El 3 de setiembre, día en que se jugó el clásico del fútbol nacional entre la Liga Deportiva Alajuelense y el Deportivo Saprissa, 28 de las 40 entradas del palco del Instituto Nacional de Seguros (INS) fueron repartidas entre la Presidencia Ejecutiva, miembros de la Junta Directiva, gerentes, subgerentes y sus invitados personales.
Los boletos fueron entregados a las autoridades del INS aunque la normativa interna establece que deben usarse, de forma exclusiva, entre clientes, intermediarios y socios estratégicos para programas de lealtad o potenciar negocios, pues están incluidos en un acuerdo de patrocinio por ¢91,8 millones.
A cambio de ese dinero, proveniente de fondos públicos, Alajuelense da al INS vallas publicitarias en partidos y conferencias de prensa, así como 40 espacios en el palco VIP número 13, entre otros beneficios. Según documentos del INS entregados a solicitud de La Nación, los asientos tienen un costo mensual aproximado de ¢1,5 millones.
La asistencia de directivos, gerentes y directores de departamento con familares y amigos al palco financiado con dinero estatal no se limita al clásico. Fotografías publicadas en redes sociales y registros del INS demuestran que los funcionarios públicos se benefician, con frecuencia, de las entradas para partidos del campeonato nacional y competencias internacionales.
También lo hacen en el palco que, a cambio de un patrocinio por ¢156 millones, mantienen con el Deportivo Saprissa.
Por ejemplo, de las 576 entradas disponibles para socios, clientes e intermediarios, entre el 15 de enero y el 15 de setiembre de 2023, los directivos, gerentes, directores de departamento y sus invitados personales se dejaron 398, equivalentes al 69%. Para cada juego, el Deportivo Saprissa suministra al INS 36 tiquetes en el palco número 12, por un valor mensual estimado de ¢1 millón.
De las 398 espacios repartidos entre empleados y autoridades, 100 fueron dados a Mónica Araya, presidenta ejecutiva del INS, para sus invitados.
En el caso de Liga Deportiva Alajuelense, de los 600 tiquetes de palco entre el 21 de enero y el 16 de setiembre del presente año, 293 (48,8%) quedaron en manos de la jerarca, miembros de Junta Directiva y sus invitados personales. De ellos fueron otorgados 23 a Araya.
En redes sociales
En fotografías publicadas por directivos, directores de departamento o páginas de redes sociales dedicadas a captar imágenes en graderías, consta la asistencia a los palcos del INS. Ese es el caso de Juan Ignacio Mata Centeno, miembro de Junta Directiva, captado por Perfiles del Fútbol, sentado en el palco institucional en el estadio Alejandro Morera Soto, el 8 de octubre de 2022, para disfrutar de la semifinal entre Alajuelense y Saprissa.
También hay imágenes de Laura Mora Camacho y tres de sus familiares en el palco del Instituto en el estadio manudo.
Ambos directivos rechazaron dar una entrevista para responder cómo obtuvieron esas entradas, cuántas entradas han utilizado en los últimos meses y por qué asisten con amigos y familiares. Señalaron que solo contestarían por escrito.
La presidenta ejecutiva del INS no respondió las llamadas realizadas a su teléfono celular.
Incumplen reglas
Aunque el lineamiento del INS para uso de entradas a palcos exige que, a más tardar, un día después de cada partido se elabore una lista con los nombres y las identidades de los socios, clientes e intermediarios invitados, la entidad admite que esa información no existe.
Joselyn Alfaro, asesora de comunicación de la Gerencia General del INS, reconoció, este lunes 19 de setiembre, que solo se elabora una tabla en la que se anotan la cantidad de entradas cedidas a la Presidencia, a las Gerencias y a los miembros de Junta Directiva.
En esos cuadros se observa que otros departamentos del INS como la Oficialía de Cumplimiento, Comercialización y Cliente Corporativo también reciben boletos, pero no se detalla si se asignan a funcionarios o clientes, socios e intermediarios, como disponen las reglas.
Roy Campos Badilla, oficial de Cumplimiento Corporativo del INS, admitió haber asistido, junto a dos amigos, a tres partidos del campeonato pasado. Agregó que no recuerda si obtuvo acceso en 2022. Tampoco recuerda quién le entregó los tiquetes y si se los ofrecieron de manera verbal o por escrito.
En una entrevista, Campos dijo que se trata de una “bonificación”, pero de acuerdo con los documentos dados por la aseguradora, no existe ese tipo de regalías para funcionarios.
Lorena Mussio, esposa de Luis Fernando Monge Salas, gerente general del INS, también aparece en las fotos publicadas en redes sociales en un palco del estadio Ricardo Saprissa. Este diario intentó conversar con ambos, pero no contestaron las llamadas a sus teléfonos celulares.
Por medio de la oficina de prensa, el INS reconoció que Mussio sí aparece en una fotografía, pero aseguraron que no se trata del palco de la entidad.
Otros gerentes también se han beneficiado de los asientos en palcos, uno de ellos es Eric Herrera Rodríguez, gerente de INS Servicios.
“Yo no tengo conocimiento de cómo se hace el proceso de asignación de entradas (a los palcos)”, comentó Herrera. Al preguntarle si había hecho uso del palco en Alajuela, primero contestó que no. Luego, al mostrarle una fotografía, manifestó: “Fui invitado en una única ocasión”.
Kattia Castro, jefa de Relaciones Corporativas del INS, unidad a cargo de los patrocinios y de gestionar entradas, admitió que no existe una normativa que habilite entregar entradas a la presidenta ejecutiva, directivos y mandos medios.
No obstante, afirmó que esas personas asisten como “anfitriones”. Con respecto a por qué directivos, gerentes y otros mandos medios llevan familiares y amigos a los palcos pagados con recursos públicos, dijo que “no se les da una entrada para que vayan solos, la gente va al estadio acompañada y se asignan de acuerdo a la disponibilidad”.
Castro rechazó que ella haga uso de las entradas. “Yo odio el fútbol, tengo cosas más interesantes qué hacer”, afirmó.