primer caso en el país, el 6 de marzo, y diez fallecimientos por esa causa.