Las condiciones del clima, que han provocado una fuerte disminución en las lluvias, han obligado al Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) a importar electricidad de otros países de Centroamérica, pero a un precio más alto debido a que también es generada por plantas que operan con búnker, diésel y otros combustibles contaminantes.
El efecto de estas compras será percibido por los hogares, comercios e industrias en las facturas de electricidad durante el segundo semestre de este año, cuando estos gastos se trasladen a las tarifas.
Para tener una idea del crecimiento en el gasto que ha hecho el ICE solo basta una comparación. De enero a junio de 2022, pagó $6,2 millones por la importación de 29.943 megavatios (MWh).
Pero, de enero al 11 de junio del 2023, pagó $39,3 millones (¢21.615 millones) por 238.978 MWh. Esas compras de energía se dan a través del Mercado Eléctrico Regional (MER), el cual, consiste en una red eléctrica de 1.800 km que va desde Panamá hasta Guatemala. A través de ella, se dan las transacciones de energía.
Esos $39,3 millones comprados en lo que va del año, y los 238.978 MWh, son datos que registra el Centro Nacional de Control de Electricidad (Cence) y el precio promedio diario de venta al país en el MER que divulga la página del Ente Operador Regional (EOR). Esta última entidad tiene sede en San Salvador y supervisa y coordina la red eléctrica centroamericana.
LEA MÁS: ICE dispara quema de combustible para suplir demanda de electricidad
Costa Rica aumentó sus compras en Centroamérica por la disminución en la generación de las plantas hidroeléctricas locales debido a la reducción de los caudales de los ríos que alimentan los embalses. La generación hidroeléctrica es la responsable de abastecer el 75% de la demanda nacional, informó este lunes la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep).
El problema, sin embargo, no solo afecta a Costa Rica, sino al resto de naciones que compran y venden energía en el Istmo, las cuales también tienen complicaciones para suplir la demanda interna por los primeros efectos del fenómeno El Niño, cuyo impacto ya se nota, pero será más fuerte en julio y agosto.
Esta situación ha encarecido el precio de la energía. El 1º. de enero, por ejemplo, un kilovatio-hora (kWh) en el MER costaba al ICE un promedio de $0,087 (¢48). Pero, el 11 de junio el precio subió a $0,349 (¢192). Un repunte de 120%.
Un MWh consta de 1.000 kWh, de manera que cada MWh en el MER pasó de costar $87 en enero (¢48.000) a $349 (¢192.000) la semana pasada.
A las importaciones deben agregarse $53,7 millones (¢29.535 millones) por compra de diésel y búnker, en estos seis meses, de enero a junio, para generación térmica del ICE en suelo tico.
Plantas térmicas a todo gas
La Aresep divulgó este lunes que, solo en el primer semestre del 2023, el ICE ha producido más energía térmica que toda la electricidad generada por esa vía en los últimos siete años (2017-2022).
De esta forma, los consumidores pagarán en el segundo semestre una factura de $93 millones (¢51.150 millones) entre generación térmica y compras a Centroamérica.
Este lunes, la Aresep anunció un aumento de 10,21% en las tarifas de luz del ICE el cual entrará a regir del 1.°de julio a setiembre por la aplicación de la metodología llamada Costo Variable de Generación (CVG), que trimestralmente reconoce al Instituto los gastos en combustibles.
A pesar de ser una fórmula que se aplica cada tres meses, funcionarios que dirigen el Instituto rechazaron el cálculo de Aresep y declararon que el incremento “es falso”. Ellos calculan el alza en 0,91%.
Aresep deberá fijar nuevas alzas que comenzarán a regir por tres meses a partir del 1.° de octubre, en las cuales se reconocerá al Instituto sus compras de energía y quema de combustibles correspondientes a mayo, junio y julio de este año.
Que pague el ICE
Carlos Montenegro, director ejecutivo de la Cámara de Industrias de Costa Rica, declaró que las alzas previstas por los gastos del ICE preocupan desde la perspectiva de los consumidores y empresas en el sector productivo.
El industrial recordó que las empresas exportadoras contabilizan gasto e ingreso en dólares. Sin embargó, resaltó que los exportadores han venido percibiendo menos ganancias por esas ventas al exterior afectados por el tipo de cambio del colón frente al dólar.
LEA MÁS: Recope confirma que se extenderá uso intensivo de diésel y búnker para electricidad
Según él, ahora sus costos se agravarán más con las alzas previstas debido a la generación térmica e importación de luz.
Por el contrario, dijo Montenegro, el ICE más bien ha mejorado su situación financiera por las condiciones del colón dado que la mayoría de su deuda y algunos gastos operativos están en dólares.
“La Aresep podría abrir de oficio un estudio y calcular los miles de millones de colones que el ICE se ha ahorrado por tipo de cambio y compensar estas alzas. Si el ICE está en tan buena situación financiera, como lo ha dicho en varios foros Marco Mora Acuña, su presidente ejecutivo, quizás esos ahorros podrían suavizar las tarifas”, dijo Montenegro.
El industrial agregó que para algunas empresas que hacen uso intensivo de electricidad en su producción, ese gasto centra 14% de sus costos operativos.
Según Montenegro, la Cámara acudirá tanto a la Aresep como al ICE para que se analicen medidas para atenuar el impacto “de este nuevo golpe que se llevarán los consumidores”.
LEA MÁS: Tarifas de luz suben 10% por fuerte generación térmica e importación de energía
Según lo difundió el ICE, el 2022 fue un gran año para sus finanzas.
Variaciones en el tipo de cambio y un repunte en sus ventas de electricidad y telecomunicaciones reportaron al Grupo ICE un excedente neto de ¢191.019 millones. El dato evidencia una fuerte recuperación luego de un 2021 complicado, cuando la entidad registró un déficit de -¢93.033 en el indicador por el efecto de la pandemia en la economía.
El repunte figura en los Estados Financieros Consolidados del 2022 que presentó ese conglomerado de empresas en abril.
En costos financieros (donde se refleja el peso de sus obligaciones por deuda), el Grupo pagó ¢240.135 millones el año anterior, lo cual representa 3,5% menos respecto al 2021 cuando fueron ¢248.898 millones (-¢8.763 millones).
Una primera razón del balance favorable del 2022 descansa en la caída que tuvo ese año el precio del dólar frente al colón (fluctuaciones cambiarias). Esto aportó al Grupo ICE ¢88.669 millones mientras que, en el 2021, más bien la devaluación del colón generó una pérdida de ¢61.840 millones, como se consigna en el balance financiero.