Con la disminución de la actividad del coloso, el regreso es seguro. El Parque Nacional Volcán Turrialba recibirá visitantes a partir de diciembre luego de ocho años de cierre.
Será este 4 de diciembre cuando reabra puertas y con ellas la esperanza de mejora para la economía local que alcanza a hoteles, restaurantes y otros negocios, informó Casa Presidencial este jueves en un comunicado.
Según el documento, se tomaron todas las medidas para que el acceso sea seguro y controlado, con el fin de evitar emergencias o incidentes el acontecido el fn de semana pasado, cuando una pareja cayó a un guindo cuando transitaba por una zona prohibida.
Además, fueron necesarios algunos ajustes. Por ejemplo, fue debió habilitar una ruta alterna mediante convenio entre el Consejo Nacional de Áreas de Conservación (Conac) y los propietarios de la Finca Montecalas.
La disposición se debe a que el camino principal al macizo, sobre la ruta nacional 417, es objeto de un proceso legal, ya que los propietarios de Hacienda La Central reclaman ese paso como de su propiedad.
Como no se tiene aún la resolución de los Tribunales de Justicia, la ruta alterna por finca Montecalas garantizará el acceso.
Asimismo, se hicieron arreglos para remediar daños que las erupciones causaron: se construyó el portón de ingreso y la casetilla para la atención de visitantes, además de reparaciones en los servicios sanitarios.
También hay mejoras en los barandales en la zona del mirador y en siete áreas de protección. Estos cubren el trayecto de ascenso desde la caseta de atención a visitantes hasta el mirador de cráteres y el sendero Chusquea.
La primera dama de la República e impulsora de la reapertura del Parque Nacional Volcán Turrialba, Claudia Dobles, visitó las comunidades aledañas al volcán donde resaltó el gran potencial turístico de la zona.
“Esta es una gran noticia. Esta zona está llena de atractivos turísticos y el Parque Nacional viene a ampliar y fortalecer la oferta, así que esperamos ver un crecimiento económico en las comunidades cercanas. Invito a la población costarricense a visitar Turrialba a partir del 4 de diciembre y a disfrutar nuevamente de esta experiencia”, afirmó Dobles.
Impacto
Durante el 2012, el Volcán Turrialba incrementó rápidamente su actividad, pasando de fumarolas a erupciones freáticas de intensidad moderada al punto de que las cenizas cayeron sobre techos y vehículos en San José e incluso pusieron en pausa operaciones aéreas.
Desde febrero de ese año, el Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori), la Red Sismológica Nacional (RSN) y la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) recomendaron el cierre total.
La ordenza incluyó un manejo mínimo dentro del perímetro de dos kilómetros alrededor del cráter activo mientras cuyas emanaciones iban deteriorando las instalaciones, principalmente por la caída de piedras, ceniza y lluvia ácida; esta última continúa en la periferia del volcán.
También alcanzaron las fincas vecinas de donde se sacaron animales y cultivos.
El humor del volcán también obligó a tomar medidas incluso en el Valle Central, hasta donde llegaba la ceniza, que incluyeron uso de mascarillas, suspensión de clases en escuelas y hasta el cierre temporal del aeropuerto Juan Santamaría, con el trastorno a los vuelos.
Hacia el 2016, la actividad volcánica disminuyó y luego en el 2018, las autoridades iniciaron coordinaciones con la CNE para una posible reapertura.
Antes del cierre en el 2012, entre 200 y 300 personas llegaban cada mes al Parque Nacional, un 80% eran nacionales y el 20% extranjeros. Los nacionales pagaban ¢1.000 y los turistas $6.