El hundimiento ocurrido la semana pasada en la principal ruta del país pone en la mira otras estructuras de la red vial nacional.
La Municipalidad de Heredia alertó en 2008 del deterioro de las bases sobre las que se sustenta el puente bailey, ubicado en la ruta nacional 106, que conecta las comunidades de La Aurora y el Barreal de este cantón.
De acuerdo con un informe en el que se apoyó la alcaldía para hacer esta previsión, la preocupación se fundamenta en la crecida del caudal y la erosión en las márgenes de la quebrada La Guaria –distrito de Ulloa–, que fluye bajo ese puente.
El alcalde de Heredia, José Manuel Ulate, se dirigió por medio de una carta –emitida en junio de 2008– al presidente de entonces de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), Daniel Gallardo; al ex viceministro de Obras Públicas y Transportes, Pedro Castro, y al ex director ejecutivo del Consejo Nacional de Vialidad (Conavi), Alejandro Molina.
En el escrito se les requirió a las autoridades competentes una “intervención inmediata”.
Con ello, Ulate se refirió a la necesidad de limpiar la quebrada de árboles y cañas, que provocaban el atascamiento del agua, y por ende, el desgaste de las paredes sobre las que se sustentan los pilares del puente.
Precisamente ayer La Nación informó de que en 2008 un particular alertó al Concejo Municipal de Heredia sobre la posibilidad de que colapsara la alcantarilla en la autopista General Cañas, en Belén de Heredia.
El municipio también alertó a las autoridades viales sobre el aumento del cauce de la quebrada de La Guaria y las posibles consecuencias en la autopista.
Ayer, el asesor hidrológico de la CNE, Rafael Oreamuno, aseguró que el primer problema por tener en cuenta es la falta de planificación del desarrollo urbanístico e industrial, que es lo que aumenta el caudal de la quebrada.
“Aquí hay que decir que la Municipalidad no tomó esas previsiones”, agregó Oreamuno.
En espera. El puente de la ruta 106, también conocido como el de “la pepsi” se colocó de manera provisional, luego de que un hundimiento en el 2008, acabó con parte de la calzada, por un problema similar al acontecido el martes trasanterior en la autopista General Cañas.
La Dirección Ejecutiva del Conavi respondió hasta en marzo de este año a la alerta emitida por la Municipalidad de Heredia.
En el documento, la institución informó a Ulate del “inicio de contratación para el Proyecto de la Ruta Nacional 106”. Sin embargo, hasta ayer, según el alcalde, no se había hecho ningún concurso público para la adjudicación del proyecto.
Desde el año 2007, la Municipalidad de Heredia obliga a que las nuevas construcciones urbanísticas o industriales cuenten con un permiso de desfogue pluvial. Es decir, el urbanizador debe incluir un plan de manejo de las aguas de lluvia, como, por ejemplo, un tanque de retención de líquido.
Con esto se pretende controlar el crecimiento del cauce en lugares como la quebrada La Guaria, a la que van a parar gran parte de las aguas pluviales del cantón.
Sin embargo, Ulate reconoció que las construcciones anteriores a esa fecha no cuentan con ningún plan paliativo de mitigación.