Quien fuera hasta este martes la gerenta general del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), Hazel Cepeda Hogdson, se pronunció sobre su destitución, divulgada a tempranas horas de este miércoles por las nuevas autoridades de la entidad.
Lo hizo con fuertes advertencias sobre el impacto que, considera, podrían tener las actuaciones del nuevo Consejo Directivo en la salud financiera del ICE pues, en su criterio, están “quebrantando la confianza de los bancos y los inversionistas, el cual es el riesgo más importante en la institución en este momento”.
Cepeda, licenciada en contaduría pública de 55 años, fue separada del cargo a una semana de que el Gobierno apartara a tres miembros del Consejo Directivo al argumentar que supuestamente su nombramiento fue ilegal. De inmediato, designó a tres directoras más quienes votaron por la salida de la gerenta. Entretanto, las tres directoras removidas presentaron un recurso de revocatoria que está en trámite.
“En próximas semanas, se utilizará la nueva mayoría temporal del Consejo Directivo del ICE para tomar determinaciones sin el conocimiento institucional y el fundamento técnico en materias estratégicas, tremendamente delicadas para el país y la empresa. La consigna es utilizar cualquier portillo para saltarse el diseño institucional establecido en nuestro marco jurídico que previene que una autoridad política, cualquiera que sea, tome decisiones en una institución autónoma, sin consensos, o sin la debida consideración de aspectos técnicos, financieros y jurídicos”, expresó Cepeda en una conferencia de prensa que hizo para referirse a su salida de la institución.
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La exfuncionaria sostuvo que el nombramiento de las tres nuevas integrantes del Consejo Directivo se realizó “de forma aparentemente anómala, irrespetando el reglamento, la ley y la jurisprudencia constitucional existente para la elección de miembros de este órgano colegiado”.
En su criterio, estas “decisiones apresuradas” que se están tomando ahora en el Consejo de Gobierno y el Consejo Directivo con respecto al ICE podrían repercutir en la validez de sus actos lo cual, afirma, podría ser grave porque equivaldría eventualmente a “severas consecuencias para la sostenibilidad de la Institución”.
“Desde su ingreso a la institución, el nuevo presidente ejecutivo (Marco Acuña Mora) ignoró mis solicitudes de reunión para explicarle, de forma amplia y detallada, el estado de las operaciones y negocios del ICE, una práctica sana e indispensable en una corporación de semejante tamaño. El nuevo jerarca se limitó a pedir una gran cantidad de informes de temas altamente complejos, con tiempos de respuestas de uno a tres días, para los cuales no hubo tampoco ningún espacio de diálogo y exposición. Esta dinámica se ha repetido con todos los gerentes de la institución”, recalcó.
Cepeda atribuyó su remoción y la eventual de otros altos cargos a persecución política. “Ahora, más que nunca, es imperativo seguir vigilando al ICE. Se advierten tiempos muy complejos”, dijo.
Riesgos
Hazel Cepeda aseveró que en el Instituto se inició un proceso “sorprendente e increíble”, según el cual las nuevas autoridades pretenden manejar los hilos de ese conglomerado empresarial sin mediar reuniones con el cuerpo de directivos en la entidad.
Según ella, la conformación momentánea del Consejo Directivo se seguiría utilizando para “eliminar los pesos y contrapesos democráticos que prevalecen a lo interno”.
Esto, reiteró, es el principal riesgo para la salud financiera del ICE pues provocará temor entre bancos con los cuales la entidad tiene deudas, entre calificadoras de riesgo e incluso los inversionistas.
Cepeda cree que su declaración provocará una campaña para desprestigiar su trabajo técnico de los últimos años, pero aseguró no temer si ocurre porque los datos e informes que la respaldan los remitirá en los próximos días a la Contraloría General de la República, como parte de un informe de rendición de cuentas público.
“Lo que sí puedo adelantar es que la destitución no es producto de malos resultados. Todo lo contrario”, insistió al mencionar que, en materia organizativa, sus decisiones permitieron consolidar una nueva estructura institucional de la cual se eliminaron 44 puestos de jefaturas que ya no tenían equipos a cargo.
Además, dijo, posibilitó que 172 profesionales asumieran espacios de dirección mediante concursos públicos donde participaron más de 1.200 personas, lo cual calificó de “histórico” porque nunca se había hecho en la empresa y permitió aumentar la cantidad de mujeres en espacios de jefatura. Los ahorros logrados se estiman en ¢3.000 millones, agregó.
En materia de transparencia, aseguró que dio curso a más de 87 indagaciones sobre presuntas irregularidades y negocios ruinosos de la empresa.
Lamentablemente mi remoción y la eventual salida de otros cargos de relevancia institucional se explican por un tema político. Como lo he demostrado aquí, el ICE navegaba, a pesar de las turbulencias, hacia un buen puerto gracias al trabajo profesional y sensato de los equipos comprometidos con la empresa. Ahora más que nunca, es imperativo seguir vigilando al ICE. Se advierten tiempos muy complejos”
— Hazel Cepeda sobre su destitución como gerenta general del Grupo ICE.
“Estas investigaciones se encuentran en diferentes etapas y han sustentado 26 medidas cautelares que se han abierto a funcionarios del ICE. Sobre este tema no puedo dar mayores detalles por tratarse de casos en proceso. Expresamente solicito al presidente ejecutivo que continúe con estas investigaciones”, aseguró.
No obstante, Cepeda admitió que hay una posibilidad altísima de que esas personas se reintegren a posiciones de toma de decisión y por eso le solicita al presidente que sigan las investigaciones.
“En este aspecto puntual no niego mi preocupación, dado que algunas personas investigadas han ocupado posiciones de dirección, ejecución y asesoría en decisiones importantes de la institución. Además, también inquieta que antes de nuestro ingreso varios de estos expedientes se encontraban en el fondo de una gaveta, sin avances sustanciales durante años”, indicó.
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Estudios de respaldo
La exfuncionaria enfatizó que desde la aprobación de la reorganización del ICE y luego de sus gerencias, todos los estudios que se presentaron al Consejo Directivo, y que fueron sujetos de aprobación, contaban con una estimación de costos. Ella dijo que, incluso, luego presentó los estudios finales de resultados, costos y beneficios y todo fue del conocimiento del nuevo jerarca.
Con esas palabras, Cepeda rechazó acusaciones emitidas este miércoles por el ICE en un comunicado, según el cual, la reorganización promovida por ella carecía de un estudio integral costo-beneficio.
En uno de los últimos resultados financieros del ICE, el conglomerado de empresas estatales mejoró las condiciones de su deuda en dólares gracias al pago de vencimiento de títulos valores y por trasladar parte de sus compromisos a colones con el objetivo de reducir su exposición a las variaciones del tipo de cambio.
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Asimismo, en el último trimestre del 2021 hubo una reducción de su deuda total que superaba los ¢3 billones (millones de millones) gracias a una reestructuración de sus obligaciones, principalmente en dólares estadounidenses.
Con dichas acciones, el endeudamiento cerró en ¢2.951.516 millones a diciembre pasado, lo cual representa una reducción de 5% respecto a los ¢3.101.585 millones que el ICE adeudaba a setiembre del mismo año, revela la información dada por la institución. El monto de esa deuda a diciembre comprende las obligaciones del ICE, la Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL) y Radiográfica Costarricense (Racsa).