El campo de aterrizaje de Tamarindo en Guanacaste permanece cerrado por deterioro de la capa asfáltica, deficiencias en las zonas de estacionamientos de avionetas y falta de poda de los árboles cercanos a la pista.
Además, la Dirección General de Aviación Civil realizó observaciones sobre el ancho de la vía y defectos en los indicadores de dirección de viento.
Por estas razones, el aeródromo permanece cerrado desde el pasado 15 de mayo.
Los problemas mencionados fueron advertidos por Aviación Civil desde marzo de 2012. Sin embargo, Grupo Diriá, dueños de la pista, no atendieron las correcciones sugeridas por las autoridades.
Según datos de Grupo Diriá, el año anterior ese aeropuerto recibió a 20.000 turistas.
Álvaro Vargas, director de Aviación Civil, reconoció que hay presión de los empresarios turísticos locales para reabrir la pista.
“Hay presión, es un destino importante entre los vuelos locales de turistas. Hay presión de los operadores de servicios de taxi aéreo, ellos han tenido que remitir los pasajeros hasta Liberia y transportarlos por tierra hasta Tamarindo”, dijo Vargas.
“El turismo en Tamarindo se cayó completamente, se afectó a los hoteles y a los comercios” , lamentó Orvieto Morales. director comercial de Nature Air.
Esa compañía volaba hasta cuatro veces por día a Tamarindo antes del cierre.
“Es duro, yo tenía tres empleados en Tamarindo que tuve que despedir hasta que tenga nuevas noticias”, añadió Morales.
De acuerdo con Nature Air, en el 2013 trasladaron a ese destino, ubicado en el Pacífico norte a 13.000 viajeros.
En temporada alta, los boletos para viajar a Tamarindo oscilan entre $220 y $240 y en temporada baja cerca de $92, según Nature Air.
“Hay un mercado importante que llegaba vía aérea a Tamarindo (...) la afectación es importante, hay hoteles y restaurantes que lo están sintiendo”, comentó Luis Hidalgo, vicepresidente de la Cámara de Turismo de Guanacaste.
Además, algunos empresarios turísticos acusan falta de interés de Grupo Diriá para invertir en los arreglos de la pista.
“Hay falta de interés por parte de Grupo Diriá porque ya son tres meses de estar cerrado”, declaró Hubert Gysemans, empresario de Flamingo, Guanacaste.
La Cámara de Turismo de la provincia ofreció dinero para solucionar los daños, pero Grupo Diriá no ha aceptado la propuesta.
Condición. Manuel Rockbrand, representante de Grupo Diriá, afirmó que están interesados en invertir y reparar la pista solo si Aviación Civil declara el aeródromo como aeropuerto privado.
“Pedimos que Aviación Civil nos apruebe el uso privado para poder tener un comercio privado con las diferentes empresas que operan aquí”, declaró Rockbrand.
En la actualidad el sitio tiene la categoría de aeropuerto privado de uso público, lo cual implica regulación de Aviación Civil sobre las tarifas por alquiler de pista y recepción de turistas. También obliga al propietario a permitir acceso libre al lugar y controles policiales.
Esa solicitud está en estudio en Aviación Civil.
Grupo Diriá obtiene $1,5 por cada persona que pasa por su aeródromo, lo cual consideran insuficiente para el mantenimiento del lugar. Las reparaciones del aeropuerto costarían $210.000.
Aviación Civil dijo que valoran terrenos para nuevas pistas de aterrizaje en los sectores de Tempate, Hatillos, Conchal y Huacas.