El cúmulo de reclamos contra el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) creció este lunes debido a los persistentes problemas con el sistema de asignación de citas para realizar las pruebas teórica y práctica necesarias para obtener la licencia de conducir.
Esta vez fue la Contraloría General de la República (CGR) la que, en un informe de auditoría, detalló la diversidad de problemas en la plataforma a cargo del Consejo de Seguridad Vial (Cosevi). Su llamado de atención ocurre unos días después de que la Sala IV urgió a las autoridades a solucionar, de una vez por todas, las complicaciones para obtener una cita.
De acuerdo con el órgano contralor, toda la gestión de estas pruebas transcurre de forma desarticulada y es poco proactiva, al punto de que la oferta de citas es “considerablemente inferior a la demanda”. Así lo dijo en el informe DFOE-CIU-IF-00005-2021 divulgado este lunes.
Esto, agrega el documento, explica por qué en los últimos meses no se oferta ni el 50% de cupos requeridos para atender la demanda de interesados.
La Contraloría reclamó que ninguna promesa del MOPT y el Cosevi para atender los problemas se ha ejecutado, como por ejemplo, sus planes para la virtualización del curso teórico, la tercerización del servicio fuera del Ministerio, cursos en horario vespertino o, incluso, impartir la materia de educación vial en colegios. La CGR criticó que ninguna iniciativa pasa aún de las palabras.
El análisis confirmó también que el sistema de registro y autenticación actual de los solicitantes tampoco garantiza un registro único por persona, pues permite que dos o más usuarios den una misma cuenta de correo electrónico (donde reciben sus credenciales de acceso) al hacer la inscripción.
Situación riesgosa
De esta forma, no establece restricciones, como la cantidad y tipos de citas que una misma persona puede matricular. Tal situación abre portillo para que algunos usuarios consigan “un número considerable de citas y, a su vez, le ha permitido cancelar un gran número de ellas”.
“A modo de ejemplo, en el primer trimestre de este año, un solo usuario logró matricular 493 citas para prueba práctica, de las cuales canceló 393″, indica el informe.
En marzo de este año, la Dirección General de Educación Vial del MOPT confirmó que cuatro personas lograron reservar en una semana 700 espacios para citas, lo que, se sospechaba, era para poner los cupos a la venta. El hallazgo se dio luego de un colapso en la opción para cancelación de citas que quedó fuera de servicio de forma temporal durante ese mes.
Según indicó esa dependencia del MOPT, al monitorear el sistema, se verificó que un individuo obtuvo y canceló 329 veces su cita; con lo cual dejó bloqueados los espacios en el sistema de forma que ni él, ni otros, podían acceder a los cupos.
Sobre ese aspecto, la auditoría de la CGR explicó que ese problema agrava todo, precisamente, porque los cupos cancelados no reaparecen luego a disposición del público, sino que pueden ser asignados de forma discrecional a otras personas directamente por parte de Educación Vial.
“Esta situación se considera altamente riesgosa dado que la ausencia de controles básicos puede dar cabida a hechos anómalos y poco transparentes que afectan tanto el buen funcionamiento de los servicios, como su acceso por parte de los usuarios”, indica el informe.
A inicios de mes, la Sala Constitucional declaró con lugar un recurso de amparo presentado por un usuario de apellidos Rojas Rivera, quien resultó afectado por la imposibilidad de conseguir un cupo.
En el fallo, la la Sala ordenó al MOPT tomar medidas para que el sistema de citas funcionara de manera “eficaz y eficiente” la próxima vez que se habiliten espacios para realizar estas evaluaciones e instruye al ministro de Obras Públicas y Transportes, Rodolfo Méndez Mata, y al director de Educación Vial, a que intervengan para honrar las disposiciones de la resolución en este caso.
El ministro aseguró que se atendería la orden. Según dijo, “hay una solución técnica en camino” aunque no detalló cuál es.
Las dificultades de los usuarios al obtener citas para pruebas teóricas y prácticas han sido constantes por años e incluso agravadas durante el periodo de pandemia, porque esta obligó reducir los aforos para la implementación de los cursos y pruebas y a un recorte del personal a cargo de las evaluaciones.