Dos mensajes despectivos publicados en Twitter y haber subido fotografías de enfermos con comentarios peyorativos, le costaron a un estudiante de Medicina la apertura de un proceso legal en la CCSS, su expulsión de la práctica profesional y una investigación académica que lo podría alejar de las aulas.
El implicado es un interno –estudiante de último año– de la Universidad de las Ciencias Médicas (Ucimed), quien estando de guardia en el Hospital Nacional de Niños escribió en la red social su deseo de que un sunami cayera sobre el centro médico para que terminara su tiempo laboral.
En otro mensaje señaló que en las afueras de los consultorios había unas 30 personas que solo preguntaban “tonteras”.
Pero el hecho más grave son las fotografías que el estudiante, de apellidos Aguilar Muñoz y 23 años de edad, subió a Twitter.
En ellas se ve a pacientes con extremidades amputadas, hombres baleados tirados en el suelo de un hospital, cirugías en proceso y hasta dos radiografías del cráneo de una mujer que había recibido tres balazos.
Gilbert Alfaro, director jurídico de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), señaló que la entidad tomará “todas las acciones legales” contra el estudiante pues habría violado la intimidad y vida privada de los pacientes.
Según el funcionario, la Caja podría enfrentar demandas en los Tribunales de Justicia por las fotografías en sí y su divulgación.
La normativa de la institución prohíbe retratar a los pacientes dentro de los hospitales, al menos sin su consentimiento.
Tanto los mensajes como las gráficas fueron subidas por Aguilar a Twitter utilizando la cuenta @AguiCR.
Pero bajo otro perfil, el @AAM0063, el joven pidió disculpas y expresó que sus mensajes fueron por “pura broma y sarcasmo entre mucho estrés del trabajo”.
Minutos después, ambas cuentas fueron cerradas. Ayer se intentó contactar a Aguilar Muñoz, pero no fue posible. Tampoco contestaron en su casa de habitación.
Óscar Montero, decano de la Facultad de Medicina, comentó que Aguilar ya perdió desde ayer el bloque de Pediatría.
Cada interno universitario debe completar cinco bloques para poder graduarse. Aguilar estaba a cuatro meses de lograrlo.
El decano explicó que el tribunal académico determinará antes del viernes la sanción al estudiante. La pena más baja es la suspensión de la universidad por un plazo de seis meses; la más drástica sería la expulsión del centro de estudios.
El académico agregó que cada alumno de Medicina debe aprobar seis cursos relacionados con ética y humanística.
Mientras tanto, el director del Hospital de Niños, Rodolfo Hernández, quien además es profesor en la Ucimed, solicitó ayer al mediodía a ese centro la expulsión de Aguilar de programa de internado del hospital, lo cual se concretó antes del final de la tarde.
Su presidente, Alexis Castillo, sostuvo que el gremio no tiene potestad sancionatoria contra Aguilar pues este último todavía no es médico y no es un colegiado.
Sin embargo, dijo que apoyaba las acciones de la universidad y de la Caja. Calificó de “reprochable” la actitud del estudiante.